Capítulo 74 – El Villano que Quiere Vivir

Con indiferencia, Sophien miró fijamente la pluma ornamental clavada en el aire. Recientemente se había enterado de que [Bola de Fuego] de las series de destruction, [Barrera] de las series auxiliar y [Psicoquinesis] de las series de operaciones eran los conceptos básicos de cada serie de magia.

Además, había un cierto límite para la producción mágica de uno, por lo que era de conocimiento común que el talento de un mago influía en gran medida en su destreza.

“…”

Sophien tiro de la pluma ornamental con la su propia [Psicoquinesis].

Al hacerlo, destruyó toda la sala de estudio, pero su objetivo ni siquiera se movió.

Su magia destrozó el suelo, demolió el techo, destrozó las columnas y arrasó las estanterías que la rodeaban.

En medio de sus ruinas, Deculein permaneció tranquilo, inquebrantable. Ni siquiera parecía cansado en absoluto. Su respiración era relajada y su dignidad permanecía intacta. Su apariencia aristocrática estimuló a Sophien.

“… Eso es increíble.”

Ella tenía un sentimiento agudo y agilado de lo que era posible y lo que aún debía ser.

La [Psicoquinesis] de Deculein pertenecía a este último. Por supuesto, no quería admitirlo al principio, pero ahora que casi se le había acabado el tiempo, no le quedaba otra opción.

“Han pasado veinte minutos.”

El emperador miró a Deculein, cuyos ojos azules la habían estado observando. Sus iris estaban llenos de misterio, pero brillaban como cristales.

“Puedo ver por qué mostraste tanta confianza antes. No puedo vencer tu [Psicoquinesis].” Sophien sonrió.

Deculein respondió: “Entonces, comencemos la clase de conceptos ahora.”

“¿Aun te queda un concepto por enseñarme?”

“Sí. Quiero mostrarte un concepto que solo yo conozco.”

“¿Un concepto que solo tú conoces?”

Dibujó un círculo mágico en el aire mientras le respondía, formando una forma que estaba lejos de los círculos mágicos ordinarios.

“… Increíble.”

El emperador apoyó la barbilla en el dorso de su mano y, más que el círculo mágico que mostraba, encontró al mismo Deculein interesante.

“Te conozco. He leído de ti en un documento y te he estado observando en persona.”

Sophien sacó todos los papeles que le dio la agencia de inteligencia y se los entregó directamente.

“Ninguno de ellos tenía razón sobre ti.”

“… Ese es un documento clasificado, Su Majestad. No deberías mostrárselo a nadie.” Él frunció el ceño mientras miraba el documento, pero a Sophien ni siquiera le importaba. Todos estaban equivocados de todos modos.

“Dijeron que tus talentos eran falsos y que solo has estado engañando a otros todo este tiempo, pero el Deculein que veo ahora es diferente.” El emperador lo miró fijamente, su mirada moralista abrigaba fuertes dudas.

“Estás lleno de anonimato y misterio. Creo que escondes un secreto. ¿Me equivoco?”

“No. Usted tiene razón.” Confirmó Deculein. Nunca mintió.

Sophien estaba contenta con eso. Como no trató de engañarla, él merecía mirarla en este lugar.

“Bien. Un día, te arrancaré tu secreto.”

“Si se concentra en mi clase, Su Majestad, ese momento no estará muy lejos.”

La respuesta de Deculein se llenó de vigor. El emperador, rio amargamente, finalmente miró el círculo mágico presentado por Deculein.

“Esta es la magia que quiero enseñarte. Es un concepto de los tiempos antiguos, y es una de las ramas de la teoría mágica que ha sido reinventada por la era moderna.”

“Hmm. ¿Qué es qué?”

“Es el lenguaje de las runas.”

“… ¿Lenguaje de runas?”

Los ojos de Sophien se llenaron de sorpresa, pero Deculein se mantuvo en calma.

“Sí.”

Desde el momento en que destruyó las runas, tenía la intención de enseñarle al emperador todo lo que aprendiera sobre ellas para romper su aburrimiento y darle un gran poder para enfrentarse al futuro jefe final.

“Escuché que eso fue destruido.”

