Capítulo 180 – Las Heroinas estan Intentando Matarme

“Uh, bueno…”

“¿Por qué duda? ¿No prometió que compartiría una copa conmigo esta noche?”

Mientras Frey dudaba, Kania sonrió y preguntó.

“¿Hay alguna razón para romper repentinamente esa promesa?”

“Bueno, no-no es eso…”

“Entonces, ¿por qué está dudando?”

Con una comisura de su boca levantada, Kania volvió a susurrarle al oído a Frey, acelerando su corazón.

“… Puedo escuchar los latidos de su corazón, joven maestro.”

Hasta entonces, Kania sólo se había aferrado estrechamente a Frey, pero ahora también podía sentir los latidos de su corazón como si fueran suyos.

“No sólo puedo sentir la calidez del Joven Maestro, sino también sus pensamientos y emociones.”

Al decir eso, Kania presionó su abdomen y pecho aún más cerca de él.

“Entonces, dígame, ¿qué lo detiene?”

Tenía u

na expresión inocente e inclinó la cabeza.

“E-Entonces… ¿dónde quieres comer?”

“Ya he preparado todo en mi habitación en el primer piso.”

Ella respondió con calma a Frey, quien todavía tenía una expresión desconcertada.

“… Bueno, entonces, vamos.”

“¿Huh? Uh, claro.”

Finalmente, después de un largo rato, Kania se liberó de Frey y le tomó la mano mientras bajaban las escaleras.

“Mmm…”

Aunque solo se tomaron de la mano, una sonrisa de satisfacción apareció en los labios de Kania.

“Uh, Kania, por cierto, antes…”

“No es necesario que me explique porque lo entiendo todo.”

Mientras Kania bajaba las escaleras, el fuerte apretón de su mano transmitía las profundas emociones que su Joven Maestro, a quien admiraba por encima de todos los demás, albergaba hacia ella.

“¿…..?”

Ella se detuvo abruptamente y frunció el ceño.

“¡Woof…woof! ¡Woof!”

“¿Huh?”

Fue porque vio un perro rojo oscuro al pie de las escaleras.

“¿Qué hace este perro aquí…”

Kania estaba inicialmente desconcertada, pero después de un momento de darse cuenta, de repente comenzó a mirar al perro.

“¿Kania…? ¿Qué es este perro?”

De pie junto a ella, Frey ladeó la cabeza con una mirada llena de curiosidad. Kania dejó de hablar, con los labios ligeramente apretados.

“Um… bueno…”

Al escuchar esto, el perro comenzó a mover la cola, evitando nerviosamente la mirada de Kania. Kania, que seguía mirando al perro en silencio, finalmente murmuró en voz baja.

“Este es el perro mascota de la Señorita Irina.”

“¿Oh, enserio?”

“Es extraño. ¿No recuerdo que Irina tuviera mascotas aquí?”

“Consiguió uno solo para cambiar el ambiente de la mansión, ya que últimamente se sentía muy vacía y desierta.”

“Mmmmm…”

Cuando Frey escuchó esas palabras, apoyó la barbilla en la mano y miró fijamente al perro. Mientras tanto, Kania, con una expresión de disgusto, soltó la mano de Frey y se acercó al perro.

“… El joven maestro prefiere los gatos.”

Ella murmuró suavemente.

“No le gustan los perros.”

Al escuchar esas palabras, el perro mostró una expresión de sorpresa, abriendo mucho la boca por un momento antes de comenzar a jadear pesadamente.

“¿Huh? Este perro es un poco lindo.”

Al observar el comportamiento del perro, Frey bajó las escaleras y lo acarició suavemente.

“Bueno, esto debería estar bastante bien. No debería perder mucho pelo y no debería ser demasiado agresivo… Ah, me hace cosquillas.”

“Huff… Huff…”

En respuesta a sus palabras, el perro comenzó a lamer enérgicamente la cara de Frey.

“…Vamos.”

“Ah, sí.”

Una vez más, Kania tomó la mano de Frey y lo guio hacia adelante.

“Kkiing…”

“¿…..?”

De repente, el perro mordió el dobladillo de los pantalones de Frey y lo sujetó.

— Shaaaah…

Sin embargo, cuando Kania, que había estado observando las travesuras del perro, le estrechó la mano en silencio, el perro bajó lentamente los ojos.

