Capítulo 8 – Sin Delicadeza

Night mode
Pagina Anterior
Pagina Siguiente

1ª Parte (Punto de Vista de Rudeus)

Hace poco cumplí los 6 años, aunque mi día a día apenas ha cambiado en este tiempo.

Por la mañana entrenamiento con Paul, y cuando no tengo nada que hacer por la tarde, investigo y pruebo técnicas mágicas por la pradera del árbol enorme, como por ejemplo, intento acelerar mis ataques con espada o ser capaz de hacer movimientos evasivos bruscos utilizando magia de Viento,  o conjurar suelo embarrado o pequeños surcos con arenas movedizas para impedirle el movimiento a mis adversarios con magia de  Tierra…

Puede que haya gente que cree que tu habilidad con la espada no mejora  si dependes de trucos sucios como esos, pero no soy de   esos.

Personalmente creo que hay 2 formas de convertirte en un buen combatiente; la primera es buscar estrategias con las que derrotar a enemigos más fuertes que tú, y la segunda es entrenar y mejorar tu habilidad básica.

Y  ya que mi  meta es vencer a  Paul, ahora mismo estoy más centrado en   la primera de esas 2  formas. Paul es un rival MUY duro. Puede que no   sea suficiente maduro como padre, pero como espadachín es de lo mejorcito.

Seguramente si me centrara en el segundo método, entrenando  sin descanso a diario, llegará el día en que pueda con él. Pero si lo piensas, ahora mismo tengo 6 años, dentro de 10 tendré 16 y Paul 35, si me toma más tiempo quizás le venciera a los 21, cuando Paul tuviera   40.

Pero ganarle llegado este punto pierde todo el sentido. Si soy incapaz de ganarle cuando era su mejor momento, siendo Paul seguro que me dice algo como: Ahh, ojala mi cuerpo respondiera como antes… . Además que yo mismo sólo le veo sentido si soy capaz de  venderle  estando  él  al 100%.

Actualmente Paul tiene 25 años, y aunque hace años que dejó de ser aventurero, su cuerpo está en su mejor momento y seguramente se  mantenga así hasta los 30, así que espero poder ganarle al menos una vez  en los próximos 5 años. Si fuera posible me gustaría ganarle combatiendo únicamente con espada, aunque si fuera imposible, mezclaría hechizos mientras intercambiamos golpes cuerpo a  cuerpo.

Y pensando así, continúo mi entrenamiento contra mi imagen mental de Paul.

 

2ª Parte

Cada vez que voy a la pradera con ese árbol enorme, tengo muchas posibilidades de encontrarme allí con  Sylph.

«Perdona, ¿llevas mucho rato esperando?»

«No, yo también acabo de  llegar.»

Tras decirnos unas líneas similares a las que se diría una pareja de enamorados, nos disponemos a jugar  juntos.

Las primeras veces, el Somar o como se llame de la otra vez junto con el resto de sus amigos venían corriendo a  molestarnos;  en  algunas  ocasiones, venían acompañados de niños mayores, aunque siempre conseguimos echarles. Y todas y cada una de las veces,  la  madre  de  Somar acababa viniendo a casa a quejarse, vete a saber porqué. Pero un día finalmente comprendí el motivo, con la excusa para venir a discutir sobre los incidentes que tenemos con su hijo, viene a  ver a  Paul por el    que resulta que está coladita… Manda  huevos.

Creo que hasta Somar empieza a estar cansado del tema, viendo la cara que pone cada vez que su madre le trae. Parece que nunca ha fingido lesiones, seguramente el barro que le tiré le hizo alguna molestia en los ojos, me siento tan mal al pensar mal de él… Pero ya han venido  a quejarse 5 veces, así que me importa más bien  poco.

Y un extraño día dejaron de venir a molestarnos, como si hubiéramos pasado el evento de este juego. En ocasiones vienen a ver lo que hacemos   y se quedan por los alrededores, pero si no nos cruzamos abiertamente no nos dirigimos la palabra.

Así que da la impresión que han decidido ignorarnos  completamente, dando a entender que el incidente se ha resuelto definitivamente y que el árbol de la pradera se ha convertido en nuestro  territorio.

 

3ª Parte

Con la excusa de que estamos jugando, he empezado a enseñarle magia a Sylph.

Mi idea es que si pudiera usar magia, sería capaz de defenderse por sus propios medios.

Al principio Sylph sólo podía lanzar 5 o 6 hechizos antes de quedar agotado, pero en apenas 1 año, su capacidad mágica ha aumentado considerablemente, hasta el punto de que es capaz de practicar magia durante medio día sin cansarse.

El maná máximo de una persona es definido al  nacer.

Esta línea de la guía mágica no parece ser muy veraz. Pero otras anotaciones sobre la especialización en hechizos, parece  que  sí  son ciertas. Como lo de las escuelas que se dan peor y mejor, que a Sylph, por ejemplo, se le da bastante mal la magia de Fuego, sin embargo es muy bueno con los hechizos de Agua y  Viento.

¿Por qué será? ¿Tendrá algo que ver su  sangre  Élfica? Personalmente,  lo dudo…

Según Roxy, existen las Especializaciones y Limitaciones en escuelas de magia, en este caso, los elementos. Por lo que me dijo, todo el mundo  tiene escuelas de magia con las que son mejores y   peores.

Por mis dudas y mi afán por descubrir decidí preguntarle a  Sylph si  le  daba miedo el fuego. Y Aunque me respondió que no, pude  ver  en  la palma de su mano una horrenda quemadura. Parece que cuando tenía 3 años, estuvo jugando a escondidas de sus padres y acabó agarrando una barra de metal que había en su  chimenea.

«Pero eso fue hace mucho, ya no me da  miedo.»

