Capítulo 90 – El Villano que Quiere Vivir

Cuando los ojos de Epherene sobre él se abrieron, Gindalf se rió entre dientes y se acarició la barba.

Colgante.

No sabía lo que significaba, pero lo único que importaba era el hecho de que Deculein llevaba su ‘foto de la infancia’ e incluso pidió que se la restauraran, ya que estaba demasiado gastada.

“Jajaja.”

‘Quiero decir, ¿por qué demonios haría eso?’

No importa cuánto lo pensó, simplemente no pudo llegar a una respuesta definitiva.

¿Podría ser que Gindalf le estuviera mintiendo?

“Esto es divertido.”

Si es así, entonces esto no tiene ningún sentido.

Actuó como un pervertido en este momento, pero este anciano era un mago etérico poderoso, sabio y conocido.

‘¿Por qué una persona tan famosa me mentiría así? ¿Qué ganaría con eso?’

“…”

En medio de su asombro, Epherene recordó la bondad que Deculein había mostrado hasta ahora.

Salvarla de un castigo disciplinario, permitirles abrir un club, juzgarlos y tratarlos con justicia, etc.

Ella pensó que era solo parte de la culpa que él sentía por la muerte de su padre, pero…

Su mente rápidamente se sumergió en el caos.

“Um, por colgante, ¿tú …?”

“Tu entrevista termina aquí. Como precaución, no le digas a Deculein lo que dije. No quiero volver a ser odiado a esta edad. Para que quede claro, esto es una advertencia, no una solicitud, ¿de acuerdo?”

Gindalf sonrió.

Mirándolo, tragó saliva.

“… Si pudiera decirme una cosa más.”

“Diez mil Elnes.”

“¿Que?”

“Eso es lo que te costaría. Deculein estaba dispuesto a pagar cincuenta mil Elnes.”

“50.000 Elnes… ¿Es posible para mi pagar 100 Elnes? Aun soy una estudiante—”

 

*****

 

¡Slam—!

La puerta de la sala de entrevistas se cerró frente a ella.

Después de ser expulsada en medio de un trato, Epherene encontró caminando a Carixel, quien parecía haber terminado la entrevista con Deculein.

Ella lo miró fijamente por un momento antes de correr hacia él rápidamente.

“Señor Carixel! ¡Señor Carixel!”

“Oh, sí. ¿Dime?”

“¿Te fue bien en tu entrevista? ¿Cómo estuvo?”

“Ajaja … Eso … no lo sé.”

“…?”

Cuando ella inclinó la cabeza confundida, él dio una respuesta más concreta mientras se rascaba la sien.

“Me di por vencido.”

“… ¿Huh?”

“Aprobar el primer examen solo ya nos lleva a Solda … Realmente no necesito más que eso.”

“Oh… Eso es verdad. Supongo que quieres ver a tus hijos tan pronto como puedas, ¿Huh?”

Epherene pensó que su propósito original era solo alcanzar el rango Solda desde el principio de todos modos.

Carixel asintió.

“… Jajaja. Tienes razón. Siempre los extraño.”

“Bueno, al menos volvamos a encontrarnos cuando regresemos al continente más tarde. Sé de un restaurante increíblemente delicioso. ¿Sabes qué son los Roahawks?”

Fue una lástima ya que ella planeaba ver la prueba hasta el final con ellos, pero al menos se hizo un buen amigo gracias a este evento.

“Roahawks… Está bien. Eso suena bien.”

“¡Te encantará!”

Epherene caminó con él por el pasillo para despedirlo.

En el pasillo, tanto los magos que pasaron la entrevista, como Reylie y Dozmura, como los que no estaban sentados, sus expresiones claramente los diferenciaban.

También había una carpa imponente en su esquina, que pensó que probablemente pertenecía a Sylvia. Sintiendo su fatiga causada por las pruebas que tuvo que enfrentar, sintió envidia de sus tres colores primarios.

“Epherene.”

“¿Sí?”

Ella dirigió su mirada hacia él una vez más. Agarrando el pomo de la puerta de salida, le sonrió ampliamente.