“Pobrecita, parece que le costó adaptarse a este lugar desconocido.”

Murmuró Kania mientras miraba al perro con una mirada supuestamente comprensiva. Luego, dejó al perro atrás y continuó avanzando con Frey.

“Por cierto, ¿dónde está Irina?”

“Dijo que está practicando transforma— quiero decir, magia de combate.”

Kania respondió con indiferencia a la pregunta de Frey cuando llegaron a su habitación.

“…Ah, sólo un momento.”

“¿Mmm?”

“Me he dado cuenta de que no estoy completamente preparada. Espere aquí un momento.”

Después de pedirle a Frey que esperara fuera de la habitación por un momento, Kania entró rápidamente.

“………….”

Entonces prevaleció el silencio.

“Sigh.”

En medio de tal silencio, Kania tranquilamente levantó las comisuras de su boca.

“¿Asumiste que siempre podrías salirte con la tuya?”

Murmuró mientras observaba a la lechuza y al canario picotear diligentemente la ventana.

“Dominé deliberadamente la magia oscura de alto nivel e incluso me esforcé hasta los extremos. Así que, independientemente de cuán hábiles sean ambas, como espíritus no podrán traspasar esa barrera e interferir.”

“¡¡¡Hoot!!!”

“…¡¡Chirp!!”

Con una sonrisa triunfante, Kania bajó las cortinas para cubrir la ventana y se tomó un segundo para recomponerse.

— ¡Thump!

“Bueno, entonces, si me disculpan…”

Luego recuperó la cuenca que le había quitado a Frey y jugó con ella.

“…Te contaminaré un poco más.”

Ella murmuró con una expresión decidida.

.

.

.

.

.

“…Puede entrar.”

“Ah, sí.”

Frey, que había estado aturdido afuera de la habitación de Kania, entró lentamente ante la invitación de Kania.

“¿Qué preparaste tan meticulosamente que…”

Cerrando suavemente la puerta detrás de él, un Frey sereno estaba a punto de hacerle una pregunta a Kania con una expresión tranquila. Sin embargo…

“…Ah.”

En un instante, se quedó helado.

“Hola, Joven Maestro Frey.”

Kania llevaba un vestido.

Esta era la primera vez que Frey la veía con ropa casual, tanto en ciclos anteriores como en este actual.

Llevaba un vestido espléndido, que recordaba a una debutante en la alta sociedad.

En una mano había una copa de vino y en la otra una flor en forma de estrella.

“…….”

Frey, que se había acostumbrado a su personalidad profesional habitual, estaba realmente sorprendido. Sin embargo, encontró su nueva apariencia sorprendentemente refrescante e inesperada.

“¿Le gusta?”

“Eh… bueno…”

Al escuchar eso, Frey sintió un aleteo en el pecho y comenzó a dudar de sus palabras.

“Bueno, por supuesto, no hay manera de que no le guste, ¿verdad?”

Kania habló en voz baja, su sonrisa llegó a sus ojos mientras miraba a Frey.

“Este vestido inicialmente estaba destinado a ser un regalo suyo, ¿no es así, joven maestro?”

“¿De qué estás hablando?”

Desconcertado por sus palabras, Frey preguntó confundido.

“¿Recuerda cuando hicimos planes para una cita durante el primer semestre?”

“Ah…”

Kania continuó, su expresión teñida de decepción.

“Desafortunadamente, Joven Maestro, se desmayó debido a las penalizaciones que acumulo en ese momento y nuestros planes fracasaron.”

“Uh… Kania, lo siento mucho…”

“Yo lo vi.”

Mientras Frey tenía una expresión de disculpa e intentaba decir algo, Kania habló en voz baja.

“Lo encontré en un cajón mientras le cuidaba cuando se desmayó, joven maestro. Me refiero a las 10 cosas escritas en su lista de deseos.”

“¿V-Viste eso?”

“… Como estaba protegido por magia, transferí el contenido a mi cuaderno sin tocarlo.”

Al escuchar eso, Frey finalmente entendió.

La razón por la que Kania a veces miraba tan fijamente su cuaderno y luego se echaba a reír a carcajadas.

Además, la razón por la que ella reaccionó con tanta fuerza cuando él intentó echar un vistazo a su cuaderno.