Por mucho que diga eso, podría temerlo subconsciente y eso podría afectarle limitando instintivamente los hechizos de  Fuego.

Si te paras a pensarlo, usando a los enanos como ejemplo, la mayoría de ellos tienen problemas con hechizos de Agua, aunque tienen soltura con hechizos de Fuego y Tierra.

Por lo general, los enanos siempre viven en zonas montañosas, jugando   en  zonas donde la  tierra es un amigo más. Cuando crecen, aprenden el   arte de la forja de sus padres y el arte de excavar minerales en las minas durante la mayoría de su adolescencia, y esto posiblemente influya en su afinidad con la tierra y el fuego. Sin embargo, algunos eventos en la montaña tales como inundaciones por las lluvias o aguas subterráneas pueden causarles traumas y miedo al agua que le bajen la afinidad con el elemento.

Mi teoría es que las especializaciones y limitaciones vienen derivadas de  la exposición continuada a un elemento y traumas por eventos peligrosos, implicando que las razas no influyen lo más mínimo en los elementos con los que posees soltura o te  cuestan.

Y debo de añadir que en mi caso no poseo ningún elemento o escuela de magia que se me dé peor, posiblemente por la falta de eventos traumáticos en mi infancia, sin contar los traumas  sociales.

Por otro lado, no necesitas exactamente fuego para generar viento o agua templados, pero explicarle todos los conceptos físicos como la vibración molecular supondría un problema, así que sencillamente lo dejaré en  magia de Fuego.

Pero quiero que la aprenda porque creo que ser capaz de usar fuego en cualquier momento es muy beneficioso para el día a día.  Sólo  con calentar ingredientes y  utensilios puedes desinfectar una gran variedad  de bacterias, y nadie disfruta muriendo por una intoxicación alimentaria, así que la magia de Fuego, aunque sea para cocinar la comida correctamente es necesaria. Aunque también es cierto que con la magia Desintoxicante de nivel Básico se pueden neutralizar la mayoría de venenos.

Pero bueno, aunque Sylph tiene problemas con los hechizos de Fuego, no  se queja y sigue entrenando; seguramente porque fue él mismo quién me pidió que le enseñara.

Y he de decir que cuando Sylph está totalmente concentrado mientras utiliza mi báculo (el que Roxy me regaló) siguiendo los pasos de la guía   de estudio sobre la magia (traída desde casa), su belleza aumenta enormemente. Hasta el punto de que, hasta yo, que me atraen sólo las mujeres, debo de aceptar lo guapo que es. Estoy seguro de  que en  el  futuro será muy popular.

Un corazón celoso es un corazón  enamorado.

Una voz interior se deja escuchar en mi cabeza, que me lleva a gitar la cabeza instintivamente para acallarla.

No, no. No estoy celoso y mucho menos por eso, además de que la estrategia a seguir es clara y perfecta: El cebo  Ikemen.  Siendo  un grupo formado por Sylph, el fantástico ikemen, y por mí, el chico del montón, las mujeres vendrán en masa a nosotros,  lalala.

Nota: Ikemen: Palabra japonesa que significa joven guapo, genial y divertido, normalmente para adolescentes. Se diferencia de Bishounen en que estos últimos tienden a ser enlazados más con el término andrógino y los ikemen son un atractivo más mundano.

«Ey, Rudi, ¿Cómo se lee  esto?»

Mientras canto para mis adentros, Sylph señala con el dedo un párrafo de la página del libro mientras me mira levantando la  vista.

¡¡Esa mirada es demasiado poderosa!! ¡¡PELIGRO. PELIGRO. SE APROXIMAN DESEOS DE ABRAZAR Y BESAR AL IKEMEN!!  ¡Debo soportarlo!

«Un segundo que mire… ah, eso es 『 GLACIE-TORRENTIA 』 , aunque también se le llama alud.»

«¿Eso qué es?»

«Un alud es una gran cantidad de nieve que se ha  acumulado  en  una cornisa o en una pendiente, y acaba cediendo por la cantidad de peso que   es incapaz de soportar, dejando caer una gran cantidad de nieve. En invierno, la nieve de vez en cuando cae en masa de los tejados, ¿no es cierto? Pues esto es una versión muchísimo más grande de  eso.»

«Ahh, entiendo… es bastante increíble, ¿lo has visto ocurrir alguna vez?»

«¿Un alud? Por supuesto…. que  no.»

Verlo en televisión no creo que  cuente.

Mi idea es aprovechar que Sylph estudie por sí sólo la guía y, al mismo tiempo, aprovechar para enseñarle a leer y  escribir;  principalmente  porque no le veo ningún aspecto negativo, y eso que no conozco el porcentaje de población iletrada de este mundo, aunque dudo que llegue al casi 0% de Japón.

Y por lo que sé, no existe ningún conjuro que permita comprender  y utilizar idiomas en este mundo. Aunque creo que cuanta menos gente sepa leer, que tú sepas tiene un gran valor  añadido.

«¡¡Lo conseguí!!»

Oigo a Sylph lanzar un grito triunfal, y al girarme llego a verle castear el hechizo de Agua de nivel Intermedio, 『 GLACIE-APICEM 』 , también conocido como estalagmita de Hielo, que conjura un pilar helado y puntiagudo que sobresale de la tierra el cuál se encuentra brillando ahora mismo por los rayos del sol.

«Cada vez se te da mejor, no te ha costado  mucho.»

«¡¡YEP!! ….. Aunque el libro no explica lo que usaste la otra vez, ¿o sí?» Sylph pregunta inclinando la cabeza.

«¿Hm?»

Por lo que dice, creo que se refiere al conjuro que usé para invocar agua caliente, así que paso las páginas y le muestro las páginas en las que aparecen los hechizos.