“Mantente saludable. Fue por poco tiempo, pero fue divertido conocer a una de los pilares del futuro.”

“¿Pilar del futuro …?”

Rumble—!

Ocurrió un terremoto.

Epherene miró al techo con sorpresa.

Boom—! Boom—!

Siguieron vibraciones posteriores, lo que provocó un aumento repentino de los temblores. Los aventureros se mantuvieron tranquilos, habiéndose acostumbrado a situaciones inesperadas, pero los magos se agitaron bastante.

El supervisor Mimic los tranquilizó.

“Todos tranquilos. Todo está bien.”

En ese momento, Deculein salió de su sala de entrevistas, las miradas de los examinados cayeron inmediatamente sobre él. Con solo dos personas para probar, le quedaba mucho tiempo libre.

Sylvia, que ya había desmantelado su tienda, lo miró mientras él se dirigía hacia la salida.

Lo mismo ocurrió con Epherene, que estaba buscando cierto colgante en su cuerpo. Desafortunadamente, no pudo encontrarlo ni ningún otro accesorio visible, pero eso estaba dentro de sus expectativas. Teniendo en cuenta su personalidad, no la mostraría abiertamente.

Deculein se detuvo frente a ella, quien luego lo miró y tragó saliva.

“Hazte a un lado.” Él ordenó.

“… Oh. Okey.”

Cuando ella y Carixel se apartaron de su camino de inmediato, Mimic le habló.

“Por favor, averigüe qué está pasando. Le seguiré más tarde.”

Se fue sin siquiera responder, mientras que Epherene solo podía mirar fijamente su espalda mientras él corría hacia la escena.

“Yo … yo aún no he sido entrevistada.” Dijo Mayho, su voz llena de tristeza y ansiedad, luego hizo un puchero.

Ella parecía haber estado deseando conocerlo.

“Oh, espera un minuto. Pronto terminará. ¡Todos, por favor esperen adentro!”

El supervisor ​​Mimic volvió al pasillo y Epherene desvió la mirada hacia la salida abierta.

“Uf….”

Respiró hondo, ella se escabulló por la puerta y subió las escaleras para perseguir a Deculein, que acababa de irse.

 

*****

 

… Yo, el oficial de seguridad de la prueba a Solda, estaba volando.

No fue una metáfora. Literalmente estaba volando por los cielos. Subí a una plataforma unida a seis piezas de acero de madera y viajé por el aire.

Esta nueva técnica era mucho más rápida que la velocidad de carrera de [Hombre de Hierro].

“¿Son los de ayer?”

— No lo sé. No puedo ver nada ni siquiera con este vaso mágico.

Louina se comunicó conmigo a través de la bola de cristal.

— Mal**dita sea… Está demasiado oscuro.

A los que perseguí ayer por la noche desaparecieron en algún momento. No pude localizarlos ni siquiera con la resonancia y las vibraciones de mis aceros de madera.

— ¿Puedes esperar un poco? Yo también iré. Estaré allí tan pronto como pueda.

Mientras ella hacía comentarios innecesarios, llegué al lugar y me di cuenta de una situación trágica tan extraña que me dejó sin palabras.

Colgando, me quedé quieto y miré el paisaje grotesco que se formó ante mis iris.

El fluido que fluía encontró su camino hasta donde yo estaba, tocando el tacón de mis zapatos.

… esto era sangre espesa y roja.

Un olor fétido a hierro impregnaba toda la zona.

Carne picada e intestinos desgarrados.

Los jugos cerebrales gorgotearon de un cráneo cortado.

“…”

Me quedé atónito.

Cientos de fragmentos humanos desgarrados se habían amontonado uno encima de otro, formando una montaña de cadáveres. Además, al comprobar su estado con [Psicoquinesis], encontré a muchos Elegidos entre ellos.

Uno de ellos era Drumman, el líder en funciones del Altar. Había sido brutalmente mutilado de una manera que reflejaba su feroz resistencia antes de su caída.

“Esto es increíble.”

No tenía idea de quién hizo esto.

Les tomó menos de un minuto después del ‘terremoto’. ¿Cómo mataron a tanta gente, no, una unidad completa, en menos de 60 segundos?

