Capítulo 91 – El Villano que Quiere Vivir

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Boom—!

El aire vibró cuando ella cayó verticalmente desde la Isla de Entrenamiento, su aterrizaje causó un impacto tan violento que creó un cráter. Sin embargo, se quitó el polvo de la ropa como si nada.

“… Esto es más rápido.”

Allen saltó directamente del suelo después de una caída libre desde una altura de 3.000 m, durante la cual mantuvo su velocidad bajo control.

— Explica por qué lo hiciste.

Ni siquiera había dado unos pasos todavía cuando alguien le habló. Allen presionó un dedo contra su oreja.

“¿Qué quieres decir?”

— Oí la noticia de ayer.

“Aha ~ ¿Eso? Eso era parte de la misión.”

— Nunca te dimos tal tarea.

Allen rió suavemente.

Como esperaba, no sabían cómo escuchar correctamente.

“Síí~ por eso dije eso es solo una ‘parte’ de eso.”

— …

La voz permaneció en silencio por un momento, lo que le permitió a Allen comprobar si su túnica estaba limpia. Si estuviera un poco sucia, al Profesor no le gustaría.

… ella se sentía como si se contagiara de su obsesión por la limpieza.

— No es necesario que sientas más emociones de las necesarias por el sujeto.

“… ¿Qué?”

Eso fue un poco inesperado. Ella inclinó la cabeza, aparentemente incapaz de entender, luego sonrió.

“De ninguna manera. Ya sabes como soy. Ni siquiera sabía que existía tal posibilidad hasta que me lo dijiste.”

— Sólo te dan una prórroga de tres meses, Ellie. Asegúrate de tener todo resuelto para entonces.

Ella no respondió. En cambio, Ellie sonrió ampliamente y colgó.

“¿Huh? ¡Por ahí! ¡Esa es una supervisora de allí …!”

Mientras ella colgaba, desde el otro lado del bosque, tres niños jadeantes se acercaron corriendo hacia ella. Tenían etiquetas con sus nombres con las etiquetas ‘Carlos’, ‘Leo’ y ‘Lia’ en el pecho.

“¿Eres supervisora?” Preguntó la única mujer entre ellos.

Ellie negó con la cabeza. “No, no lo soy ~ ¿Qué prueba están tomando?”

“Oh, nos estamos sometiendo al examen de aventurero— ¡Ah! ¡Corre!”

El trío se dio la vuelta y agarró la mano de Ellie con sorpresa, haciéndola mirar de dónde venían.

Boom—! Bang—! Boom—! Bang—!

Una gran bestia con un físico más grande que un oso y astas que podían cortar incluso el acero apareció, cargando en su dirección.

Bearhorn.

Skydark: Nombre que le dieron al Oso cornudo ..lol

“Si no es una supervisora, debe evacuar de inmediato—”

“Está bien. Me quedaré atrás.”

“¿Qué?”

“Váyanse, por favor.” Ella insistió con una sonrisa. Aunque con vacilación, los tres niños se fueron.

“¡Groooooooar!” El Bearhorn rugió, quizás cada vez más frustrado y enfurecido.

“Hola. Adiós.” Ellie sonrió y cruzó las manos en el aire.

Eso fue todo lo que necesitó.

¡Riiiiip—!

El cuerpo del oso se partió en dos según los gestos de sus manos.

Cuando la sangre brotó del oso de la herida abierta, ella dio un paso hacia su cadáver, y el paisaje a su alrededor cambió de inmediato.

Desde en medio de un bosque, ahora se encontraba en medio del mercado de un pueblo.

“¡1 Elne por dos pasteles de pescado! ¡1 Elne!”

“Tenemos muchas hierbas medicinales ~ No duden en echar un vistazo, todos ~”

“¡Se venden ingredientes mágicos! ¡Cómprenos, vaya a la isla flotante y revendan para obtener ganancias!”

Las voces de los comerciantes resonaron con fuerza. Después de una cuidadosa observación, dedujo que estaba en Ropon.

“Llegaré a la isla en una hora.”

