Hacia mucho tiempo que no sentía un sol tan cálido.
García se quedó parada en el jardín y respiró hondo, inhalando el olor de romero que llegaba a través de la brisa.
Ese ya no era más Reino Invierno Eterno; además del suelo congelado y el olor no aromático de la Flor Primavera, ese país en el extremo norte realmente no tenía nada que ofrecer. Dentro del patio trasero de ese castillo, siempre se colgaban trozos de carne y tripas de cerdo para secarse al aire libre, lo que hacía imposible deshacerse del olor horrible. Ese lugar tampoco era el Puerto de Agua Clara, con su olor familiar de sal y su aire húmedo, donde si cerraba los ojos, podía escuchar los estruendosos ruidos de las olas chocando contra la playa.
Este es el palacio de Graycastle, pensó.
Pero… su apariencia era algo diferente de lo que ella recordaba.
García se sentó en el estanque central florido, y acaricio suavemente las rocas ligeramente ásperas- recordó de vuelta su niñez, mientras jugaba a las escondidas, se había caído al suelo y golpeado ferozmente la cabeza contra las piedras en el lado del estanque florido. Desde entonces, su padre había ordenado que todas las piedras se rompieran en pequeños guijarros. Como resultado, era imposible lastimarse al tropezar, pero también se había vuelto imposible esconderse detrás de ellas.
En ese momento, recordó, que además de ella, Gerald y Timothy también habían estado presentes. Al ver a su hermana menor caer, ambos se asustaron demasiado. Para convencerla de que dejara de sollozar, uno por uno se arrojó al suelo y deliberadamente golpearon su cabeza contra las piedras al lado del estanque. Por supuesto, después, fueron brutalmente golpeados por su padre.
Era un período de su vida que García pensó que nunca volvería a recordar. Era como un secreto escondido debajo de un árbol, profundamente enterrado en la tierra. Pero ahora que había regresado a ese lugar familiar, descubrió que el paisaje no había desvanecido en lo más mínimo. Después de excavarlo de la tierra, todavía parecía tan vivido y realista como en el pasado.
Parecía como si todo hubiera regresado a la época en su infancia.
“Resulta que este es tu mundo”, una voz desconocida se escuchó detrás de ella, “Como lugar de descanso, es una muy buena opción.”
García se dio la vuelta y vio a una mujer vestida de blanco que se encontraba caminando de la dirección del estanque florido. Tenía un par de ojos rojos claros y un cabello largo blanco como la nieve, sus rasgos faciales eran tan delicados que parecían haber sido tallados, y su voz era etérea y melodiosa, en general, todo de ella parecía como la de un dios que había descendido al mundo mortal.
La cara de la Reina de Agua Clara se oscureció por completo cuando dijo: “Eres la bruja de la Iglesia.”
“Mi nombre es Zero, la palabra ‘bruja’ no me sienta bien”, se rió. “Me llaman ‘Purificada’. Mi sangre y la de las caídas es completamente diferente.”
“¿Una purificada? Ese es solo el término que la Iglesia usa para los juguetes que han criado”, dijo García con frialdad, “¿Qué clase de truco es este escenario? ¿Tu habilidad te permite crear ilusiones?” De repente tomó una piedra y la apretó con su mano. “¡Es solo una ilusión! ¡Nada de esto va a engañarme!”
El grito de la Reina viajó lejos, sin en cambio el paisaje pareció no verse afectado. Cuando abrió su mano, noto que la piedra no había sido desquebrajada, en cambio, su piel había sido cortada por sus bordes y esquinas duras. El dolor que emanaba de la herida parecía claro y real.
“Parece que no eres inconsciente de las habilidades de las brujas. Eso hace las cosas mucho más fáciles”, Zero agarró el dobladillo de su falda e hizo una leve reverencia, “Bienvenida al Mundo de la Conciencia, llamo a este lugar el Campo de Batalla de las Almas. Es aquí donde llevaremos a cabo nuestra lucha. El ganador obtendrá todo, el perdedor perderá todo… Tal como Dios proclama en el Libro Sagrado.”
Campo de batalla del… Alma.
García miro fijamente, tratando de digerir lo que acababa de escuchar cuando de repente sintió un fuerte dolor en el pulmón. Ella no sabía de dónde había llegado la lanza, pero de alguna manera Zero la encajo directamente en su pecho. Inmediatamente su respiración se hizo pesada, cuando trató de abrir la boca y gritar, ni siquiera los más pequeños sonidos salieron. Mientras tanto, Zero giró la lanza y la retiró ferozmente, la sangre salió por la herida y pronto cubrió la mitad de su cuerpo. García cayó de rodillas, temblando mientras trataba de cubrir su herida, pero debido a la enorme pérdida de sangre, su conciencia había empezado ya a difuminarse.
En el momento siguiente se encontró parada en su antiguo lugar en perfecto estado. Las sombras estaban a pocos metros de ella, ya que nunca había salido de su casa para empezar.
¿Que pasó? García abrió la boca, respirando profundamente, ¿una ilusión? Sus manos seguían presionando ferozmente su pecho, y podía sentir todavía un dolor en el lugar donde había estado la herida hace unos momentos. Bajando la cabeza, observo una gran cantidad de sangre dispersa alrededor de sus pies.