Algunas de las víctimas habían sido cuidadosamente divididas, casi como si midieran dónde cortar, mientras que otras parecían desmembradas al azar y sin pensarlo mucho.

No sabía si era magia o un atributo.

Todo lo que importaría era la idea de que parecían haber atravesado el espacio mismo.

“… Lo he visto antes.”

Corte de piel junto con espacio.

Al recordar una escena que permaneció viva en mi memoria, finalmente me di cuenta.

Esto fue similar al fenómeno misterioso que atravesó la muñeca de Veron antes.

Rustle—

Sentí que alguien se movía detrás de los arbustos.

“… Tú.”

Dándome la vuelta para enfrentar al intruso, encontré a Epherene, cuyas mejillas estaban infladas como un hámster.

 

*****

 

“Oh, um …”

Epherene miró la montaña de cadáveres detrás de Deculein, cuya mirada fría pero intensa se había posado en ella.

“No te muevas.”

Antes de que pudiera dar un paso vacilante más cerca, él ya la había detenido.

La luz de la luna se derramaba por su afilada mandíbula y nariz, una sombra profunda pero elegante dividía su rostro y lo hacía parecer un fantasma enmascarado.

“Te mancharás de sangre.”

“… ¿Qué?”

Era más que lo suficientemente temible que pararse frente a los cadáveres, pero su voz fría hoy, por alguna razón…

Se sentía un poco diferente.

Ella lo miró sin comprender.

“¡Debutante Epherene! ¡¿Qué estás haciendo aquí?! ¡Vuelve enseguida!”

Louina finalmente llegó a caballo, aunque un poco tarde. Epherene se tambaleó hacia atrás, pero no apartó los ojos de Deculein.

¡Wheeeeng!

Casi al mismo tiempo, los caballeros enviados para manejar esta emergencia aparecieron en el cielo de la Isla de Entrenamiento, cada uno en un dirigible ligero.

Vinieron con la intención de proteger el área de los intrusos, pero …

“¡¿Qué es esto ?!”

Cuando llegaron, no encontraron más que cientos de fragmentos humanos esparcidos por el camino.

Todo lo que les quedaba por hacer era deshacerse de los cuerpos.

Deculein se encogió de hombros.

“Déjenme ser claro. Yo no hice esto.”

“¿Qué? Oh, está bien…”

Asintieron, pero nadie parecía creerlo.

Examinó sus rostros, pero no encontró a Julie, quien dijo que vendría, entre sus filas.

“Julie llegará un poco tarde. Se perdió en el camino.”

“… ya veo.”

El asintió. Después de todo, tenía un mal sentido de la orientación, lo cual servía como su rasgo de penalización.

 

*****

 

En medio de un páramo quemado por el sol abrasador.

Yeriel, la vice-líder de la Familia Yukline y hermana de Deculein, llegó al [Campamento de Concentración de Rohalak] con gente del Palacio Imperial.

“Cielos …”

Su vasta extensión la hizo sentir admiración por el.

“Lo construyó bastante grande.”

Mientras murmuraba sarcásticamente, el eunuco a su lado sonrió.

“Sí, eso es correcto. Su capacidad es de más de un millón.”

“Un millón … Más importante aún, ¿cuándo empezará a encarcelar a los Sangres Demonio?”

Un millón. Rohalak podía soportar más que eso en términos de área, pero el problema era su entorno, que impedía que el suministro estuviera disponible.

Incluso si solo acomodara a 100,000 personas, aún se producirían múltiples muertes por inanición. Ni siquiera podían cultivar en este páramo.

“Ellos tienen varias asociaciones en las sombras.” Respondió el eunuco.

“¿Van a poner a sus líderes aquí?”

“No. estas bestias de alto rango recibirían la pena de muerte. Solo sus subordinados se mantendrán con vida aquí, incluidos los no declarados.”

Yeriel se puso la mano en la cintura por pura frustración.

“Quiero decir, ¿cómo podemos saber si realmente pertenecen a ese clan y simplemente no están declarados? ¿Qué pasa si los registros son incorrectos y encarcelamos a alguien que no es uno de ellos?”

