Capítulo 346 – El Villano que Quiere Vivir

“Wow….”

Los signos de admiración resonaron suavemente a través de los pasillos llenos de maná del faro.

“Es asombroso.”

“Lo sé.”

Los que murmuraban eran Leo y Carlos mientras corrían por los sinuosos pasillos.

“¿Derecha?”

Los sacerdotes del Altar los perseguían como si fueran intrusos, pero, de hecho, ellos acababan de ver una ventana y entraron. La pequeña ventana estaba abierta, diciendo, ‘adelante’. Aunque Lia nunca les dijo que entraran al faro en primer lugar.

“Sí. Derecha.”

Tan pronto como entraron al faro, los ojos de Carlos se iluminaron. El interior, hecho únicamente de Obsidiana Snowflake, era muy peculiar. El techo, el piso y las paredes eran azules sin imperfecciones, mientras que las luces y las decoraciones que iluminaban la oscuridad eran blancas.

La energía de Deculein llenó cada centímetro de este lugar.

“…Wow, Carlos. Carlos. Mira aquí.”

Su misión era de reconocimiento, pero Leo siguió merodeando. Fueron sus instintos animales los que lo guiaron más que su interés.

“¿Ahora qué?”

Pero sus sentidos eran tan precisos como tontos, así que tal vez había algo importante.

“Allí. Por allí. Sígueme.”

Leo salió corriendo y Carlos lo siguió.

“Aquí.”

Leo se detuvo frente a una puerta. Metió la cara por el pequeño hueco.

“Mira aquí, Carlos. Hay muchas pinturas dentro.”

“¿Qué pinturas…?”

En el momento en que estaba a punto de decir algo, la puerta se abrió primero con un crujido. Como si les estuviera diciendo que entraran.

“…”

“Oh, se abrió.”

A Carlos se le puso la piel de gallina, pero Leo, sin sospechar nada, entró. Carlos se sobresaltó y lo agarró por el hombro.

“Oye. No te muevas sin pensar.”

“Mira esto, Carlos.”

Leo señaló las innumerables pinturas que colgaban de la pared. Carlos miró a su alrededor, pero no parecía haber peligro.

“Mira las pinturas.”

Había pinturas de varios paisajes. Carlos abrió mucho los ojos.

“… Ellos deben haber sido encarcelados por Deculein.”

Había personas en cada una de las pinturas.

“…”

Leo y Carlos caminaron lentamente y examinaron cada uno. Como en un museo de arte, como un niño atrapado en algo solemne y sintiéndose bastante abrumado.

“¿Huh?”

Pero de repente, entre esas muchas pinturas, encontraron algo un poco diferente.

“…¿Qué es esto?”

El ceño de Carlos se frunció cuando los ojos de Leo brillaron con sospecha. Este no era otro que—

“¿Deculein?”

El enemigo de esta era y el villano que quería destruir el continente. Un retrato suyo colgaba del otro lado de la pared.

— ¡¿Qué están haciendo?!

La aguda voz de Lia que emanaba de la bola de cristal atravesó sus oídos.

— ¡Salgan ahora mismo! ¡No pueden entrar ahí todavía! No, ¿Por qué entraron cuando quisieron—

“Lia. Este lugar es increíble.”

Leo la interrumpió. La imagen de esta galería se reflejó a través de la bola de cristal.

“Creo que las personas están encerrada aquí.”

— …Haah.

Lia dejó escapar un suspiro y dijo.

— Hicieron un buen trabajo. Esperen por ahora. Yo también voy a entrar…

Click—

Se cortó la comunicación, pero no fue intencional. Una gran mano bajó por encima de sus cabezas y se llevó la bola de cristal.

“…¿Uh?”

“¿Huh?”

Los dos niños miraron hacia arriba, inclinando sus cabezas inocentemente mientras una sombra pesada se proyectaba sobre ellos.

“Niños en este lugar.”

“…”

El hombre los miró con una sonrisa. Carlos y Leo se pusieron un poco nerviosos.

“Encantado de conocerlos. Soy Jaylon.”