Ella también estaba al tanto de su Symposium. Los ojos y oídos de la Familia Imperial siempre habían sido los más rápidos en entregar tales noticias en el mundo.

“El conocimiento todavía existe en mi mente. Sin embargo, a partir de ahora, no habrá evidencia de ello en mi clase.”

Eso fue posible solo porque en este momento, Deculein era un maestro y Sophien era su alumno.

Fue una comunión hecha solo a través de palabras y magia.

“…”

En ese momento, el emperador se dio cuenta de sus intenciones. Otra emoción apareció en su mirada mientras lo miraba.

“Le diré a Su Majestad todas de las 48 runas que he interpretado. Si realiza su [Psicoquinesis] en runas, incluso yo puedo ser derrotado.”

A ningún mago del mundo le resultaría fácil destruir su investigación, más aún si se tratara del lenguaje rúnico. ¿Qué clase de loco enterraría por completo tal cosa, si no una persona que realmente quisiera dejar su huella en este mundo como el epítome de la locura?

“Ahora entiendo.”

Sophien entendió lo que quería decir Deculein.

Parecía haberla estado esperando pacientemente.

“Quieres decirme que sea tu discípula.”

Un superhumano capaz de aceptar la antigua y la poderosa magia llamada ‘Runa’.

El talento que podría continuar con su investigación y llevarla más alto que cualquier otra persona.

“Si.” Deculein asintió con franqueza. El emperador simplemente sonrió.

“Su Majestad será la primera discípula de mi lenguaje rúnico.”

Ese era su propósito.

Desde su primer encuentro, ese ya era su objetivo.

“Al enseñarle las runas, podré entender a Su Majestad, y Su Majestad también podrá entenderme a mí.”

“Bastardo arrogante.” Sophien se rió. Ella no estaba realmente molesta. Más bien, le gustó su audacia.

“Okey. No sé si saldrá a tu manera, pero lo intentaré.”

Deculein inmediatamente ensambló las runas.

La forma en que él se apresuró como si lo hubiera estado esperando todo este tiempo fue tan honesta que ella lo encontró bastante lindo.

 

*****

 

… Después de 90 minutos de clase, salí de la sala de estudio.

“Duque Yukline.”

Mientras caminaba por los pasillos del palacio imperial, escuché que alguien llamaba mi nombre. Al darme la vuelta, vi al eunuco Jolang, un hombre rubio, de piel clara, baja estatura y una barba que ya no parecía capaz de crecer.

“¿Acabo con las clases de Su Majestad?”

A pesar de ser un vasallo, su pulcritud lo hacía parecer más un sirviente.

Sabía quién era. Era un vasallo Elegido que jugó un papel importante en el palacio imperial. También era el maestro de la misión ‘Espejo del Diablo’ llamada “La oscuridad del Palacio Imperial”.

“Si.”

“Entonces, hay algo que necesito decirle.”

“¿Se trata de lo que acecha debajo del palacio imperial?”

“…” Jolang pareció sorprendido, pero pronto eliminó cualquier emoción de su rostro mientras me miraba.

“Eso es correcto. Sígueme. Este no es el lugar adecuado para discutirlo. Hay oídos que escuchan y ojos que miran por todo este lugar en todo momento.”

Seguí a Jolang por los pasillos del palacio imperial, pasando por cientos de habitaciones hasta que Jolang entró en una de ellas.

Era una habitación vacía con olor a incienso.

“Esta es perfecta para una reunión secreta.”

“Ja ja. Si. Ese es el propósito de esta habitación en primer lugar.”

“¿Los eunucos también tienen citas?”

“Bueno, depende de la hora. De todos modos, Deculein. Déjame explicarte qué hay en la oscuridad del palacio imperial.”

Ya conocía la historia detrás de eso.

En medio de la oscuridad bajo esta grandiosa estructura había un producto de demonio.

Para ser precisos, nadie sabía si era de naturaleza demoníaca o no. Independientemente, ese espejo reflejaba el otro lado de este mundo.

No había problema si solo lo reflejaba. Sin embargo, también conducía a un pasaje hacia eso, y en este punto, ya había pasado mucho tiempo desde que eso invadió el sótano por primera vez.