“Lista de deseos 1: Disfrutar de una cita con Kania mientras ella usa un vestido, solo nosotros dos, mientras compartimos una bebida.”

Mientras Kania miraba a Frey, cuyo rostro se había puesto aún más rojo, sacó un cuaderno de su pecho mientras susurraba suavemente.

“¿Viste… todo?”

El rostro de Frey se puso aún más rojo.

“Incluso anoto la marca y los detalles del vestido. Fue sorprendentemente meticuloso en ese aspecto…”

“¡K-Kania!”

“… Pido disculpas, joven maestro.”

Cuando Kania lo miró con una expresión infinitamente comprensiva, Frey se tapó la boca y desvió la mirada hacia un lado.

“…De todos modos, he ahorrado dinero diligentemente todo este tiempo.”

“Espera, no quieres decir…”

“Sí, compré este vestido con mi propio dinero.”

Kania, quien tímidamente le dijo esto a Frey, continuó con una expresión ligeramente solemne.

“… ¿No deberíamos cumplir el deseo del joven maestro lo antes posible?”

“No, quiero decir, estaba planeando cumplirlo tranquilamente después de que todo terminara…”

“Joven maestro.”

Interrumpiendo las palabras de Frey, Kania habló.

“Por favor tome asiento.”

Hizo un gesto hacia la silla frente a ella mientras mostraba una suave sonrisa.

“Es hora de hacer realidad su deseo.”

“……..”

Mientras Kania decía esto, lo honró con una sonrisa femenina, un lado que nadie había presenciado antes.

— Thump.

Frey, ahora sentado, preguntó en un tono ligeramente relajado mientras aún se frotaba las mejillas sonrojadas.

“Entonces, dime…

“¿Cuál es el secreto para emborracharse con alcohol?”

.

.

.

.

.

“¿Whoa? Uhh…”

“Joven maestro.”

Los ojos del joven maestro Frey se habían desenfocado aún más.

“Kania… me siento raro…”

“Felicitaciones, se está emborrachando.”

Intenté reprimir mi risa mientras respondía, y el joven maestro Frey abrió mucho los ojos en respuesta.

“¡No estoy borracho!”

“Ya veo.”

“Quiero decir… siento un poquito de borrachera…”

Mientras decía esto, el joven maestro Frey se reía mientras me miraba.

— Uuung…

Escondido debajo de su pecho había un pergamino para infiltrarse en su subconsciente. Era algo que Irina y yo habíamos creado juntas.

“La tolerancia que tengo… ¿Cómo se llama? ¿Resistencia mental a sustancias intoxicantes? ¿No dije que eso no me afectaría?”

“…Es más o menos lo mismo.”

“Sí, bueno… esa cosa. De todos modos, quiero decir, tengo una alta tolerancia al alcohol…”

Naturalmente, el Joven Maestro poseía una tolerancia muy alta al alcohol.

Por eso preparé decenas de botellas de un alcohol increíblemente fuerte.

Aunque, debido a mi naturaleza de hechicera, no podía emborracharme en absoluto.

Lo conseguí para satisfacer al joven maestro, que había deseado emborracharse al menos una vez…

También…

“Joven Maestro, hay algo sobre lo que tengo curiosidad.”

Quería escuchar sus pensamientos más íntimos directamente de sus labios mientras me sincronizaba perfectamente con él.

“Joven Maestro, usted…”

“Kania.”

Sin embargo, de repente, el joven maestro comenzó a tener una expresión seria.

“¿Podrías… dejar el lenguaje formal y hablarme informalmente?”

“¿Huh?”

Me sorprendió un poco esta petición inesperada del Joven Maestro. En voz baja, murmuró el joven maestro Frey.

“Por alguna razón, quiero oírte hablar conmigo informalmente al menos una vez.”

“Uh, mm…”

Por primera vez, mi compostura se hizo añicos debido a esta petición inesperada. Había creído que todo lo que sucedería hoy estaba dentro de mis cálculos, pero aparentemente no lo tomé en cuenta todo.

¿Hablando informalmente? ¿Prescindir del lenguaje formal al dirigirse al Joven Maestro? Ni siquiera en mis sueños más locos había pensado en eso.

“Vamos.”

“Uh, ugh…”

“¿Por qué no quieres?”