«¿No los viste? Esa vez usé cascada y manos ardientes, ¿ves?.»

«…….¿?»

«Tienes que usarlos a la vez.»

«…….¿?»

Vuelve a inclinar todavía más su  cabeza.

«¿Cómo pronuncio los dos conjuros al mismo  tiempo?»

Mierda, me dejé llevar por el momento. Ahora que lo pienso, el libro no explica como conjurar dos hechizos al mismo tiempo… Tras este fallo ya  no puedo meterme con Paul cuando hace algo sin  pensar.

Viendo la situación, decido mostrarle un ejemplo de conjuración en  silencio en la que lanzo los 2 hechizos al mismo tiempo; a lo que Sylph se sorprende enormemente.

Conjurar en silencio está catalogado como una habilidad compleja que sólo pueden realizar los magos de mayor nivel. Aún tras explicárselo a Roxy, ella era incapaz de imitarme y por lo que dijo, sólo 1 profesor de la Universidad de Magia puede hacerlo. Por esto, decidí no  enseñarle  a  Sylph la conjuración en silencio, sino los hechizos combinados que me enseñó Roxy.

Personalmente opino que no es tan complicado como lo pintan, pero si    los resultados son los mismos no vi la  necesidad.

«Enséñame a hacer eso.»

«¿A qué te refieres con eso

«Lo que haces para no tener que pronunciar los conjuros.»

Pero parece que Sylph no opina  igual.

Por supuesto entiendo la idea de que es mejor usar 2 conjuros sencillos al mismo tiempo que pronunciar un conjuro más largo y complejo de magia combinada.

Jum… Bueno, se lo enseñaré a ver si es capaz de hacerlo, y  cuando vea que no puede él mismo optará por la magia  combinada.

«De acuerdo. Para empezar, simplemente tienes que fijarte en lo que  sientes al pronunciar el conjuro y  lo repites en tu cabeza. Principalmente  se trata de reunir el maná que posee tu cuerpo en la punta de tus dedos e imitar como actúa ese maná mientras pronuncias el conjuro. Así que  intenta reunir el maná por ti mismo, e intenta recordar como hace  el hechizo para llevarlo al exterior. Para practicar, intenta  hacer  de  esa forma un Disparo de Agua.»

¿Se lo habré explicado bien? Realmente no  tengo idea de  cómo expresar  el flujo del maná en el  cuerpo…

Sylph por su parte, cierra los ojos y se concentra dejando escapar un hmmmm de sus labios, y retuerce todo su cuerpo como si bailara de forma graciosa.

Imagino que probar a hacer algo basándose en sensaciones y una explicación tan ambigua debe de ser difícil. Si conjurar en silencio es aplicar el proceso del hechizo usando la mente, significará que cada persona sigue un método personal  propio.

Al principio pensé que las bases eran lo más importante, así que dejé que Sylph conjurara como viene en la guía durante un año entero, y seguramente, cuanto más veces ejecutes el conjuro normalmente más  difícil se hará conjurar en silencio. Como cuando te acostumbras a usar tu mano derecha para hacer cosas y decides empezar a usar la  mano izquierda, el cambio brusco convierte todo lo que hagas en una tarea extremadamente difícil.

«!Lo conseguí! ¡¡Rudi, lo conseguí!!»

Pues parece que no va a ir como  esperaba.

Sylph grita alegremente mientras continúa lanzando varias veces el hechizo.

Parece que no pasa nada si te acostumbras a conjurar de forma normal durante un año, como cuando los niños le quitan los ruedines a la bicicleta. Quizás sea por la facilidad que tienen los niños para aprender, ¿o es cosa de un talento innato por parte de  Sylph?

«Bien hecho. Pues bien, vamos a probar a conjurar en silencio todos los hechizos que has aprendido hasta ahora.»

«¡¡Vale!!»

Sea cual sea el motivo, me será más fácil enseñarle si él también usa conjuros en silencio, ya que ambos lo haríamos de la misma  forma.

«¿Hm?»

De buenas a primeras, gotas de lluvia comienzan a caer sobre nosotros,  miro al cielo y veo que lo cubren nubes bastante negras. En apenas unos segundos después, comienza a llover  fuertemente.

Por lo general le prestó atención al  tiempo para  asegurarme que  llego  seco a casa, pero como Sylph fue capaz de hacer algo inesperado como conjurar en silencio no le presté atención esta  vez.

«Ah—uff, no parece que vaya a parar y llueve bastante.»

«Rudi, si puedes conjurar lluvia, ¿no puedes hacer que  pare?»

«Aunque pueda, ya estamos mojados. Además, los cultivos necesitan el agua de lluvia, así que no interferiré con el clima a menos que cause estragos en la aldea.»

Viendo que no iba a parar, decidimos ir corriendo a mi casa ya que la casa de Sylph está demasiado lejos.

 

4ª Parte

 

«Ya estoy en casa.»

«Perdón por venir sin avisar…»

Nada más entrar en casa me encuentro con Lilia, nuestra sirvienta, lleva   en sus manos una toalla grande y parece que me estaba esperando en la entrada.

«Bienvenido a casa, Rudeus-sama…. veo que viene acompañado; bienvenido a la residencia de los Greyrat. Ya he preparado el  agua  caliente, así que antes de que cojáis frío, os recomiendo ir a la segunda planta a secaros; os prepararé una muda. El Señor y la Señora Greyrat volverán pronto, así que debo cumplir con otros menesteres, por lo que llamadme si me necesitáis.»

«De acuerdo.»

Seguramente Lilia imaginó que volvería pronto a casa empapado por la lluvia. No es persona de demasiadas palabras, y parece que conmigo aún más, pero está claro que es una sirvienta competente; sin necesidad de decirle nada ha traído otra toalla para Sylph en cuanto ha visto que  no venía solo.