“… así que, estamos reuniendo gente para despejar el sótano. Su Majestad confía en el duque de Yukline …”

“Está bien.”

No pregunte mucho.

No necesitaba preguntar. Esta era una misión que ya había completado cuando estaba probando el juego.

“Sin embargo, tengo una condición.”

“¿Cual?”

“Julie debe ser excluida.”

Jolang enarcó una ceja y pronto se rió suavemente.

“… ¿Es esa una forma de amor erizo?”

Jolang podría haberlo dicho simplemente como una broma o un comentario sarcástico, pero la frase atravesó mi mente intensamente.

Amor de erizo.

Dos erizos tiritando de frío se acercaron para compartir su temperatura corporal. Tratando de sobrevivir al invierno, se abrazaron lo más cerca posible el uno del otro, pero eventualmente, ellos se dieron cuenta.

Cuanto más cerca estaban el uno del otro, más les herían las espinas.

“Fue una broma.”

Al comprender mal mi expresión rígida, Jolang rápidamente cambió sus palabras.

“… Está bien. Solo toma lo que dije.”

“Sí. Bien. Se lo explicaré lo mejor que pueda a la Caballero Julie.”

Asentí y me fui. Mi cabeza estaba llena de pensamientos complicados, y consumí mucho maná mientras le enseñaba a Sophien las runas, pero aún me quedaba algo agendado más por manejar.

Casa de Subastas de Haylech.

 

*****

 

Como la ciudad más rica del imperio, Haylech fue un centro pionero de todo tipo de bienes, tesoros raros, lujo espléndido y bellas artes.

Arlos cerró los ojos mientras disfrutaba de la luz del sol tan brillante como el dorado de Haylech. Una vitalidad diferente a la de las cenizas llenó las calles de esta próspera conurbación.

Una pequeña hoja cayó sobre su hombro mientras caminaba, y una voz salió de ella.

— Arlos.

Sus ojos se agrandaron.

— Habla Zukaken.

Zukaken estaba en una relación de cooperación con el Altar, al igual que Arlos. Sin embargo, al mismo tiempo, también era una de las Seis Serpientes.

“Definitivamente dije que no voy a participar.”

“Esta misión se trata de subyugación, no de asesinato. Además, el plan es simple. Solo te necesito a ti y a Gerek. No hay ningún riesgo involucrado.”

“… Gerek no podrá ayudarte mucho. Pierde la razón cuando se trata de Deculein. No se adapta a tu temperamento cauteloso.”

Zukaken del inframundo fue minucioso.

Tuvo que haber estado pensando en una táctica desde que el Altar ofreció 30 millones de Elnes por la captura de Deculein.

En comparación, Gerek se parecía más a un psicópata loco con trastorno de personalidad disociativo.

— ¿Has olvidado que Deculein se defendió de Rohakan durante su enfrentamiento? Eso solo debería decirte que esta tarea requiere una fuerza inmensa. Necesita estar ahí.

“Si nuestro objetivo fuera matarlo, Gerek lo haría gratis.”

— Repito, esta misión es de subyugación, no de asesinato.

Caminando mientras conversaba, ella llegó a la casa de subastas de Haylech. Ella miró el letrero que decía [Klein].

“Voy a colgar.”

—El Altar agregó la ‘Piedra de Mana de Extinction’ como parte de la recompensa, y estoy dispuesto a darte el 15%. Solo necesito tu marioneta y Gerek.

“…”

Con la Piedra de Mana de Extinction ahora incluido en sus negociaciones, ella se volvió un poco codiciosa.

Zukaken agarró esa abertura.

— Sólo necesitas prestar tu títere. En el lado derecho de la carretera, verás a un hombre pelirrojo de mediana edad fumando un cigarrillo.

Arlos miró en la dirección indicada, y encontró a un conductor vestido con un traje y haciendo lo que decía la inteligencia.

— Él es ‘Jeff’. El conductor de Deculein. Lo someteremos, así que finge ser él con tu marioneta.

“Deculein tiene un historial de darse cuenta de mis títeres, idiota.”

Fue la primera persona en ver a través de su magia.