Debido a una petición tan inesperada, quedé más que desconcertada, y al ver esto, el Joven Maestro mostró una sonrisa traviesa.

‘… No puedo perder el control en este momento.’

Sintiéndome desafiada, me volví aún más decidida a mantener el control de la situación. Como tal, respiré profundamente.

“F…”

Mientras mantenía mi mirada fija en el joven maestro Frey…

“Frey.”

Susurré suavemente.

“Hola, Frey.”

“¡Pfff!”

Contrariamente a mis expectativas, el joven maestro Frey se echó a reír.

“Pftt… Jajaja… jajaja…”

“…….”

Mi cara inmediatamente se sonrojó debido a su risa y mi corazón comenzó a acelerarse.

Dirigirme al joven maestro Frey informalmente por su nombre por primera vez — oh Dios mío.

“…Te-Te Amo.”

Pero no podía fallar aquí, así que cerré los ojos con fuerza y ​​pronuncié esas palabras.

“Yo también te amo.”

La respuesta del joven maestro Frey fue tan natural, como si fuera lo más obvio.

“Eres una presencia tan preciosa para mí.”

Al escuchar mi confesión, el joven maestro Frey, que me miraba fijamente, habló en voz baja.

“Si me salto el desayuno que me preparas cada mañana, me siento vacío todo el día. Tampoco me siento igual dondequiera que vaya sin ti a mi lado.”

“Ah…”

“Cada vez que estás a mi lado y abres tu cuaderno para informar lo que sea, me siento reconfortado. Cuando estás a mi lado, me siento seguro.”

“……..”

“Para ser honesto, si no hubieras estado allí desde el principio, podría haberme quitado la vida hace mucho tiempo.”

“Joven Maestro Frey.”

Mientras el joven maestro Frey continuaba derramando su sincera confesión, yo…

Yo…

“Me gustas, Kania.”

“Uwa…”

“Te amo.”

No pude evitar bajar la cabeza ante su confesión.

“Aheuuuuu…”

Mi cara ardía de vergüenza.

Mi corazón empezó a latir aún más fuerte.

Mi respiración se volvió cada vez más errática y áspera.

Y una vez más, pude sentir un aleteo en el estómago.

“…Ugh…Eut”

El hombre frente a mí susurró estas palabras con una expresión tan sincera en su rostro. Como resultado, el frágil hilo de la razón al que me había estado aferrando estaba a punto de romperse.

‘…Oh, e-esto no debería ser…’

Al principio sólo quería confirmar sus sentimientos.

Estaba destinado a servir como advertencia para las otras chicas.

Me había disfrazado para cumplir el deseo del joven maestro Frey y hacerlo feliz…

Pero si resultó así, la promesa que les hice a las chicas la última vez…

“¿Huh?”

“¿…..?”

Atrapada en la sensación abrumadora que se había apoderado de todo mi cuerpo, realmente no sabía qué hacer. Entonces, Frey, que había estado mirándome, de repente desvió su mirada hacia el aire vacío.

“¿Qué, qué sucede aquí? ¿Por qué el Sistema de Afecto está actuando mal en este momento…”

“¿Joven maestro?”

“……..¿Huh?”

Poco a poco empezó a distraerse, con la mirada fija en el aire por un rato.

“………….”

En ese silencio que siguió…

— Creak…

Me levanté lentamente de mi asiento.

“Joven maestro.”

En poco tiempo, me acerqué al joven maestro y me detuve justo frente a él.

— Beso.

Me senté en su regazo y le di un beso en los labios.

“¿Ehup?”

“Mmm…”

Fue un acto impulsivo impulsado por unos celos inexplicables porque la mirada que había estado dirigida a mí de repente se había desplazado hacia otra parte.

Al final parecía que todo había salido bien.

Las emociones del joven maestro, que habían estado surgiendo, comenzaron a fortalecerse aún más gradualmente.

“Puha.”

Con esos pensamientos en mi mente, entrelacé nuestras lenguas por un momento, dejando un rastro persistente de saliva mientras echaba la cabeza hacia atrás.

– Ssk…

Presionando mi estómago todavía hormigueante contra el Joven Maestro, le susurré en voz baja al oído.

“¿Estás excitado?”

“…debido a que lo estoy.”

Y luego, en el momento siguiente.

— ¡Thunk!

