RW 160 – Confrontación

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Roland ya había corregido los diseños de la bala del Revolver hace mucho tiempo. Después de todo, las balas de plomo circulares y la pólvora suelta eran un arreglo, simplemente demasiado arcaico. Teniendo en cuenta la capacidad de forja de Anna, era factible para ella fabricar directamente el cuerpo para la munición. El problema era que no existía una iniciador fiable, que pudiera encender el cartucho de la bala que estaba llena de polvo negro.

La cáscara externa de la munición era fabricada generalmente con fulminato de mercurio, siendo ésta muy sensible a los impactos. Cuando el perno del percutor fuera tirado y golpeara la base de la bala, el fulminato de mercurio se encendería, y pasaria a encender la polvora, y expulsando la bala de la cámara.

Era una lástima que, incluso después de romperse la cabeza pensando sobre él, todavía era incapaz de recordar las materias primas necesarias que necesitaba para el fulminato de mercurio. Desde un punto de vista literal, definitivamente necesitaría ácido nítrico y mercurio. Sin embargo, al mirar el resultado de la ecuación química escrita, era evidente que esas dos sustancias sólo producirían ácido nítrico juntas.

Además, conocer las materias primas no era igual a tener una producción fluida de productos usables. Roland todavía tendría que descubrir la concentración necesaria y la temperatura para el proceso de reacción, y si necesitaría agregar otro catalizador o no añadir uno, también era un punto crucial averiguarlo antes de terminar el producto.

Por otra parte, debido a las propiedades sensibles del mercurio, la fabricación se consideró como un proceso peligroso, el cual, si explotara, podría causarle a uno la pérdida fácilmente de algunos dedos, por lo que Roland tenía miedo de probarlo personalmente.

Por lo tanto, Roland se conformó con su segunda mejor opción, usar una caja de munición de metal, pero manteniendo la vieja chispa de ignición, lo que requeriría que la chispa pudiera entrar en el interior de la caja de munición para encender la pólvora. Por lo tanto, tuvo que dejar un agujero en el fondo de la caja de la munición, aunque tenía que encontrar todavía un método que evitara la fuga de pólvora.

Obviamente, esos dos puntos eran contradictorios entre sí: entre mayor fuera la apertura, más rápido seria la fuga de la pólvora. Sin embargo, si la abertura era demasiado pequeña, sería demasiado difícil para la chispa encender la pólvora.

Él necesitaría algo que permitiera que la chispa encendiera el polvo, mientras que al mismo tiempo bloqueara el agujero, para evitar la fuga de la pólvora.

El primer pensamiento de Roland fue la piroxilina, también conocida como nitrato de celulosa.

También era una de las pocas sustancias químicas que todavía era capaz de recordar y que podía utilizarse para armas, debido a que poseía un método de producción tan simple: el algodón tenía que estar empapado en dos tipos fuertes de ácidos. Los dos ácidos usados eran el ácido sulfúrico comúnmente disponible y el ácido nítrico, y no existía ningún peligro a la hora de hacerlos. Aunque quería esperar con esperanza al alquimista, ahora, donde tenía solo el plazo de siete días, decidió enrollarse las mangas y ponerse a trabajar.

Tomando la pluma, Roland comenzó a escribir la idea que ya tenía en su cabeza durante mucho tiempo.

El primer ingrediente que necesitó era el algodón, y los mejores hilados de algodón eran los que no se encontraban tejidos o teñidos y eran precisamente de ese tipo, de los cuales trajo de su visita del castillo del Duque y que se estaban acumulando, dentro de los almacenes de su castillo. El hilado de algodón tenía que ser desnatado. De lo contrario, la grasa adherida a su superficie impediría llevar a cabo la reacción de nitración.

Ya estaba familiarizado con las cosas necesarias para remover el aceite, siendo la sosa caustica, también conocida comúnmente cono hidróxido de sodio. Al mismo tiempo, también era una de las materias primas necesarias para hacer el jabón: Para producir jabón, uno tenía que agregar la grasa al hidróxido de sodio, y después moverla hasta hacerse sólida. Posteriormente podría ser utilizada como jabón, para lavar. Pero Roland se encontraba demasiado ocupado desarrollando la tecnología industrial y agrícola y defendiendo a la Ciudad Fronteriza contra enemigos extranjeros, que no encontró el tiempo necesario para inventar tales productos.

En cuanto a la forma en que pensaba para producir la sosa cáustica, el método más simple era probablemente por la electrólisis del agua salada. Así que el Príncipe se dio cuenta que, para crear los nuevos tipos de balas, primero tenía que desarrollar un Generador de Corriente Continua.

***

Ashes caminaba por el río Redwater, sintiéndose algo deprimida.

Puesto que las otras brujas sabían que ella, fue a ciudad fronteriza con el propósito de llevar a las brujas de la Asociación de Cooperación de Brujas lejos, su actitud hacia ella se había enfriado demasiado, y no quedaba ninguna muestra de la recepción cálida que ella recibió la último noche.

Además, también notó que la mayoría de las brujas, practicaban su habilidad en el patio trasero del castillo, lo que demostró que Roland también encontró una manera de evitar el sufrimiento de la mordedura demoníaca. Originalmente Ashes había querido usar esa pieza vital de inteligencia para mostrar su buena voluntad a las otras brujas, pero su plan fue inesperadamente destrozado desde el principio. Así que además de contarles las desventajas y las ventajas de abandonar Ciudad Fronteriza, casi no tuvo nada más para persuadirlas de mudarse.