“Ah, ahí es cuando Su Majestad demostrará su infinita sabiduría. Ella tiene varios documentos relevantes, y entre ellos hay una lista de Sangres Demonio que las provincias habían conocido. Oh, ¿sabías que su proceso de nacimiento también es bastante diabólico? Nacen amontonados en una caja roja.”

“…”

Yeriel negó con la cabeza.

Este eunuco no entendió su punto en absoluto.

Él respondió que la Emperatriz tenía registros más antiguos cuando ella preguntó qué harían si los registros estuvieran mal.

“De todos modos, también hemos identificado la ubicación del templo donde sirven.”

“¿Estás diciendo que te meterás con su religión?”

“¿Religión? Difícilmente. Es herejía. Por eso los paladines de la catedral serán los que se encarguen de este asunto.”

Yeriel asintió.

Desde su posición, ella no tenía otra opción de todos modos. Esta fue la voluntad de la Emperatriz y de la familia imperial, y el propio Deculein dio un paso al frente para hacer esto por su cuenta.

Solo tenía que pensar en utilizar esa fuerza laboral. Ya sea que hubiera 100,000 o 1 millón de Sangres Demonios, simplemente dejarlos morir de hambre sería un desperdicio para todas las partes involucradas.

“Oh, cierto. Lord Betan elogió recientemente la Sopa Ritaily que comió en Light and Salt.”

“Realmente no me gustó.”

“Ah, es así que …”

“Bueno, si quieres, puedo hacer una reserva para ti.”

“¡Oh! Si es así, solo nosotros cuatro— ¡¿huh?!”

Los ojos del eunuco se agrandaron, encontrando un arácnido depredador del tamaño de un dedo crujiendo y acercándose a ellos.

Aunque de tamaño pequeño, los escorpiones de Rohalak eran famosos por su veneno que podía matar incluso a los caballeros.

“¡Ten cuidado! Ten cuidado— ¡Aaaaah!”

Él tembló y Yeriel lo miró.

“¿De qué estás tan asustado? ¿Cómo has llegado tan lejos temiendo a un ser tan pequeño?”

“Oh. Um, lo siento, pero ese escorpión es …”

“Shh. Se asustará. Si se asusta, saltará. Cállate.”

Ella estiró un dedo hacia él, sorprendiéndolo. Cuando lentamente trepó como una tierna oveja a su dedo delgado, su sorpresa creció aún más.

“… ¿No es un escorpión de Rohalak?”

“Así es. Estamos en Rohalak, así que es un escorpión de Rohalak.”

“Ten-Ten cuidado. Tiene un veneno mortal.”

“Shh.”

Yeriel le habló al escorpión y le preguntó por qué se movía aquí.

El escorpión respondió que había una aldea cercana.

“Parece que hay una aldea cercana.”

“Whoa …”

Mientras el eunuco admiraba su habilidad, ella sonrió con picardía y estiró su dedo que llevaba al escorpión.

“Ey ~”

“¡Aaaaaaaaaaaaahhhh—!”

“…”

“¡Aaaaah! ¡Por favor, detente …!”

Habiéndose divertido lo suficiente, Yeriel, todavía riendo, habló con su amiguita de nuevo.

“No deberías quedarte aquí. Encuentra un lugar más seguro con tus amigos y familiares.”

“Tu talento sigue siendo muy extraño, Yeriel, aunque esta no es la primera vez que lo presenciaré.”

Tan pronto como vio al eunuco recién llegado, frunció el ceño.

“Es bueno verte de nuevo. Han pasado siete años, ¿no es así? Has crecido mucho.”

Jolang.

Él estaba con un caballero de escolta.

“Hmph. Un eunuco acompañado de una escolta. ¿Así que ahora hay caballeros en el Palacio Imperial que sirven a eunucos en lugar de a Su Majestad?”

“No existe tal distinción. Todos trabajamos para Su Majestad.”

En respuesta a su respuesta, ella se rió con desdén.

“Viniendo directamente a nosotros a pesar de lo fastidioso que eres… Estás nervioso, ¿no? ¿Es por el rumor de que Su Majestad tiene mucho cariño por el Profesor Titular?”