“¡¡Kyakk!!”

El joven maestro se abalanzó sobre mí.

“Kania…”

El joven maestro, que se había subido encima de mí mientras estaba completamente intoxicado, me miró con ojos desenfocados.

“… ¿Ebeub?”

Nuestras lenguas continuaron entrelazándose, una mezcla de aspereza y gentileza.

“… ♡”

Nuestros dedos también permanecieron entrelazados durante varios minutos.

‘Te amo, joven maestro…’

Abracé plenamente los sentimientos del Joven Maestro y, a cambio, el placer me invadió.

‘Sin embargo…’

En un momento tan extasiado, reuní una fuerza mental trascendente para reunir mi magia oscura.

— Shaaa…

“… ¿Ah?”

Finalmente, infundí mi magia oscura en el pergamino adherido al pecho del Joven Maestro.

“Ah…”

Luego dejé que el joven maestro, que me había devastado, durmiera tranquilamente.

— Sssk…

Después de arreglar mi vestido desaliñado y acariciar tiernamente al Joven Maestro ante mí…

— ¡Snap!

Moví los dedos y descorrí la cortina.

“Hoot.”

“Chirp.”

“…Woof.”

Después de un rato, observé con calma a los animales sentados al lado de la ventana, que me miraban ferozmente.

“No se preocupen. Mi objetivo es hacer feliz al Joven Maestro. Así que no me abalanzaré sobre él mientras esté inconsciente.”

Lancé una sugerencia a aquellos que sin duda estaban observando cómo se desarrollaba la situación en tiempo real.

“No importa cómo se mire, la propuesta que ofreció Lady Serena la última vez tenía algunos aspectos injustos.”

“…….”

“A partir del segundo año las cosas se pondrán aún más difíciles. El joven maestro se verá envuelto en situaciones espantosas y no podrá ser feliz una vez que todo empeore.”

Mientras mostraban expresiones algo disgustadas al escuchar esto, hablé, con una leve sonrisa adornando mis labios.

“Por lo tanto, durante estas breves vacaciones de verano, hemos decidido hacer al Joven Maestro lo más feliz posible. Pero…”

“… No podemos esperar por Lady Serena para siempre, ¿verdad?”

En ese momento, el silencio envolvió la habitación.

“Entonces tengo una nueva propuesta.”

En esa quietud…

“Si Lady Serena no puede resolver el ‘problema’ al final de estas vacaciones…”

Les hice una propuesta que no pudieran rechazar.

“…La primera persona que logre pasar una noche con el joven maestro Frey será la que lo haya hecho más feliz durante el descanso.”

“¡…….!”

“Como fui la última en hacer el juramento de sangre, tenía que ser la última en la fila, pero ¿no es eso demasiado injusto? Sin embargo, ahora tengo la ventaja, así que piénsenlo detenidamente.”

Escudriñé sus avatares, vacilando en respuesta a mis palabras.

“En realidad no me importa si soy la último o lo que sea, pero…”

Miré hacia el Joven Maestro, que había estado encima de mí… No. Miré hacia Frey y murmuré.

“…Yo tampoco quiero ceder su primera vez.”

.

.

.

.

.

Mientras tanto, en ese momento…

“…Grind.”

En el sótano de la Mansión Moonlight.

“…Griiiind.”

“Eh, ¿Señorita Serena?”

“Griiiind.”

“¿Está bien?”

Al ver a Serena rechinar repentinamente los dientes, los asesinos que la rodeaban la miraron con preocupación y comenzaron a interrogarla.

“…Aumenta la intensidad.”

“Sí… ¿Huh?”

Sin embargo, Serena continuó rechinando los dientes mientras fijaba su mirada en un solo lugar.

“Yo… yo tampoco lo sé… Todo lo que hice fue usarlo. Asi que, en primer lugar, realmente no entiendo el principio de la ‘Maldición de la Subordinación Familiar’…”

“Duplícalo.”

“¡¡¡Keugaaaakkkk!!!”

Serena envió una poderosa chispa mágica al Lord Secreto, que estaba flotando sobre el pergamino de Irina.

“Una coincidencia…”

Ella murmuró ansiosamente.

“Necesito encontrar esa ‘coincidencia’ lo antes posible…”

Y así llegó a su fin el primer día de vacaciones.