Dejamos los zapatos en la entrada, nos secamos los pies y nos dirigimos a  la segunda planta mientras nos secamos el pelo. En el centro de la habitación hay una cubeta grande con agua  caliente.

Se me olvidó decir que en este mundo no poseen el aspecto cultural de duchas o baños tan propios de Japón, se conforman con frotarse con agua de una cubeta para lavarse. Aunque según Roxy, en algunas zonas tienen termas naturales. Aunque claro, yo que no soy muy de duchas, no    le veo demasiado inconveniente. 

«¿Hm?»

Conforme me desnudo para lavarme, me fijo en que Sylph está algo inquieto y sonrojado.

«¿Te pasa algo? Si no te quitas esa ropa mojada te vas a resfriar.»

«¿EH? Mm-mmmm……»

Pero Sylph sigue inmóvil.

¿Será que le da vergüenza desnudarse delante mía?…. Oh, ¿quizás lo que pasa es que no sabe quitarse sólo la ropa? Después de todo tiene sólo 6 años.

«Venga va, levanta las manos.»

«Pero….. esto….»

Sylph me hace caso y levanta las manos, y le ayudo  a  quitarse  la  camiseta. Ante mis ojos veo su piel pálida sin tono muscular, y  cuando  voy a ayudarle a quitarse los pantalones agarra mis  manos.

«N-no……»

¿Tanta vergüenza le da desnudarse delante mía? Aunque ahora que lo pienso, cuando yo era joven me pasaba lo mismo. En parvulitos, me daba muchísima vergüenza cuando después de las clases de natación, teníamos que usar a los baños comunitarios.

Pero en este caso, las manos de Sylph están heladas. Si no empieza a secarse va a acabar resfriado de verdad, así que un  poco a  la  fuerza le  bajo los pantalones, para ver si así deja de  avergonzarse.

«P……para….»

En cuanto intento ayudarle con su ropa interior, parece que llega al límite porque me pega un coscorrón fuerte. Levanto la mirada y veo que entre lágrimas me mira enfadado.

«Te vas a resfriar… te prometo que no me voy a reír…»

«N-No es eso…..¡¡Q-QUE NO!!…»

Se niega en rotundo. Me quedo bastante sorprendido, es la  primera vez  que le veo ponerse así.

¿Es posible que exista algo como que los elfos no pueden ser vistos desnudos? Si eso fuera cierto, sería mala idea desnudarle a la   fuerza…

«De acuerdo, de acuerdo… Pero debes de prometerme que vas a cambiarte después. Cuando tu ropa interior está mojada acaba siendo muy molesto y  si coges demasiado frío, te acabará doliendo todo el  cuerpo.»

«Vale….»

Suelto su ropa interior, y Sylph acepta con la cabeza un tanto   lloroso.

Qué mono es, de verdad, quiero llevarme bien con un pequeño tan adorable. Pero de improviso, siento unas ganas irrefrenables de gastarle una broma, porque no es justo que sólo yo me haya desnudado completamente.

«¡Te pille!»

Y de una sola tacada le bajé la ropa interior hasta los   tobillos.

¡¡Veamos ese péndulo imberbe!!

«¿E………h? ¡¡NOOOO!!»

«…………. ¿Eh?»

Sylph se pone a gritar, y se tapa con las  manos.

Lo que hubo frente a mis ojos no fue la común y sagrada espada corta. Y por supuesto, tampoco era una hoja sacrílega teñida de negro. Lo que encontré… o lo que no encontré………………….. Vamos, que no tenía nada. No tenía lo que debía de tener en  ese lugar,  pero  lo  que tenía era algo  que había visto innumerables veces. A veces oculto por un mosaico, otras veces por círculos y a veces hasta al natural. Algo que hasta hoy todavía no he conseguido alcanzar, deseando que el bosque frondoso recoja todo el roció de mis alargadas ansias, que unas toallitas necesiten limpiar………. Y eso es exactamente lo que  vi.

En Sylph. Porque él….. es un  ella.

Entro en colapso.

¿No acabo de hacer algo  imperdonable…..?

«Rudeus, ¿Qué ha pasado….?»

Mi cuello da un violento giro y me encuentro a Paul en la   puerta.

¿Cuándo volvió? ¿Acaso vino corriendo al escuchar el  grito?

No me muevo ni un milímetro, igual que  Paul.

Sylph arrodillada, llorando, tapándose como puede y completamente desnuda. En mis manos todavía tengo su ropa interior.  El  pequeño  Rudeus se muestra en todo su esplendor. Esta escena es suficiente explicación, no hay justificación que valga.

Mi cuerpo pierde su fuerza y de mis manos cae aquello que   sujetaban.

Sé que la tromba de agua no ha parado todavía, pero sólo puedo percibir    el ruido silencioso de esa prenda llegando al  suelo.

 

5ª Parte (Punto de Vista de Paul)

En cuanto llegué a casa después de trabajar me encontré a mi  hijo acosando sexualmente de su joven  amiga.

Estuve a punto de ponerme a gritar, pero decidí tomármelo con cautela.  Cabe la posibilidad de que en esta ocasión también haya un motivo oculto que desconozco, después de todo no puedo meter un patazo tan grande como el de la última  vez.

Pero, en cualquier caso, tapé con una toalla a la pequeña y dejé que Zenith   y Lilia se la llevaran. Después me dispuse a ayudar a lavarse al pequeño Rudi con el agua que había en la  habitación.

«¿Por qué le hiciste eso?»

«Lo siento mucho.»

El año pasado cuando le regañé por primera vez, me mostró una voluntad de hierro que no tenía intención de disculparse, pero en esta ocasión no ha dudado ni un instante; por no decir que su actitud es bastante extraña, parece bastante deprimido.