Por supuesto, gracias a la pista que le dio, sus títeres ya no emitían cenizas.

— Deculein no presta mucha atención a sus sirvientes ya que los ve como herramientas. Estarás bien. Te lo puedo garantizar.

Ella no respondió.

— Aquí estamos hablando de una piedra de maná de la más alta calidad, Arlos. Una gema equivalente a un diamante de maná que los humanos aún no han tocado ni manchado. ¿No lo quieres?

“…”

— Calculo que el valor de la piedra de maná que ofrecieron solo es de 100 millones de Elnes. Te daré el 15% de eso. 15%.

Después de pensar por un momento, respondió: “20%”.

— …

Zukaken guardó silencio. De cualquier manera, Arlos no tenía nada que perder.

Tenía un resentimiento personal contra Deculein, pero no quería convertir a toda la familia Yukline en su enemiga.

— Maldita sea. Es un trato. Yo, el gobernante del inframundo Zukaken, prometo una recompensa del 20% al hipopótamo Arlos, devorador de dinero.

“Genial, pero no tengas prisa.”

— Las oportunidades no llegan muy a menudo. Hoy es el mejor.

Arlos asintió. Después de eso, ella entró a [Klein].

“Necesito su identificación, por favor.”

“Aquí.”

“Sí. Solette. Confirmado.”

Había muchas personas en [Klein], la casa de subastas de Haylech. La mayoría de ellos estaban hermosamente vestidos, aparentemente tratando de declarar su aristocracia. Probablemente estaban apuntando al ‘Anillo fragmentado de Homeren’ como ella.

Pero ella no tenía ninguna intención de entregárselo a cualquiera

… 2 horas después.

“Felicitaciones por ganar su oferta por el Anillo Fragmentado de Homeren, Solette. El dueño del bien está esperando aquí.”

Arlos asintió, habiendo sido guiado por el personal al backstage de la casa de subastas después de lograr su objetivo.

El propietario estaba de pie, de espaldas en medio del escenario. Por alguna razón, pensó que su silueta le era familiar.

“Los postores seleccionados han venido.” Dijo el miembro del personal.

Cuando miró hacia atrás, su identidad la sorprendió, pero no lo demostró.

Deculein.

La miró de espaldas al sol, creando un paisaje deslumbrante.

“Felicitaciones por ganar la puja.” Dijo, llevando un objeto en una mano.

Arlos se acercó con calma. No tenía por qué estar nerviosa. Deculein no conocía su verdadera forma.

“Gracias.”

“¿Tu nombre era Solette?”

Arlos asintió. Mientras la miraba, sonrió.

Ese gesto le resultó familiar. Los hombres nunca podían dejar de sonreír cada vez que su belleza los bendecía.

Sin embargo, aún se mostraba un poco reacia ya que con quien se enfrentaba no era una persona cualquiera.

“Aquí está el Anillo Fragmentado de Homeren. Fue un buen negocio.”

“En efecto.”

Cuando recibió el artículo que le costó 20 millones de Elnes, Deculein miró más allá de ella con sorpresa en sus ojos.

“… ¿Sylvia?”

“Si.”

Arlos también la notó un poco demasiado tarde.

Realmente era Sylvia, la hija de la familia Iliade.

“… ‘Broche de Calabaza de Loterin’. ¿Fuiste tú quien lo compró?”

“Sí. Con el dinero de mi bolsillo que he ahorrado hasta ahora.”

“¿No deberías estar ocupada con los exámenes finales?”

“Está bien.”

Arlos observó la extraña combinación por un momento. Deculein parecía perplejo, Sylvia estaba inexpresiva, pero emitía un brillo extraño.

“Me iré ahora.”

Arlos salió.

— El broche es bonito.

— …

—Profesor. ¿Has cenado ya?

— Ya lo hice.

— Oh.

Ella pensó que sería bastante bueno si se demoraba…

 

*****

 

Después de la subasta, subí al auto.

“Viaje con cuidado.”

Sylvia se inclinó fuera de la ventana, su cabello decorado con el [Broche de Calabaza de Loterin]. Ella se quedó conmigo entre el backstage durante casi 30 minutos.