Asintiendo con satisfacción, se acercó a la acera para descansar hasta que su [Paso] terminara de recargar.

“Dos pasteles de pescado, por favor.”

“¡Por supuesto! Aquí tiene. Sin embargo, ¿qué tipo de magia era esa de antes? Apareció de la nada.”

“Ah ~ Tienes buenos ojos, pero no te preocupes por eso.”

Ellie podía manipular el espacio, y eso no solo significaba que podía moverse a través de el. Más bien, ella literalmente controlaba el espacio mismo.

No solo podía transferir su propio espacio a cualquier lugar que quisiera, sino que también podía hacer lo mismo por los demás. Naturalmente, le costó enormes cantidades de maná.

A menudo usaba este talento para separar las cabezas y los cuerpos de las criaturas, lo que le permitía matarlas con facilidad.

Si su oponente pudiera resistir la magia o el maná, necesitaría un poco más de poder. Por otro lado, podía cortar las extremidades de aquellos de rango significativamente más bajo que ella en un abrir y cerrar de ojos.

“… ¡Estos pasteles de pescado están deliciosos!”

“Ja ja. Come todo lo que quieras. Son solo a un 1 Elne por dos. Bastante barato, ¿verdad?”

“¡Sí ~! ¡Compraré dos más!”

Agarró dos brochetas de pastel de pescado al mismo tiempo.

 

*****

 

El borde de la carretera de Isla de Wizard’s Wealth, después de los exámenes.

Epherene siguió a Sylvia con Mayho.

“¿Realmente podemos seguirla así?” Mayho preguntó preocupada.

Rascándose la nuca, Epherene respondió: “No la estamos siguiendo. Caminamos junto con ella.”

“Ah ~ ¿es así ~?”

Al escuchar su conversación, sus palabras hicieron que los oídos de Sylvia se aguzaran, aparentemente encontrándolo ridículo. Decidiendo no decir nada, pronto se detuvo en medio de una de las áreas residenciales de la isla flotante.

Epherene miró al cielo involuntariamente y se sintió asombrada.

Justo encima de ellas había otra zona residencial.

“¡¿Q-qué es eso?!”

Mientras estaba asombrada, un mago la miró mientras sacaba un periódico de un buzón. Sus ojos se encontraron momentáneamente antes de que él regresara a su casa con una risita.

“Se usa un hechizo de división espacial para maximizar el área residencial de la isla flotante. Eres estúpida por no saber eso.” Sylvia abrió casualmente la puerta principal de un edificio.

Las dos se acercaron a ella.

“¿Es esta tu casa?”

“Sí.”

Epherene tragó saliva con envidia.

‘Oh, cielos, ella tiene una propiedad aquí en la Isla de Wizard’s Wealth. Realmente es de otro mundo.’

“¿No son caras las residencias aquí?”

“Diez millones de Elnes.”

Ellas jadearon.

“¡¿Qué?! ¿Una casa de ese tamaño te costó 10 millones de Elnes?”

“¿No es demasiado caro ~?”

Diez millones de Elnes era una cantidad enorme para una residencia, especialmente considerando que la suya tenía solo unos 70 m².

“Así es como funcionan las cosas aquí.”

“Bueno … eres Sylvia, después de todo. Entonces, ¿ya no iras a la escuela?”

“…”

Ella no respondió.

Sintiéndose decepcionada por razones que no podía comprender, Epherene hizo un puchero.

“Vendrás a visitarnos a veces, ¿verdad?”

“…”

Cuando asintió levemente, sus ojos se abrieron.

“¿Huh? ¿Asintió con la cabeza?”

“Sí.”

Sylvia había estado pensando un poco sobre lo que debería hacer con Epherene, y finalmente se decidió a hacer de ella su propia ‘persona’.

Tener un rival era mejor para ella que no tenerlo de todos modos.

“Vendré mucho aquí ahora también, así que me aseguraré de visitarte en ese momento.”

“Yo también ~ Yo también ~”

“…”

Ella encontró a May-ho o Mie-ho, quien salió de la nada, un poco molesta, pero asintió de todos modos.

“¡Entonces, Sylvia! ¡Hasta luego!”