«¿Me explicas lo que pasó?»

«Estábamos empapados por la lluvia y pensé que era mejor cambiarnos de ropa…»

«¿Y ella se negó?»

«Sí….»

«¿No te expliqué en su día que a las chicas hay que tratarlas con cariño y respeto?»

Rudeus no se inventa ninguna excusa, ¿y qué hacía yo a su edad? Pues recuerdo muchas conversaciones con, Pero y Eso no cuenta, excusas por todas partes… Aunque quizás no debería, pero estoy orgulloso de su actitud. 

«Bueno, todos los niños sienten cierto interés con el tema, pero forzar no está permitido nunca.»

«………….. Lo entiendo y lo siento. No volverá a   ocurrir.»

Viendo a mi hijo tan decaído siento lástima por él, parece que algo lo ha dejado en shock.

El gusto por las mujeres es la maldición de mi  familia. A su  edad, cada vez que veía una chica guapa, intentaba conquistarla enérgicamente sin falta; y aunque actualmente me he encarrilado, he de reconocer que por aquel entonces no conocía el significado de  auto-control.

Y esta maldición es seguramente hereditaria. Hasta podría añadir que mi hijo, siendo tan lógico y organizado, tiene sentido que se esté volviendo loco por los instintos que le asaltan. ¿Cómo pude no darme cuenta antes….? No, no es momento de simpatizar con él, mi obligación es enseñarle y educarle utilizando la experiencia que  poseo.

«No es a  mí a  quien debes pedirle perdón. Debes disculparte con    Sylphy, ¿entendido?»

«Sylph-y……. ¿Crees que me perdonará?»

Mi pequeño se deprime todavía más después de pronunciar esas   palabras.

Ahora que lo pienso, Rudi está bastante encariñado con esa  chica,  después de todo el año pasado también se metió en problemas para protegerla; llevándose hasta una bofetada por mi  parte.

Y tras eso, han jugado juntos a diario y la ha  protegido de  los demás niños, y todo sin faltar nunca a  sus prácticas de  espada y  entrenamiento  de magia. Pasado un tiempo, cuando ya eran mejores amigos le prestó la guía sobre magia y hasta llegó a regalarle su preciado báculo, que era un recuerdo de Roxy.

Puedo comprender que se sienta tan mal sabiendo que la pequeña podría llegar a odiarle, a mí me pasa lo mismo cuando alguien que me importa acaba odiándome.

Pero hijo, no tienes de qué preocuparte. Por mi experiencia con el sexo opuesto, creo que tienes una probabilidad enorme de  darle la vuelta a  este incidente.

«Claro que sí, te lo prometo. Hasta este momento nunca  te  has portado  mal con ella, así que si te disculpas con total sinceridad, estoy seguro de que te perdonará.»

Reconozco fácilmente los signos que me muestra mi pequeño al comenzar  a animarse.

Con lo listo que es, estoy seguro de que aún habiendo hecho algo tan excesivo conseguirá rescatar su amistad con Sylphy. Por no decir que le creo capaz de hasta aprovechar esta metedura de pata para conquistarla. Es tan fiable que me da algo de  miedo.

Y tras asearnos juntos, lo primero que le dijo a Sylphy   fue:

«¡¡Lo siento de verás, Sylph. Como siempre te he visto con el pelo tan corto, creía que eras un  chico!!»

Y descubro que el hijo que creía tan perfecto, puede ser todo un lerdo en algunos temas… Nunca lo habría imaginado si esto no hubiera  pasado.

 

6ª Parte (Punto de Vista de Rudeus)

Tuve que disculparme, consolarla, y elogiarla para obtener su  perdón.

Y ya que Sylph es una chica, he decidido llamarla Sylphy a partir de ahora. Además, he descubierto que su nombre completo es  Sylphiette.

Mira que confundir a una niña tan mona con un chico… Me dio la  impresión de que Paul se quedó sin palabras al darse cuenta de mi error.  Ni en sueños creí que sería posible que me  ocurriera el  evento  ¡¡¿En serio eres una chica?!!. ¿Pero cómo iba yo a  saberlo? Su  pelo era hasta más corto que el mío cuando nos conocimos, ya que en este mundo  los chicos no tienen porqué cortarse mucho el pelo, pero su pelo me recordaba a los peinados masculinos de Japón. Por no decir que no la he visto nunca con falda, sino más bien pantalones y camisa caquis; si alguna vez la hubiera visto con un vestido nunca la habría confundido de sexo.

Aunque… si lo pienso detenidamente, tiene sentido. La  acosan  por  su color de pelo, por lo que no me cabe duda que se lo cortaría mucho para evitar que fuera visible en la medida de lo posible. Además, ya que la acosaban casi a diario, a menudo intentaría salir huyendo para evitar a los otros niños, así que un vestido o una falda larga sólo conseguirían dificultarle el movimiento. Y finalmente, la familia de Sylphy no es demasiado adinerada, así que tras hacerle o regalarle  uno o  dos pantalones, no tendrían mucho más dinero para además incluir un par de faldas.

Aunque si nos hubiéramos conocido 3 años más tarde, quiero pensar que no hubiera cometido el error de pensar que es un chico. Estaba completamente seguro de que era un Bishounen, aunque no recuerdo ninguna actitud por su parte que fuera especialmente masculina. Si  ella….. Bah, mejor lo dejo; cualquier cosa que diga será una  excusa barata.

Y ahora que sé que es una chica, debo tratarla como tal, lo que lleva a que cada vez que estoy con ella, no acabo de adaptarme al   cambio.

«Aunque S-Sylphy, eres bastante guapa. ¿No has pensado  en  dejarte  crecer el pelo?»

«¿Eh…?»