“Gracias. El broche te queda bien.”

“Oh.”

Las mejillas de Sylvia se hincharon cuando cerré la ventana.

“Volvamos a la torre.”

“Si.”

El conductor de hoy fue Jeff.

El vehículo se deslizó fuera de su espacio de estacionamiento. Como de costumbre, me apoyé en el respaldo de mi silla y saqué una tesis.

 

[Tesis de Solda Drent: Rotación de la Tierra]

 

Esta fue la tesis que el mago de rango Solda Drent pidió correcciones durante el asesoramiento profesional la semana pasada.

Mi corrección fue tan valorada que no acepté que nadie me la pidiera.

— ¡Quiero ser asistente del Profesor Deculein!

Drent accedió a postularse bajo mi mando. Parecía haber reflexionado mucho sobre sí mismo, así que lo tomé como parte del contrato.

 

[El circuito central de [Rotación de la Tierra] se configurará de esta manera, considerando que su función es …]

 

“Es ineficiente.”

Me reí del primer párrafo, descubriendo un circuito ineficiente desde el principio de su artículo.

“Demasiado ingenuo.”

El flujo de su circuito, sus nudos y sus conexiones estaban sueltos. Eso fue porque el efecto de [Rotación de la Tierra] en sí era demasiado difícil.

“Tu habilidad es insuficiente en comparación con el objetivo que te has fijado.”

Seguí leyendo su tesis.

“Es extraño que haya venido a verme, pero…”

Sin embargo, su idea para su tesis no fue tan mala como su ejecución, por lo que había espacio para el desarrollo.

“… Necesita una enseñanza adecuada.”

Para ser honesto, tenía demasiado talento para estar bajo Deculein …

 

*****

 

Arlos conducía el vehículo de Deculein.

Zukaken secuestró a Jeff como estaba planeado, y ella imbuyó a su títere con la imagen de Jeff y su alma.

“…”

Miró a Deculein por el espejo retrovisor, que estaba leyendo algunos documentos. Sin embargo, no podía ver lo que estaba escrito en el.

‘Con esta distancia entre nosotros, él no me notará.’

Arlos se tragó un suspiro de alivio.

Sus títeres no eran diferentes de los humanos.

Además, adoptó perfectamente la apariencia de su conductor. Combinando eso con la información de que no podía importarle menos sus sirvientes, pensó que él nunca se daría cuenta.

Sin embargo…

“Es ineficiente,” dijo Deculein.

El corazón de Arlos latió con fuerza. Instintivamente, agarró con fuerza el volante del coche.

¿Qué quiso decir con ineficiente?

Arlos miró a Deculein por el espejo retrovisor y continuó con calma.

“Demasiado ingenuo.”

Arlos apretó los dientes.

“Tu habilidad es insuficiente en comparación con el objetivo que te has fijado.”

Ella estaba segura.

Había visto a través de su marioneta.

Para Arlos, fue una humillación en sí misma, y ​​fue una pregunta.

¿Cómo fue esto posible? ¿Había alguna magia que pudiera atrapar a su títere de una vez?

‘Nuestro plan fracasó.’

Arlos trató de transmitirle las palabras a Zukaken, pero algo andaba mal. Sintió una extraña sensación de malestar.

Aunque ya lo había notado, ¿por qué Deculein no mostraba ninguna hostilidad? Expresó su extrema agitación dentro de su barrera en ese entonces. ¿Estaba hablando solo para sí mismo en este momento?

“Es extraño que haya venido a verme, pero necesita una enseñanza adecuada.”

Enseñanza.

Mientras reflexionaba sobre ello, su tono arrogante la hizo morderse el labio inferior.

Finalmente se había dado cuenta.

No sabía si su plan se había filtrado y si había un traidor entre ellos, pero ahora no importaba. Deculein había anticipado completamente su operación e incluso probablemente ya sabía quién estaba detrás de ella.

Él había estado esperando este encuentro mucho antes de que la planearan.

La respiración de Arlos se volvió agitada, pero pronto se calmó. Ella podría salir de su títere de todos modos.

‘Zukaken. Si este tipo viene conmigo en silencio … El resto dependerá de ti.’