“Mantente a salvo ~”

Las dos le sonrieron alegremente antes de cerrar la puerta principal.

Sylvia miró alrededor de su nuevo hogar, donde todos sus muebles y equipaje ya estaban completamente colocados. Era más pequeño en comparación con su mansión, pero era bastante acogedor.

Además, pensó que se sentiría sola si fuera demasiado grande, ya que viviría sola.

Al entrar en su habitación primero, encontró a su panda y su familiar esperándola.

“Estoy en casa.”

Habiéndoles dado vida usando piedras de maná, ambos volaron hacia ella, con el panda usando su capa para volar igualmente. Sylvia los tomó en sus brazos y se sentó en la cama.

Tick—Tack—

“…”

Tick—Tack—

Una habitación vacía donde solo se movía el reloj.

Aburrida, tomó su cuaderno de arte y un lápiz de la mesilla de noche, dibujando un retrato de un hombre apuesto, frío y afilado con cautivadores ojos azules.

Deculein.

 

*****

 

Habiendo regresado a la mansión Yukline después de tanto tiempo, inmediatamente me sumergí en el entrenamiento y la comprensión.

Tenía mucho que hacer, incluso dominar la [Psicoquinesis Intermedia] antes de que pudiera prolongarse más y practicar para controlar la [Obsidiana Snowflake] hasta cierto punto.

Comprensión de la Obsidiana Snowflake: 23,1%

Todavía quedaba un largo camino por recorrer, pero afortunadamente, el 20% era equivalente a sus esquinas, lo que hacía que esa parte fuera manipulable, al menos.

“… Nada mal.”

La Obsidiana Snowflake era un metal tan misterioso como su reputación.

Agregué a sus esquinas con [Psicoquinesis], haciendo que pareciera una pelota de ping-pong.

Cambiando libremente, casi como si tuviera atributos de goma, se extendió como una tela, luego se arrugó en una bola, se alargó para crear una espiga …

Su sensibilidad a la [Psicoquinesis] era incomparable a la de cualquier otro metal.

Toc Toc—

Sabiendo ya quién estaba esperando fuera de mi habitación, contuve mi sonrisa y abrí la puerta desde lejos.

“Le traje bocadillos, Profesor.”

Julie. Después de no poder encontrar su camino durante el incidente de la invasión del Altar, ella se consideró una pecadora. En estos días, ella se había hecho cargo de los deberes de mis sirvientes, tal vez para castigarse a sí misma.

“Por favor, disfrútelo.”

Dejó la bandeja con comida y café sobre mi escritorio.

Me encogí de hombros.

“No tienes que preocuparte demasiado, Julie. ¿Qué podrías hacer si no tienes sentido de la orientación?”

Ella se mordió el labio levemente.

“¿Tu entrenamiento va bien?”

“Acabo de terminar.”

Había almacenado el 80% de la Obsidiana Snowflake en mi caja fuerte y convertí el 20% restante en una bola, escondiéndola en mi bolsillo interior.

“Un nuevo semestre está a punto de comenzar.”

“Sí. Pronto estaremos ocupados, tú y yo.”

Sonriendo con amargura, ella extendió un documento.

“¿Qué es esto?”

“Después de analizar la población flotante cerca de la mansión Yukline, identificamos algunos de ellos que deambulan constantemente por la zona, pero en horarios irregulares. Esa es la lista de todas las personas que exhibieron movimientos sospechosos fuera del alcance del público en general.”

Al leerlo, encontré a 33 personas, pero honestamente, pensé que este nivel de observación era natural.

Para el Altar, la Familia Imperial, los eunucos y otras familias nobles, los Yuklines eran la existencia más prominente que tenían que controlar.

“Julie.”

“Sí.”

“Gracias.”

Quizás sorprendida por mis palabras, se rascó la nuca y volvió los ojos para mirar la estantería, solo para encontrar que todos los libros cuidadosamente ordenados en ella estaban relacionados con hierbas medicinales.

Aparentemente dándose cuenta, una suave sonrisa se extendió por sus labios.

