El Anciano Ouyang dio a Wang Lin una mirada desdeñosa. El dijo: –Usted es sólo un junior. ¿Qué derecho tiene para intercambiar conmigo? ¡Si usted da el tesoro dejado por el fundador de la Secta Heng Yue, podría intercambiar una gota de veneno con usted!
Wang Lin frunció el ceño. En secreto, se burló. Luego, activó su técnica ‘Fuerza de atracción’ a toda potencia y lo agarró.
La cara del Anciano Ouyang al instante cambió. – ¡Junior, cómo se atreve!– Con eso, agitó una manga y una antigua espada voladora salió. En el momento que apareció, el viento se empezó a reunir y formó una espada gigante en el aire. Luego descendió hacía Wang Lin.
En el momento que apareció la espada, una pizca de instinto asesino se vio en los ojos del Anciano Ouyang. Este discípulo era simplemente demasiado fuerte y se convertirá en una amenaza para su Secta Xuan Zong Dao en el futuro. Quería aprovechar esta oportunidad para destruir su cultivo.
La cara de Huang Long se oscureció. Se dio cuenta de la intención de Ouyang e inmediatamente sacó su espada. Wang Lin dejó escapar una risa. Su técnica ‘Fuerza de atracción’ llegó a su límite y la mano invisible que creó se volvió visible.
Dos grandes manos que emiten luz blanca aparecieron. Remolinos de luz aparecieron alrededor de las manos y todas las nubes que las rodean se dispersaron.
Una de las manos gigantes agarró del cuello del ciempiés. La otra se elevo y bloqueó la espada que descendía.
La espada que se balanceaba hacia abajo se ralentizó hasta que se detuvo en el aire. La cara del Anciano Ouyang estaba toda roja cuando él reveló una expresión de horror.
Los otros dos ancianos apretaban los dientes. Sin tener en cuenta su estado, uno escupió una luz iridiscente y se convirtió en una cinta que se disparó hacia Wang Lin.
Mientras tanto, el otro anciano uso una pieza de jade. Ocho bolas de fuego fantasmales aparecieron y se dispararon hacia Wang Lin.
Una fuerte ola de calor alcanzó a Wang Lin, pero su expresión no cambió en absoluto. Creó otra mano con su técnica ‘Fuerza de atracción’. Esa mano empezó a girar creando un remolino de viento a su alrededor, haciendo que el fuego fantasmal desapareciera.
Todo esto sucedió muy rápidamente. Huang Long soltó un rugido furioso y formó un sello con la mano. Su espada Voladora, Luna púrpura, se dirigió hacia la cinta iridiscente.
En este instante, Wang Lin se movió rápidamente hacia el ciempiés de mil patas. Con su ‘Fuerza de atracción’ sostuvo al ciempiés, no importa que tanto el ciempiés forcejeara, no pudo liberarse. Wang Lin puso su mano derecha sobre la cabeza del ciempiés y activó su energía espiritual. El ciempiés dejó escapar un aullido doloroso y tosió una niebla negra.
Todo esto duró sólo unos segundos. Nadie siquiera tuvo tiempo de reaccionar aún. Los ancianos de ambas sectas estaban a cada lado del ciempiés, listos para luchar. Cuando Dao Xu vio al ciempiés toser el veneno, tenía miedo de que Wang Lin no tuviera nada para contenerlo, por lo que hizo un gesto con la manga y tiró una botella blanca. Gritó, – ¡Discípulo Wang Lin, usa esto para guardar el veneno!
Después de eso, tomó su espada voladora y comenzó a luchar con el anciano de la Secta Xuan Zong Dao que uso el fuego fantasmal.
Los tres ancianos de la Secta Xuan Zong Dao estaban furiosos por ser detenidos por los ancianos de la Secta Heng Yue y fueron incapaces de detener a Wang Lin.
Cuando Wang Lin vio que el ciempiés tosió el veneno, rápidamente se movió un poco hacia atrás. Tomó la botella y utilizo su energía espiritual para mover el veneno a la botella.
