Spear Passi se quedo callada unos segundos y luego pregunto “¿Me estás amenazando o invitando?”
“Invitando, por su puesto, su Majestad no cree en amenazar brujas por su cooperación, ni yo tampoco.”
“En ese caso, me niego” contestó sin dudar “Si realmente necesita mi ayuda, puede traer a las brujas a La Cañada a visitarme para el ritual de nobles. No es necesario mandar alguien a escondidas a que infiltre mi castillo. Claro que si una bruja atrae la atención de la iglesia, no puedo garantizar su seguridad.”
La respuesta fue tal cual Nightingale esperaba. Es difícil hacer que un extraño acceda a viajar tan de repente. Generalmente existen dos formas de manejar la situación, amenazar o estimular, pero no quería hacer ninguna de las dos. La Marquesa Passi era la gobernante de la ciudad y será la guardiana de la región una vez que fuera promovida. Los planes del príncipe no le beneficiaban mucho, al contrario el le quería quitar poder a los nobles; según el Principe esto se llamaba centralizar la autoridad. En este caso, ella se estaría degradando a los ojos de los nobles si se pusiera al servicio del Príncipe.
En cuanto a Roland, crear un nuevo mundo y pelear en la siguiente Batalla de la Voluntad Divina, no lo creería solo por unas cuantas palabras.
“Entiendo, en ese caso me retirare” contesto Nightingale.
“Espera…¿eso es todo?” pregunto Spear sorprendida.
“Soy responsable de traer el mensaje de Su Alteza, ahora que he entregado el mensaje y he recibido tu respuesta, mi misión ha sido completada. ¿Que esperabas que te atara y te trajera a la fuerza conmigo?” contesto Nightingale sonriendo.
“¿Como supieron de mi habilidad de canalizar magia? ¿Hablaron con las brujas que se fueron a las islas de los Fiordos?”
“Así es, la líder de las brujas Lady Tilly Wimbledon se encuentra en Ciudad Fronteriza peleando contra los demonios con su hermano.”
“¿No fueron a los Fiordos?”
“SI, no sabían que su Majestad había asegurado una posición tan firme en la Región Oeste, solo se pusieron en contacto una vez que se instalaron en la Isla Durmiente. Justo como a tu, Lady Tilly también fue invitada a la Región Oeste por su Majestad.” contesto Nightingale dando un pequeño resumen de la situación.
“El Príncipe Roland realmente ha establecido un sistema en donde las brujas y la gente normal coexisten en su territorio?” Spear no podía creer lo que estaba escuchando.
“No solo eso, tambien expulso a la iglesia de su territorio” dijo Nightingale sonriendo “Actualmente hay más de 10 brujas viviendo en Ciudad Frontera, los locales ya se han acostumbrado a su existencia. No estoy mintiendo al respecto.”
La Marquesa se levantó y se sirvió una taza de té. “¿Me podrías decir mas al respecto, como lo logro?”
“Si gustas saberlo…” Nightingale se dio la vuelta y se sentó en la mesa, preparándose para platicar. Es posible que no cambie su decisión, pero nunca es malo expandir el entendimiento de otros. Nightingale decidió decirle de la Unión de Brujas que Roland construyó, su guerra con el Duque Ryan y la carrera política después de la recuperación de la Fortaleza Longsong. Si Spear entendía la situación de las brujas y los planes de Roland, tal vez no opondría tanta resistencia cuando el Príncipe eventualmente unifique el Reino Graycastle.
De repente varios sonidos como de tambor se escucharon.
“Esto es…” Spear miro a Nightingale en shock
Nightingale abrió la ventana vio a Maggie justo afuera “¡Peligro, Coo! ¡Lightning descubrió un accidente, coo!”
“¿Que paso?”
“¡Una tropa del Ejército Castigador de la Iglesia se dirige al castillo, coo! ¡Son al menos 20 soldados, coo!”
“¿El Ejército Castigador de la iglesia? ¿Fuiste tu quien los llamo?” pregunto Nightingale a Spear.
“No…hoy no tenia cita con el padre de la Iglesia, puede ser que hayan sido expuestas?” la Marquesa se veia confundida.
“Imposible, a menos que la iglesia esté monitoreando todos los pájaros del cielo.”
“Que raro…si vinieran por mi, no necesitan a tantos soldados, ¡es casi toda la fuerza que tienen en la zona!”
“Que estas esperando, están casi en la entrada!” una figura dorada entró por la ventana y aterrizó a lado de Nightingale, era Lightning.
“No estoy segura de que esta pasando, te sugiero que evites la situación o haz que tus guardias los detengan afuera del palacio y averigua por que están aquí antes de continuar.”
“Este es mi castillo no tengo porque esconderme. No te preocupes, no pueden entrar sin mi permiso, sino no hubiera sido capaz de proteger a las brujas. Sin embargo nuestra reunión termina aquí…si no tienen prisa, creo que…”
Antes de que pudiera terminar su frase, afuera de la habitación se escucharon una serie de pasos y choques de espadas se escucharon claramente a través de todo el castillo. La expresión de la Marquesa cambio completamente “¿¡Quien los dejó entrar!? ¡Guardias!”
Spear llamó algunos nombres, pero nadie respondió, los pasos se escuchaban cada vez más cerca.
“Parece que vienen por ti, todavía tenemos tiempo de irnos, podemos protegerte” dijo Nightingale mientras hacia señas a Lightning para que se fuera primero.
“No, ¡no iré a ningún lado! Este es mi territorio, como se atreven a…”
No había terminado de hablar cuando la puerta de la habitación se vino abajo por un grupo de soldados, que rodearon a Spear con sus espadas y escudos.
Nightingale ya se había ocultado en su Neblina, tomo un par de pasos y se acerco a la esquina por donde seria capaz de observar y escapar cuando fuera necesario. Noto que ni Lightning ni Maggie se fueron, Lightning estaba escondida en la ventana y Maggie descansaba en una viga del techo como un ave normal.
‘Estas dos mocosas son demasiado osadas, le diré al Príncipe para que las discipline cuando regresemos…’ Nightingale continuó observando a los soldados, todos y cada uno de ellos estaba usando una Piedra Represalia de Dios, logró distinguir la voz de la Marquesa enojada.
“Redwyne, ¿estas loco? ¿Los dejaste entrar a mi castillo sin permiso?”
“Por su puesto que no, ¡oh Sabia hermana!” dijo una voz de un hombre de entre la multitud “Nuestro padre estuvo mal al darle el título a una seguidora del diablo. Simplemente estoy corrigiendo su error.”