“No. Debería ser yo quien te agradezca.”

Yo actualmente estaba estudiando una forma de curar a Julie. No, ya conocía el mejor método para hacerlo.

Sin embargo, mi codicia por estar con ella era demasiado fuerte para poner eso en movimiento.

“Puedes irte ahora.”

“Gracias. Que tengas un buen descanso.”

Después de inclinarse una vez, salió.

Una vez más estaba solo en este tranquilo anexo.

Tomando un sorbo de café y mirando hacia el cielo nocturno, vi las estrellas brillar en la oscuridad.

En ese momento, me di cuenta.

Mi bebida era demasiado amarga.

“… Ella misma hizo esto, ¿no es así?”

Podría haberle pedido a otro sirviente que lo hiciera. ¿Cómo diablos se suponía que iba a beber esto?

Sacudiendo la cabeza, sin embargo, me lo terminé todo, sin dejar ni una gota atrás.

 

*****

 

Bip, bip— Bip, bip—

A través de la cortina entreabierta, la luz del sol de mediados de agosto entró en la habitación 201 del dormitorio de la Universidad Imperial mientras una alarma increíblemente fuerte sonaba sin cesar.

Bip, bip— Bip, bip—

Bip, bip— Bip, bip—

“Ugh … ya para …”

Bip, bip — Bip—

Epherene se despertó con un gemido.

“Ah …”

Su resaca, causada por demasiadas fiestas de celebración durante los últimos días, se sentía como si estuviera aplastando su cabeza.

No solo Julia y su club, sino incluso gente de su ciudad natal, vinieron a visitarla.

“Voy a morir…”

Se levantó de la cama y se paró frente al lavabo. Mirándose en el espejo, abrió el grifo.

“… Hoy es el día.”

Entrevista para asistente de Deculein.

Más allá de su nerviosismo, Epherene recordó un problema que aún no había resuelto.

“El colgante.” Ella murmuró lentamente, sin tener la menor idea de por qué él lo consideraba preciosa y por qué diablos llevaba su foto con él.

‘Tal vez haya información sobre la muerte de mi padre que ni siquiera yo conocía.’

“Si no…”

Epherene se miró en el espejo.

“Sin embargo, merezco ser admirada.”

Incluso ahora, apestando a alcohol, no se la podía considerar fea.

Si se maquillaba, destacaría aún más por encima del resto. Incluso Julia no pudo evitar elogiar su físico glamoroso.

Sus abuelos también dijeron que su belleza por sí sola era como aprobar el examen de servicio civil.

“Espero que el Profesor no esté enamorado de mí. Pffft.” Ella se echó a reír, sintiendo que la idea era una locura, y calentó el agua en el lavabo.

Después de eso, se quitó el pijama y se lavó la cara con [Manipulación de Fluido].

“Ah, los buenos días se han ido ahora que el próximo semestre está a punto de comenzar ~”

Después de usar un polo holgado, pantalones holgados, una túnica y una mochila, salió del dormitorio.

¡Zing-zing-zing—! ¡Zing-zing-zing—!

Los sonidos de las cigarras en pleno verano resonaban a su alrededor.

Pasando por el campus soleado, llegó a la Torre de la Universidad Imperial.

“Estoy haciendo esto.”

Por primera vez como Solda, Epherene subió al ascensor y presionó el botón del 77º Piso.

Ding—!

Sin embargo, al llegar a su destino, lo encontró vacío a pesar de que hoy es el día de la entrevista, a diferencia del piso de la Profesora Louina, que estaba extremadamente lleno de gente.

“¡Oh! ¡Solda Epherene! ¡Estás aquí!”

Allen la saludó, permaneciendo sentado detrás de su escritorio en el pasillo mientras esperaba a los entrevistados.

‘Jeje. Solda Epherene. Ya no soy Debutante … Ella sonrió mientras se acercaba a él.’

“¿Puedo pasar?”

“¡Sí! Eres el último.”

“…”

‘Por supuesto, que lo seria.’

“Ajem.” Ella tosió y luego llamó.

— Adelante.