El Anciano Ouyang gritó furiosamente, – ¡Secta Heng Yue, ha ido demasiado lejos!
Huang Long suspiro en secreto. Guardó su espada y retrocedió. Los otros ancianos hicieron lo mismo.
La cara de Wang Lin mostró indicios de arrepentimiento. El veneno de este ciempiés podría ser la cura para las secuelas de su padre, por lo que se decidió a conseguirlo no importa qué. Él juntó las manos y dijo: –Anciano Ouyang, el veneno de este ciempiés es muy importante para mí. Tengo algo que puede ser considerado adecuado para intercambiar–. Con eso, lanzó una botella de jade de apariencia ordinaria. La botella estaba llena con el agua de manantial de ‘atrás de la montaña’ con la que se abastecía.
La cara del Anciano Ouyang era hosca. Estaba a punto de hablar cuando examino con cuidado la botella de jade. Él frunció el ceño y dijo: –He oído que, hace quinientos años, varios cultivadores de Alma Naciente de la Secta Heng Yue se establecieron en una zona con una alta concentración de energía espiritual. Este líquido vino de allí ¿no?
Cuando se abrió la tapa de la botella, una fuerte aura de energía espiritual se filtró. Huang Long dio un vistazo a la botella de jade y luego se frotó la barba. El dijo: –Este chico, incluso trajo una botella de agua de manantial.
El Anciano Ouyang gruñó. Con la botella en la mano, dijo: –Compañero Huang Long, su Secta Heng Yue tiene un muy buen discípulo. ¡Adiós!
Con eso, echó un vistazo a Wang Lin. Después de pensar por un tiempo, dio un mensaje a Wang Lin, –Sobrino y discípulo Wang, puede olvidar este asunto sobre el veneno del ciempiés, pero la Secta Heng Yue ya no tiene ningún antepasado de Alma Naciente que vele por ella, por lo que ya no es un buen lugar para residir. ¡Cuídese!
Con eso, tocó el ciempiés de mil patas. El ciempiés miró a Wang Lin y voló hacia el norte.
En ese momento, Wang Lin se dio cuenta de que, además de ese ciempiés, había un par de hermosos ojos que lo miraban.
Él se sorprendió. En su mente aún estaba haciendo eco las palabras del Anciano Ouyang. En cuanto a la dueña de ese par de hermosos ojos, después de mirar a la persona una vez, ni siquiera la guardo en el corazón.
Después de que la Secta Xuan Zong Dao se fue, todo el pico del pino azul estaba en silencio. Los ojos de Huang Long barrieron la zona. Sonriendo, dijo, – ¡La competencia de hoy fue ganada por mi Secta Heng Yue! ¡Todos los discípulos internos serán recompensados! Todos ustedes pueden ir a la casa de la píldora para conseguir una botella de píldoras de ganancia de Qi. Todos tienen que seguir el ejemplo de Wang Lin.
Todos los discípulos internos con emoción miraban a Wang Lin. A partir de hoy, nadie se atrevía a llamarlo basura más.
El corazón de Wang Zhuo era un caos. Dijo a Dao Xu, –Maestro, el discípulo quiere entrar en el pasaje de la vida y la muerte. No voy a ocuparme de otros asuntos.
Dao Xu dejó escapar un suspiro. Wang Zhuo era su discípulo favorito, por lo que sabía de los problemas entre Wang Lin y él. Reflexionó durante un tiempo, luego asintió y dijo: –Está bien. Puede aprovechar esta oportunidad para esconderse de Wang Lin.
Wang Zhuo dejó escapar una sonrisa amarga, pero no dijo nada.
Huang Long habló de nuevo. –Todos ustedes pueden irse. Wang Lin, ven conmigo.
Wang Lin asintió. Su mirada recorrió la multitud y aterrizó cerca del tercer Hermano Mayor Lu Yunjie. Él dijo: – ¡Tercer Hermano Mayor, espere un momento!