La estructura de poder de un imperio generalmente dependía del carácter y la legitimidad de su Emperador.

Crebaim, el Emperador anterior, buscaba la armonía entre los poderes religiosos e imperiales, mientras que un tercer poder, conocido como los ‘eunucos’, acechaba detrás de todos ellos. Se aferraron a las facciones religiosas e imperiales como murciélagos, devorando a ambos lados.

“Por supuesto que no. No somos más que una sombra de Su Majestad.”

Dado que Crebaim tenía una inmensa legitimidad, los eunucos no podían volverse locos bajo su gobierno. Sin embargo, no se podía decir lo mismo del reinado de la Emperatriz Sofía, ya que ya tenía una mala reputación antes de ascender al trono y era famosa por su indolencia y aburrimiento.

Los eunucos crecieron confiados en que podrían ganar más poder que sus predecesores, pero sus expectativas no podían estar más lejos de lo que realmente sucedió.

Sophien, a pesar de su pereza, impulsó su política con tremenda intensidad y, en el proceso, la persona que ganó más confianza fue Deculein, no un funcionario ni un eunuco.

“Solo vine a entregarte información.”

“¿Información?”

“Sí. El Conde Yukline te ha pasado su gobierno sobre el territorio de su familia, ¿no es así?”

Jolang sacó a colación la conclusión que infirió de la relación de los hermanos Yukline y el desarrollo de su patrimonio.

Yeriel respondió con calma.

“¿Su gobierno? Soy solo la representante del Lord.”

“Seguro. Aun así, Yeriel…” Su voz se convirtió en un susurro. “Sería mejor no confiar en el Conde.”

“Pffft.”

Él habló como si supiera algo que ella no, pero ella solo sonrió, evitando caer en los trucos manipuladores de su clase.

“¿No sientes curiosidad acerca de lo que el Conde Yukline ‘realmente’ piensa de ti?”

“…”

De todos modos, él insistió, haciendo que su expresión se endureciera.

‘¿Lo que realmente piensa de mí?’

Fingió que no le importaba, pero esa pregunta siempre había estado al acecho en el rincón de su corazón.

“Te traeré pruebas pronto.”

Jolang bajó la cabeza y sonrió mientras ella lo miraba con los ojos entrecerrados.

“Si terminaste de hablar, solo come un poco de sopa Rotaily y lárgate.”

Dándose la vuelta, ella se metió en su coche, decidiendo no darle más tiempo de su día.

Sin dejar de sonreír y mirarle la espalda, él le preguntó al caballero que estaba a su lado: “Rugen. ¿Dónde está ese artículo que prometió Zukaken?”

“Ya está listo.”

“¿Qué hay con su contenido?”

“Es una grabación del Conde Yukline mencionando información sobre Yeriel en el pasado. Parece que Deculein no manejó adecuadamente a su personal cuando le dio la espalda al inframundo. No causó daños fatales, pero uno de sus hombres fue capturado, resultando en la obtención de dicho artículo.”

Jolang asintió.

“Tráemelo lo antes posible. No me importa su precio.”

La prestigiosa familia Yukline, la cual permitió que la habilidad práctica de Yeriel y la reputación externa de Deculein se armonizaran, siempre había sido una espina en su existencia.

Habiendo entrado en la peor situación posible para su facción, donde incluso la Emperatriz favorecía a Deculein, Jolang no encontró otra solución que crear una brecha entre los hermanos. Recientemente, finalmente encontró una manera de hacer precisamente eso.

“Me pregunto cuánto tiempo podrá esa joven seguir actuando tan groseramente contra mí …”

Dejó escapar una risa como de zorro mientras veía el vehículo de Yeriel desaparecer en la distancia.

 

*****

 

… La prueba de promoción a Solda de cuatro días llegó a un final exitoso.

Las fuerzas del Altar invadieron en medio de ella, pero debido a la desviada y brutal represalia del Profesor Deculein, que negó que fuera su culpa, el evento logró terminar pacíficamente.