Quizás si su apariencia cambiara un poco, mi mente se adaptaría mejor al cambio.

Lo que lleva a la conversación  anterior.

Y es que, aunque Sylphy odie su pelo, el brillo esmeralda que refleja cuando le da el sol es precioso, realmente me encantaría que lo tuviera más largo, y me gustaría todavía más si lo llevara con una coleta o con coletitas a los lados. 

«No quiero…»

Pero desde ese fatídico día, Sylphy parecía desconfiar de mí, y no sólo rechaza sugerencias como la anterior abiertamente, sino que evita especialmente cualquier cosa que implique contacto  físico.

Me ha dejado un tanto en shock ya que antes era más   obediente.

«Ya veo. Pues entonces empecemos el entrenamiento en conjuración silenciosa de hoy.»

«Vale.»

Me puse serio y cambie de tema para ocultar mis preocupaciones, ya que soy el único amigo que tiene, soy la única persona con la que puede salir    y jugar; llegando al punto de que, aun desconfiando un poco de mí, sigue queriendo jugar conmigo.

Y por eso, no dejaré que lo de hoy me   afecte.

 

7ª Parte

Desde que llegué a este mundo hasta este momento, he obtenido las siguientes habilidades:

 

Estilos de Combate.

Estilo del Filo Celestial

Iniciado

Estilo del Cauce Celestial

Iniciado

 

 

Magia Ofensiva.

Escuela de Fuego

Experto

Escuela de Agua

Santo

Escuela de Viento

Experto

Escuela de Tierra

Experto

 

Magia Defensiva.

Escuela de Curación

Experimentado

Escuela de Restitución

Iniciado

 

Los niveles son como siempre, en orden ascendente: Iniciado, Experimentado, Experto, Santo/Maestro,  Rey,  Emperador, Deidad. Suenan bien, pero pueden llegar a  marear.

Y está claro que, entre llamarme Maestro y Santo, no tengo duda de  cuál me atrae más.

Siguiendo la regla, las magias Defensivas tienen esos 7 rangos y tienen las

4 escuelas que son Curación, Restitución, Protección  y  Exorcización.  Pero por raro que parezca, a estas escuelas no se le aplican nombres tan chulos como Santo de Fuego o Emperador de Agua, sino que te llaman mago Curandero de nivel Superior o mago Restituyente de nivel   Imperial.

Esto es debido a que la magia Curativa es tal y como se entiende: magia  que cura heridas. Y en función de tu nivel, las heridas que  puedes  remendar van desde raspones y chichones hasta regenerar extremidades perdidas si llegas al nivel Imperial; pero no  tiene conjuros específicos  para ello salvo 『VITALIS』 y 『VITALIS-AMPLIA』.

El paso lógico en mi cabeza al llegar al nivel Divino era resucitar a los muertos, pero parece que es  imposible.

La magia Resituyente es algo más difícil de explicar, pero principalmente cura venenos y enfermedades. Aunque del nivel Superior en  adelante, tienes la capacidad de crear líquidos que pueden ser venenos o remedios para venenos. Por lo que me han contado y he podido probar e indagar, es de las escuelas más difíciles de  estudiar.

La magia Protectora es magia que mejora tus defensas principalmente usando barreras protectoras. Dejándolo simple, es magia pura de apoyo, y aunque no lo entiendo del todo, parece que tiene hechizos que permiten mejorar la regeneración, o calmar dolor forzando algunos compuestos naturales del organismo; aunque Roxy no puede usarla, así que no he lo    he podido comprobar.

La magia Exorcizante por lo que sé, es magia que es especialmente  efectiva contra espíritus o algunas razas malignas, aunque una coalizición de santos clérigos la mantiene en secreto, y no se enseña en  la  Universidad, así que Roxy no supo explicármelo  bien.

He de añadir que hasta la fecha no he visto ningún espíritu en mi vida, pero según me cuenta, los fantasmas y espíritus existen en este   mundo.

Mi forma de enseñanza depende enormemente de la conjuración en silencio, pero esta tiene el inconveniente de que, si no  comprendo  la  lógica o el funcionamiento del hechizo, soy incapaz este método. Por otro lado, existe la posibilidad de  que las magias Defensivas sigan una lógica   o sistema diferentes de las magias Ofensivas, por lo que no sé si estoy entrenándolas de forma equivocada.

Me da la impresión que con la magia todo lo  que  imagines es posible,  pero por ejemplo, he intentado hacer flotar cosas o atraerlas a mi mano usando sólo el poder de mi mente; y aunque por un lado siento que es posible, al no haber tenido nunca telequinesis soy incapaz de recrearlo usando la magia.

Para explicar más fácilmente mi limitación, comentar que no conozco en profundidad el proceso de curación de heridas, y por este motivo, soy incapaz de usar magia Curativa conjurando en silencio. Estoy seguro de  que si tuviera conocimientos avanzados en medicina sería capaz de  hacerlo.

Y lo mismo con el resto de escuelas, si conocieras la lógica o la base relevante de cada una. Podría incluso llegar al punto en el que si  en  mi vida anterior hubiera hecho más deporte, cabría la posibilidad de que mis técnicas con espada mejoraran a mejor  ritmo.

Si lo pienso de esta forma, me deprimo pensando que en mi anterior vida desperdicié el tiempo estúpidamente. Pero no, no puedo considerarlo un desperdicio. Es cierto que ni fui al colegio, ni trabajé, ni hice  más deporte, pero no es que haya dormido durante todo ese tiempo, sino que   leí cosas muy interesantes y variadas además de jugar a  muchísimos juegos mientras los demás estaban ocupados estudiando o trabajando. Y todo ese conocimiento, experiencia y formas de pensar pueden ser útiles  en este mundo. ¡¡Deben serlo…!! Aunque por el momento no me valgan para nada.