Deculein ya la estaba esperando cuando abrió la puerta. Como siempre, parecía recto.

Ella se acercó y se sentó frente a él.

“Epherene.”

“Sí.”

“¿Estás solicitando para ser asistente de enseñanza?” Preguntó, su voz tan fría como siempre.

Allen se desempeñó como su Profesor Auxiliar y su asistente de enseñanza. Por lo tanto, Epherene no necesitaba enseñar bajo el mando de Deculein.

Podría ser mejor para su carrera trabajar para él solo después de vivir una vida normal y pasar por el ‘Examen de mérito’.

“Sí. Eso es correcto.”

Pero ella no quería perder el tiempo. Quería descubrir la verdad sobre el Profesor Titular y su padre lo antes posible.

Sin embargo…

“Bien. Te alabo por tu determinación. Pasaste.”

Cuando él inmediatamente aceptó su solicitud, decidiendo su destino en un instante, ella se aterrorizó.

“¿Solo así?”

“Solo tengo dos solicitantes.”

“…”

Ella no sabía cómo él podía transmitir palabras tan miserables usando un tono frío y apático.

Recordando que cientos de Soldas fueron a Louina, Epherene casi se rió, pero rápidamente descubrió un error en las palabras de Deculein.

“¿Huh? Espera, ¿dos? ¿Tantos?”

“…¿Tantos?” Deculein frunció el ceño.

Epherene rápidamente negó con la cabeza.

“Ah, eso se escuchó  mal. Solo tengo curiosidad por saber quién es el otro.”

“Drent.”

“Drent …”

“El que plagió tu tesis. Escuché que ya se disculpó.”

“Lo hizo.”

Epherene recibió una disculpa tan sincera de él que apenas pudo evitar que se arrodillara.

Pero, ¿por qué se postuló con Deculein, la misma persona que quemó su tesis?

“Epherene.” El Profesor Titular la llamó de nuevo.

“Sí.”

“Como trabajarás como asistente de investigación mientras tomas clases en la torre, recibirás un salario. Dejará tus tareas de investigación antes del comienzo de la clase a Allen. No te olvides de llevártelos.”

“¡S-Salario! ¡Sí! ¡Bien!”

“Puedes irte ahora.”

Al levantarse, miró a Deculein, que ya estaba absorto en el papeleo.

No, podría estar ‘fingiendo’ estar absorto cuando en realidad estaba enfocando toda su atención en ella.

“Me voy entonces.”

Epherene salió, huyendo de cualquier posible malestar futuro.

Tan pronto como abrió la puerta, Allen la saludó.

“Solda Epherene. ¡Felicitaciones por ser asistente de enseñanza!”

“¿Qué? Oh, jajaja. Gracias.”

“Sígueme. Vamos al laboratorio.”

Sonriendo, la guio al [Laboratorio de Asistentes].

Solo esa habitación en el 77º Piso era mucho más grande y más limpia que su dormitorio.

Incluso podría dormir en el suelo ahora mismo …

Mientras Epherene miraba a su alrededor con admiración, Allen le habló.

“Esta será tu mesa.”

Epherene miró hacia donde estaba y encontró una silla y un escritorio lujosos, como era de esperar de Deculein. Ella colgó su mochila detrás de su silla.

“Ahora, entonces. Te daré tu tarea de investigación.”

“Sí, por favor. Gracias.”

Thud—!

Un libro grueso pero familiar aterrizó en su escritorio, lo que la hizo asentir con firmeza.

“[El Origen de las Propiedades de la Tierra] … Su dificultad es bastante alta, pero definitivamente vale la pena estudiarla.”

“Sí ~ Eso es cierto ~ Oh, este también.”

Thud—!

Otro libro aterrizó frente a ella, causando que se sintiera un poco desconcertada.

“Oh, no me di cuenta de que habría dos de ellos. ¿No es [Registros de Rupalen] un libro de hechizos bastante complicado?”

“No estas equivocada ~ ¡Ah! Casi me olvido de este.”

Thud—!

Tercer libro.

“U-Um …”

“Oh, estos también son parte de tu tarea.”

“¡Espe-Espera!”