Lo que más sorprendió a Ashes fue que, aunque la apariencia de Roland Wimbledon cambió un poco desde la última vez que lo vio, cada gesto de él contenía ahora un temperamento indescriptible, completamente fuera de sintonía con la imagen que tenía anteriormente de su dandismo.

¿Cómo pudo suceder eso? Anteriormente el perteneció a la clase incompetente, durante las reuniones de negocios siempre estaría pensando primero en encontrar una manera de escapar, nunca en defender a los demás, e incluso si el problema era claramente causado por él, también estaría demasiado asustado para asumir cualquier responsabilidad. En aquella ocasión en que pensó en acosarla, sólo necesitó lanzarle una mirada odiosa, para hacerlo caer al suelo en pánico. Pero después escucho de Tilly, que él afirmo haber caído accidentalmente, y que la Quinta Princesa era culpable por ello. Después de todo, ¿Por qué ella contrataría a una mujer tan fea como su guardia?

A partir de ese momento, la visión de Ashes del cuarto príncipe, cayó al más bajo rango posible.

Anteriormente creyó que ese tipo de persona sería fácil de manejar por ella, pero durante la negociación de hoy fracasó completamente para ganar la mano superior. Especialmente cuando el otro lado sugirió una prueba individual, descubrió que su amenaza de usar la fuerza militar no funcionaba, y además el otro lado nunca pensó en escapar. En su lugar, incluso tuvo el efecto opuesto completo. Si ella lo hubiera amenazado en ese momento personalmente, solo hubiese reducido la impresión positiva de las brujas hacia ella, sin tener ningún otro resultado.

Ashes suspiró, si sólo pudiera ser tan inteligente como Tilly, cada problema que aparecía ante ella podía ser resuelto sin problemas. En el momento en que se encontró con una situación como esa, seguramente habría sido capaz de encontrar una solución a eso, ¿Verdad?

Si no hubiera querido ayudar a Tilly tanto como le fuere posible, Ashes realmente habría tomado el próximo barco rumbo a Silver City y saldría del Reino de Graycastle lo antes posible.

Inconscientemente, dejó la zona de la ciudad, ya no le era posible ver el campo de trigo verde al otro lado del río, ahora estaba mirando el bosque no reclamado.

Cuando Ashes estaba lista para dar la vuelta y regresar, sintió una fluctuación de magia de repente desde atrás de ella, subconscientemente giro la cabeza, y apenas pudo ver un cuchillo lanzado hacia su mejilla, aprovechando su movimiento horizontal. La flacidez mágica se transformo en una oleada creciente, y Ashes de repente sintió un dolor penetrante procedente de su mejilla, los movimientos sistemáticos y lógicos de la otra persona eran claramente diferente a lo que uno esperaría de una persona común. Ashes no dudó, y dejo de lado su actitud pasiva, para concentrarse en evitar la daga, que iba hacia ella de frente, puso toda su fuerza en un pie y salió lanzada del camino.

Sin embargo, el otro lado desapareció en el aire, y en un abrir y cerrar de ojos, apareció detrás de ella, dejando a Ashes totalmente incapaz de seguir el movimiento de su oponente.

Ella sacó la espada y la giró en círculos. Girandose tan rápido que creó un sonido de silbido apagado con la espada, causando que se levantara una gran cantidad de polvo desde el suelo. Ese ataque no tenía áreas muertas y era capaz de recoger cualquier tipo de amenaza, pero frente a ese enemigo desconocido que estaba enfrentando, incluso este ataque difícil, terminó en un fracaso completo. Cuando sus espadas barrieron la posición anterior del atacante, no había nada que tocar.

Esto es malo, pensó, tensó todo los músculos de su cuerpo, lista para reaccionar a la siguiente ronda de ataques de la otra persona, pero la sombra desapareció justo delante de ella.

El polvo se asentó lentamente, mientras la persona volvió a aparecer cerca de Ashes, atacando con la daga que sostenía en su mano.

Era Nightingale.

“¿Tengo que considerar esto como una advertencia?” Dijo Ashes frunciendo el ceño.

“Por supuesto que no,” dijo Nightingale, colocando su daga en su cintura. “Sólo quería ver la fuerza de una extraordinaria.”

“¿Estás segura? Era más como si… ”

“¿Crees que te obligaría a salir de Ciudad Fronteriza tan rápidamente, o de lo contrario no sería cortés contigo? Nightingale la interrumpió. “Si ese fuera el caso, ¿Cuál sería la diferencia entre Cara y yo?”

Cara ¿Por qué mencionó al ex líder de la Asociación de Cooperación de Brujas? Ashes se preguntó confundida.

“Puedes estar segura de que no impediré que te acerques a alguna de mis hermanas, y si alguien está dispuesta a irse contigo, no creo que Su Alteza Real la detenga. Ciertamente no lo haría…” Nightingale hizo una pausa. “Pero si amenazas con hacer daño a Su Alteza, te garantizo que la próxima vez ya no te apuñalare a un lado.” En ese momento ella sonrió y desapareció en el aire. “Disfrute su tiempo en la Ciudad Fronteriza.”

Efectivamente, me estabas advirtiendo, eh, Ashes sacudió la cabeza.

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