 

8ª Parte

Os voy a contar una cosa que me pasó mientras entrenaba con Paul.

«Haaaah…….»

Dejé escapar un enorme suspiro que pensé que molestaría a Paul, pero le veo sonriendo de oreja a  oreja.

«Jajaja. Déjame adivinar qué te pasa, Rudi. ¿Estás  triste  porque  Sylphiette todavía te guarda rencor?»

No estaba suspirando por eso. Pero, aunque no sea el motivo principal,  debo reconocer que el incidente con Sylphy es otro de mis problemas actuales.

«Tienes razón. No sólo sigo sin mejorar en los estilos de combate, además Sylphy me odia, como para suspirar, ¿no  crees?»

Paul me muestra una sonrisa propia del gato de  Chesire  y  apoya la  punta de su espada de madera en el suelo, después se apoya sobre la empuñadura y me mira con cierto aire de  superioridad.

No me puedo creer que este tipo se esté riendo de mí de esta   manera…

«Papi puede ayudarte con uno de tus  proble~emas…»

Pero va y dice algo inesperado, y mi mente se pone a  deliberar a  toda  prisa.

Padre = Paul = Extremadamente popular. Casado con Zenith, una mujer preciosa y atractiva, además de lo que pasó con la Sra.  Ada.  Hasta  cuando le toca el culo a Lilia parece gustarle a esta… ¿Acaso conoce alguna técnica secreta para que las mujeres no te odien? ¿Algún secreto de la vida offline? Aunque puede que no le comprenda del todo, porque Paul es una persona instintiva e irracional, quizás lo  que  me  cuente pueda darme alguna pista o serme de  ayuda.

«Te escucho atentamente.»

«Hmm, no sé, quizás no debería decírtelo…»

«¿Ni aunque te lama las botas?»

«No- eh, ¿Por qué actúas tan sumisamente  ahora?»

«Si no me lo dices, le contaré a mamá que de vez en cuando miras a Lilia como si fueras a comértela.»

«Y ahora vas con amenazas…. Espera… ¡¿Lo qué?! ¡¿Cuándo me viste?! V-Vale, vale, lo he pillado, no volveré a darme tantos   aires.»

Lo de Lilia era un farol… Pero podría ser… ¿Qué esté siendo  infiel  a Zenith? Bueno, no me voy a meter en ese asunto, aunque está claro que el tío es popular. Además de que lo que me va a decir me   interesa.

«Rudeus, escúchame atentamente. A las mujeres-»

«¿Sí?»

«Por lo general les gusta que los hombres sean fuertes, y no sólo físicamente. Pero también les encanta saber que no somos perfectos y que a veces nos venimos abajo.»

«Oh.»

Creo recordar haber leído algo así antes. Creo que era ¿instinto   maternal?

«Hasta ahora sólo le has enseñado a Sylphiette tus puntos fuertes, ¿no es así?»

«¿En serio? Porque no lo hice  queriendo.»

«Párate a pensar qué pasaría si alguien superior a ti te deseara y te forzara   a algo que no quieres.»

«Me asustaría.»

«¿Ves?»

Se refiere al día en el que él se convirtió en ella para   mí.

«Y por eso, lo que debes de hacer es mostrarle tus debilidades. El tipo de relación que debes de construir es aquella en la que  proteges a  alguien  con tus puntos fuertes mientras esa persona se encarga de proteger tus debilidades.»

«¡¡Oh!!»

¡Eso es fácil de entender! ¡Hasta el punto de que me hace pensar que Paul no es tan irracional como parece! No es bueno si tan sólo eres fuerte. Tampoco si sólo eres débil. ¡¡Para ser popular tienes que  ser  ambas  cosas!!

«¿Pero cómo le muestro mis  debilidades?»

«Eso es fácil, ¿estás preocupado ahora mismo?»

«Sí.»

«Pues sólo tienes que contarle las cosas que te preocupan a Sylphiette y lo habrás hecho. Por ejemplo, le cuentas que te deprime que haya estado tan distante contigo.»

«¿Y qué pasará si le digo eso?»

Paul se ríe y después me sonríe  mezquinamente.

«Si todo sale bien, ella misma será la que intente arreglarlo, puede que  hasta te acabe consolando, lo que conllevará que vuelvas a animarte, y ambos volveréis a ser los mejores amigos porque vuestros ánimos se  habrán recuperado.»

«¡!»

Esa es la respuesta, usar mi actitud para controlar lo que siente la otra persona… Increíble. A-aunque el plan podría fallar,  ¿no?

«¿Y-y si no funciona?»

«Me buscas y te enseñaré el siguiente  paso.»

Así que tiene más de 1 truco, será manipulador… ¡¡es un maldito liante!!

«Entiendo. En ese caso, ¡¡ahora vuelvo!!»

«Tú puedes.»

Paul me despide agitando una mano en el aire, mientras salgo corriendo totalmente ansioso.

«¿Pero qué le voy enseñando a mi hijo de 6 años…?»

Su voz no consigue alcanzar mis  oídos.

 

9ª Parte

Parece que he llegado al árbol demasiado pronto, Sylphy todavía no ha llegado.

Normalmente vengo más aseado, pero en esta ocasión estoy sudando a mares y  hasta me he traído conmigo la espada de madera. Como ya es  tarde para cambiar eso, doy golpes en el aire con mi espada mientras organizo mis pensamientos.

Según Paul, primero debo de enseñar mis puntos fuertes y que soy de confianza, tras eso debo mostrar debilidad… pero, ¿Qué debilidad y cómo la muestro? Vale, sí, puedo mostrar lo mal que me siento. ¿Qué más? Ah cierto, debo de controlar el ritmo de la conversación, ¿es mejor empezar con las debilidades? No, creo que sería demasiado forzado,  así  que  quizás  lo  mejor  sea  adaptarme  a  como  avance  la  conversación,  pero ¿podré-? No, lo haré.