“Esta es la regla básica. La conciencia de una persona no es inmortal,” explicó Zero, extendiendo sus manos, “El dolor de cada muerte te parecerá real. Lentamente consumirá tu fuerza mental y física, y cuando este sentido exceda tus límites será el momento de tu descanso eterno.”
“Cada vez que mueras, tu cuerpo volverá a su estado original. Una persona promedio puede soportar al menos tres o cuatro veces, por supuesto, también he visto a muchos individuos determinados lograr pasar siete, ocho o incluso más muertes”, explicó con suavidad. “Aunque estoy esperando tu actuación, también puedo entender si te das por vencida. Después de todo, el sentimiento de ser asesinada es un sufrimiento insoportable. En este punto, eres capaz de elegir escapar, además no es un comportamiento cobarde, especialmente cuando el resultado se encuentra ya decidido.”
Cuando terminó de hablar soltó la lanza de sus manos y una gran espada sobre su espalda, ataco hacia delante e intentó separar a García.
Esta última miro con asombro, como es posible tiene un vestido blanco, no hay forma de que esconda un arma tan grande. Todas estas armas están… saliendo de la nada? De repente, las palabras de la otra persona reaparecieron en su mente:
“Este es tu mundo…”
“Yo lo llamo Campo de Batalla de las Almas.”
“La conciencia de uno no es inmortal… todo es real para ti.”
La gran espada soltó el tajó, pero en lugar de cortar a la antigua Reina de Agua Clara en dos, se estrelló contra un enorme escudo de hierro. Expulsada por un rebote intenso, Zero perdió el agarre sobre la espada mientras volaba en el aire, al mismo tiempo su cuerpo también fue forzado a retroceder unos pasos. García, debido a la gran fuerza que había usado para desviar el fuerte golpe, cayó al suelo.
“¿El final ya está destinado?” Apretó los dientes y se burló, “Antes dijiste que esto era ‘mi mundo’, ¿no?” En el momento en que termino su oración, una ballesta apareció de repente en su mano e inmediatamente disparo flechas a Zero. Simultáneamente, un crucifijo se alzó detrás de ella y atrapó firmemente su cuerpo.
En un instante, la flecha de la ballesta perforó el abdomen de la Purificadora, causando de inmediato una expresión de sufrimiento en su rostro. Después de jadear dos veces, Zero abrió la boca, “E-eso me sorprendió… cough, como una persona común… solo aceptar esto ya es muy difícil, s-sin mencionar el uso de tu propia conciencia para tomar represalias. Acabas de demostrar… por qué la Reina de Agua Clara es capaz de causar tantos dolores de cabeza a Mayne.”
“Muchas gracias por tus elogios”, dijo García mientras recogía la lanza que había caído al suelo. “Si no fuera porque hablaste demasiado, nunca habría sido capaz de comprender las maravillas del Mundo de la Conciencia tan rápido. Ahora, ¿debería hacerte más agujeros”
Zero se rió desafiante, “Por ahora, dejaré que hagas lo que quieras”.
…
Cuando García la apuñaló por décima vez, La purificada finalmente murió: ella deliberadamente había evitado perforar cualquier punto vital, moviéndose lentamente desde las manos y los pies hacia el abdomen. Al principio, la Purificada había gritado miserablemente, pero más tarde su voz había comenzado a romperse gradualmente.
Esa animal debería ser restaurada a su estado original, ¿verdad? Sin embargo, este es el palacio de Graycastle, es mi tierra natal. Dado que es posible cambiar el entorno y los objetos a voluntad, no puedo perder.
Efectivamente, el cuerpo de la Purificada brilló con una luz blanca. En un abrir y cerrar de ojos, todas sus heridas habían desaparecido. Zero volvió a abrir sus ojos de color rojo como la luz.
García levantó la ballesta, preparándose para enviarla a su muerte una vez más, pero de repente todo cambió: sus manos atadas al crucifijo rompieron fácilmente la cuerda, y pateo la ballesta, después inmediatamente apareció al lado de García y le dio un golpe. Antes de que García pudiera responder, ya había perdido el sentido de su cuerpo.
Con un fuerte golpe, el cuerpo sin cabeza colapsó, pero las manos de la otra persona todavía estaban vacías.
¿Cómo puede ser esto?
Después de restaurarse, la Reina de Agua Clara se agarró el cuello y retrocedió dos pasos sintiéndose insegura… Justo ahora, ¿usó sus manos vacías para cortarme el cuello? Al ver la cuerda rota de cáñamo y la sangre en sus manos, se hizo evidente que la escena anterior no había sido una ilusión.
“Si no pudieras entender la naturaleza del Mundo de la Conciencia, ¿cómo podría tener una pelea real?” Zero sonrió y dijo: “Pareces muy desconcertado acerca de cómo saqué mis manos de la gruesa cuerda, ¿no es así? De hecho, esto no es tan difícil de entender, ‘el ganador lo consigue todo, el perdedor lo pierde todo’… Entre las personas a las que me he tragado, hay una clase de brujas que son inusualmente poderosas. Su poder no tiene límites, su cuerpo es ágil, y no necesitan temer del efecto de la Piedra Represalia de Dios. Puede que no los conozcas, pero la Iglesia tiene un término particular para ellas: Extraordinarias.”
Ella abrió sus manos, “Es imposible vencerme solo usando métodos comunes. Si quieres sobrevivir, tendrás que duplicar tu esfuerzo… Ahora es mi turno.”