Thud—! Thud—! Thud—!

Los libros de hechizos comenzaron a amontonarse uno tras otro.

“Esto también.”

“¡Pa-Para!”

“Esto también.”

“¡Por favor detente! ¡No!”

No había solo cuatro, cinco o seis de ellos.

 

[Comprensión de las Llamas] [Libro de Exploración del Mar] [Inmersión General de la Propiedad] [Armonía de los Cuatro Elementos Principales] [El Eje Principal de los Cuatro Elementos Principales] [Cálculos del Viento]

 

Había 13 libros en total.

“…”

“¡Todos estos son trabajos de investigación! ¡La orden del profesor es que los aprendas por completo antes del comienzo del semestre!”

Deculein pretendía criar a Epherene como usuaria de los cuatro elementos para su ‘investigación del carbono’.

Epherene respondió inconscientemente.

“… ¿Se volvió loco?”

“¡No! ¡No puedes decir tan malas palabras! Si alguna vez usas jergas, podrías perder tu puesto de asistente de enseñanza. De todos modos, toma esto.”

Allen le tendió un pequeño trozo de papel.

Ya sintiéndose paralizada, ella preguntó lentamente: “¿Qué … es esto …?”

“Oh. El Profesor Deculein asumió completamente el costo de los libros de magia, pero algunos de ellos tienen Copyrights (derechos de autor) de Conocimiento que aún no han expirado. Como ya sabrás, aunque los libros pueden ser pagados por otra persona, los Copyrights de Conocimiento deben ser pagados por el mago que los utilizará ellos mismos.”

En pocas palabras, este era un recibo.

En el momento en que miró los números, se tambaleó.

“… Ah.”

“Incluso si parecen un poco caros ahora, son libros de magia de alta gama que no puedes comprar incluso si pagas 20 veces el precio original … ¿Solda Epherene? ¿Huh? Oh no. ¡Aaaaahhh! ¡Epherene—!”

Cinco segundos después, ella se desmayó.

 

*****

 

Hadekain.

“¿Vino de nuevo?”

Yeriel, analizando documentos como los registros relacionados con el [Campamento de Concentración de Rohalak] del Imperio y el informe financiero del [Pasaje Subterráneo de Marik], frunció el ceño.

“Sí. Él dijo que tiene algo que debe entregarle … Dado que es miembro de la Familia Imperial, no tengo poder sobre él para hacer que se vaya. En cambio, no me quedó más remedio que darle la bienvenida y dejarlo en una habitación.”

Ella dejó escapar un suspiro. Jolang había vuelto una vez más a su propiedad sin ser invitado.

“¿Qué trajo con él? Dile que te lo dé y se vaya.”

“Usted sabe que no me escucha.”

“Tsk …”

Toc Toc—

Al escuchar el sonido, su mayordomo miró hacia la puerta y negó con la cabeza.

“Ábrelo.”

“Bien.”

Cuando lo hizo, Jolang entró en su punto de mira, como desagradablemente esperaban.

“Hola, Yeriel.”

Sonriendo descaradamente, se sentó frente a ella y luego le dio una orden a su mayordomo.

“Déjanos.”

“…”

Después de mirar a Yeriel, se fue en silencio. En el momento en que lo hizo, el eunuco colocó un artefacto de collar en su escritorio.

“Tómalo.”

“Dios … eres audaz. ¿Cómo vas a manejar las cosas más tarde?”

“Mira, cambiarás de opinión.”

Sonaba extrañamente confiado, lo que hizo que Yeriel mirara alternativamente entre él y el objeto que traía.

La visita inesperada de Jolang fue definitivamente sospechosa.

‘¿Qué clase de truco está tratando de hacer este tipo con aspecto de rata?’

“Vamos. Solo échale un vistazo y me iré de inmediato.”

No importaba lo que fuera. Él no se iría a menos que ella hiciera lo que le pedía de todos modos. Por lo tanto, decidió seguirle el juego, asegurándose de no caer en ninguna de sus tácticas engañosas.

“Tsk …”

Yeriel chasqueó la lengua y recogió el collar.

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