Doy golpes al aire con mi espada intentando organizar mi confusión, pero en algún momento mi agarre en la empuñadura aflojó y la espada se me escapó.

«Guuh…..»

Esta cae justo frente a Sylphy y mi mente se queda en   blanco.

¿Q-Qué hago?¿Qué digo?

«¿T-Te pasa algo, Rudeus?»

Sylphy no parece estar tranquila.

¿Por qué será? ¿Acaso le molesta que haya venido sin  avisar?

«Ehr…. Haa—haa(jadeando), nada, es sólo que me apetecía verte hoy, ¿te ha molestado?»

«N-No, pero no me refería a eso, estás sudando.»

«Haa—haa(jadeando) ¿eh, sudando? ¿Y qué pasa…?»

Sigo jadeando mientras me aproximo, pero parece asustarse y retrocede unos pasos, como tantas otras veces, da la impresión de que no me quiere cerca.

¿Con lo loquito que estoy por ti y me rechazas de esta forma? Sólo bromeaba.

«…….»

Me limpio el sudor de la frente y respiro hasta relajar mi   respiración.

Mejor así.

Viéndola todavía tan distante, aprovecho para mostrarme totalmente apenado, me apoyo en el árbol y actúo como si estuviera dándole vueltas    a la situación en mi cabeza, dejando caer mis hombros y suspirando con fuerza.

«Haa…. Sylphy, últimamente estás siendo muy fría conmigo…»

El silencio se alarga tras mis  palabras.

¿No fue suficiente? ¿Debería decir o hacer más, Paul? ¿o me ha quedado falso?

«¡¡!!»

Noto como desde mi espalda agarra fuertemente una de mis manos, pudiendo notar la suave y tierna calidez de las suyas. Al darme la vuelta, frente a mí, veo que Sylphy es quién me ha cogido de la   mano.

¡W-Woahhh! ¡Me está tocando! Hacía mucho que no estábamos tan cerca el uno del otro. ¡¡Paul-san, lo  conseguí!!

«Pero es que, últimamente Rudeus, estás muy  raro…»

¿Mmm? Eso ya lo sé, no hace falta decir que no la he  estado tratando  como siempre tampoco.

Quizás desde el punto de vista de Sylphy, mi actitud ha cambiado demasiado. Un simil sería como el diferente trato que le puedes dar a una mujer que busca marido antes y después de saber que es   multimillonaria.

Pero aunque entienda que es normal que se sienta incómoda, ¿qué otra cosa podía hacer? Nunca, ni en mi anterior vida, he tenido una relación tan cercana con una chica tan linda, ¡es imposible no estar tenso! Es una jovencita preciosa de mi misma edad, no tengo ni idea de como actuar cuando estoy con ella. Si fuéramos mayores, o hasta si  Sylphy  fuera  mayor que yo, podría intentar usar lo que sé de los Eroges para encauzarlo. Pero se me da fatal sociabilizar, si hasta cuando la consideraba un chico, la trataba siguiendo mi forma de actuar con mi hermano pequeño… Pero no sólo es una chica de mi edad,  sino  que  encima somos amigos.

Claramente he jugado a eroges con un argumento parecido en  el  que podías llegar a  conseguir llevarte bien con la chica de formas eróticas,  pero para empezar es ficción y para continuar, sencillamente no  quiero  que tengamos ese tipo de relación porque Sylphy es demasiado  joven.

Está fuera de mi rango de acción, mi campo AT no la deja pasar. Aunque todo sea dicho, esto es algo temporal… ¡¡Espero ansioso su evolución en años venideros!! Aunque dejemos eso a un lado por el momento.

Actualmente es una niña a la que estaban acosando social y físicamente, y aunque en su día nadie me ayudó cuando me pasó lo mismo, desde el primer momento deseaba y esperaba poder ser el aliado que necesita, sin importar de si es un chico o una chica; y esto es algo que no va a cambiar nunca. El problema es que no puedo tratarla como un chico que es lo que hice hasta ahora, lo que me llevó a bajarle las bragas a la fuerza… Y como actualmente yo también soy un niño, espero que podamos  crear  una bonita amistad.

¡¡En pos de nuestro futuro juntos!! Urgh…. parece que se  mezclan ideas  en mi cabeza, ¿qué hago? Luego le preguntaré a  Paul…

«……Lo siento Rudeus, aunque quiero que sepas que no te odio.»

«S-Sylphy…»

Después de lo que seguramente fuera una expresión personal de derrumbe por mi parte, Sylphy levanta su mano y acaricia mi cabeza mostrándome una sonrisa aliviada y gentil.

DOKI-DOKI

No me puedo creer que, aunque haya sido claramente culpa mía sea ella    la que se haya disculpado.

Aprieto suavemente la mano que tenía sobre mi cabeza, y Sylphy levanta   la mirada, con las mejillas sonrojadas.

«Entonces… ¿Podemos volver a cómo éramos?»

El efecto que siento al oírla decir esa frase mientras levanta la mirada es extrañamente fuerte y es suficiente para eliminar mis  dudas.

Lo he  decidido. Lo  que ella desea es que nos llevemos como antes, así  que para mantener el antiguo statu quo, necesito tratarla como hasta ahora, ni más ni menos.

De esa forma conseguiré que no me tenga miedo ni que  estemos incómodos, y para conseguirlo necesito obviar en mi cabeza que es una chica para seguir como hasta ahora.

En definitiva, eso, no me queda otra. Pues adelante. Actuaré como un protagonista de tipo Donkan.

Pagina Anterior
Pagina Siguiente
Translate »