Después de que Sylvia, Reylie, Dozmura, Mayho, Epherene y otras 40 personas pasaron la tercera y última prueba, regresaron al Auditorio de Yukline y asistieron a la ceremonia de entrega de la insignia Solda.

“… ¡Solda Epherene! ¡Felicidades por su promoción!”

La presidenta Adrienne entregó el certificado y la insignia de Solda.

“¡Sí!”

Insignia Solda de nivel 3.

Epherene lo tomó con orgullo. Con esto, sería más fácil para ella escalar hasta Kendall y Regello, los dos rangos por encima de Solda.

“¡Solda Sylvia! ¡Felicidades por su promoción!”

“Si.”

Las dos bajaron y regresaron a sus asientos con su placa, certificado y túnica en sus brazos.

“Gracias, Epherene ~ pasé gracias a la carne de Roahawk que me disté en ese entonces ~” Mayho, sentada a su lado, sonrió.

Ella rió suavemente. “No te preocupes por eso. Estaba delicioso, ¿no?”

“¡Sí, estaba muy sabroso!”

“Ja ja. Cuando vengas al Imperio más tarde, comámoslo juntas de nuevo ~ Entonces puedes invitarme.”

Mientras charlaban, encontró a Deculein sentado en el asiento VIP sobre el auditorio. Gindalf y Rose Rio estaban a su lado.

“…?”

En ese momento, Gindalf, dándole una mirada de complicidad, le habló a Deculein. Frunciendo el ceño, él pronto sacó un collar de su maletín.

“… ¡Oh!”

Justo ante sus ojos estaba el colgante del que hablaba el viejo mago.

Por un momento, Epherene contuvo la respiración.

 

*****

 

“… ¿Qué hay de mal con esto?”

Saqué el colgante de mi maletín y se lo mostré a Gindalf después de que dijo que podría haber cometido un pequeño error en su restauración y quería echarle un vistazo para confirmarlo.

“Hmm …”

Después de mirarlo por un rato, negó con la cabeza.

“Debo haberme equivocado. Está hecho a la perfección. Realmente debería dejar de dudar de mí mismo.”  Luego se rió de buena gana.

Lo guardé de nuevo en mi maletín, encontrando su reacción molesta.

“Por cierto, Profesor Deculein. Si le preguntara quién es la niña de la foto, ¿me lo diría?” Preguntó.

“¿De qué estás hablando, viejo? ¡Déjame participar también!”

Incapaz de contener su curiosidad, Rose Rio intervino. Gindalf frunció el ceño y la apartó.

“Oye. Se supone que los niños no deben escuchar a escondidas cuando los adultos están hablando.”

“Cielos. Eso es tan grosero.”

Sin prestarles atención, me concentré en el evento con apatía.

Sin embargo, no pude evitar notar su mirada alternando entre cierto mago sentado en el auditorio y yo. Después de un rato, se rió entre dientes.

“Jajaja. Esto es divertido, ¿no, Deculein? Otro semestre está a punto de comenzar, así que no dudes en pedirme cualquier solicitud que tengas. Haré uno gratis.”

Encontré su risa molesta. No sabía por qué, pero me dio una sensación similar a cada vez que hablaba con la presidenta.

“¡Solda Reylie! ¡Felicidades por su promoción!”

La ceremonia de premiación estaba llegando a su fin poco a poco.

Los que asistieron a este evento fueron Mayho, Epherene, Sylvia y … ella no estaba aquí actualmente, pero ahora estaba convencido.

El caso de Veron de hace mucho tiempo.

La masacre que tuvo lugar hace dos días.

Todo era… obra de Allen.

Tenía que serlo.

“¡Buen trabajo a todos! ¡Hicieron un trabajo increíble ~!”

Todos aplaudieron simultáneamente después de la exclamación de la presidenta, incluido yo.

En ese momento, sin embargo, sentí una mirada extremadamente oscura mirándome directamente.

Molesto, me di la vuelta.

Epherene.

Se volteó sorprendida, pero tenía las manos apretadas en puños, lo que me pareció extraño.

Negué con la cabeza.

Probablemente estaba tramando algo imprudente ahora que era una Solda.

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