Un caballero que fue llamado un gigante del continente, pero fue encarcelado bajo el Palacio Imperial después de que cooperó con el Altar. Aunque Leo y Carlos eran jóvenes, conocían su nombre y conocían su fuerza. Fue autoproclamado como el siguiente más fuerte después de Zeit.

“Syrio. ¿Qué debería hacer con estos chicos?”

Jaylon miró a un caballero rubio apoyado contra una pared de la galería. Syrio de Iliade echó hacia atrás su cabello rubio.

“¿Qué debería hacer?”

Syrio le preguntó a alguien más. Alguien estaba en la oscuridad de este espacio, y Carlos y Leo buscaron a su alrededor.

Allí estaba él, sus ojos se asemejaban a los de un ave de rapiña. Apenas más que un esqueleto, con solo piel adherida a los huesos. Su nombre, el cual había perdido todas sus antiguas ambiciones—

“Glitheon.”

 

*****

 

“¡Lo conseguí! ¡Lo conseguí! ¡Lo conseguí! Lo conseguí, finalmente lo conseguí, lo conseguí, soy una genio o ¿Sino que seria?”

Louina gritaba ‘Eureka’ una y otra vez.

“¡¿Qué conseguiste?!”

Por otro lado, Yeriel gritó mientras sostenía el volante.

Vroom—!

El sedán Yukline se conducía por un oscuro camino forestal.

“Oh, estoy tan emocionada. ¡Date prisa!”

“Ya te dije, ¡lo estoy pisando a fondo! ¡¿Pero qué averiguaste?!”

“¡Date prisa!”

“¡Mal**dita sea!”

Vruuuum—–!

El sedán subió como un cohete por una colina empinada. Gracias a la Mano de Midas que Deculein le dio al sedán, era ágil y rápido incluso para un automóvil.

“No crees que tomará mucho tiempo, ¿verdad?!”

Preguntó Louina. Yeriel asintió.

“Tomará un día.”

Un día era suficiente para llegar a Annihilation. El desempeño de este automóvil era tan perfecto que Yeriel lo admiró mientras lo conducía. Fue molesto; solo él había conducido un coche tan bonito hasta ahora.

Así que, de ahora en adelante, tenemos que cabalgar juntos. Tenemos que compartirlo. Un día lo cabalgare yo, otro día lo cabalgaras tú, hasta envejecer.

“¡Entonces ve más rápido!”

“¡Vengo preguntándote qué has averiguado!”

“Este hechizo.”

Dijo Louina. La emoción en su voz no había disminuido en lo más mínimo.

“¡Me di cuenta de lo que va a hacer!”

“…¿Y?”

Preguntó Yeriel, tratando de calmar los latidos de su corazón. Louina, tratando de no perder de vista el análisis en su cabeza, asintió violentamente.

“Él no es un villano.”

“…”

En ese momento, Yeriel pisó el acelerador.

¡Vruuuum——-!

El sedán se disparó. En algún momento, el camino desapareció y un camino forestal lo reemplazó. Muchos obstáculos se interpusieron en el camino. Sin embargo, no importaron. Yeriel puso una barrera sobre el sedán y se estrelló contra ellos, atravesando incluso los árboles.

“Pero hay un problema.”

La expresión de Louina volvió a ponerse seria.

“¿Cual?”

“Los magos lo saben. Lo que creo es que, al final, los demás también lo pensarán. Es solo cuestión de tiempo.”

“…”

“Sería feliz si fuera la única que se dio cuenta de esto… pero sí.”

Louina se giró hacia Yeriel. Yeriel, concentrada en conducir, mantuvo la vista fija al frente.

“Si tan solo los magos que odian a Deculein lo supieran primero…”

“¿Quién, por ejemplo?”

Preguntó Yeriel. Louina reflexionó en silencio antes de responder.

“Alguien como Glitheon.”

 

Skydark: Si mi memoria no me falla él es el padre de Sylvia.

 

*****

 

…Glitheon estaba mirando alrededor de la galería de Quay. Mientras capturaba el paisaje de cada pintura en sus ojos, él se burló.

“¿La ambición de Iliade era sólo para esto?”

Su hija, Sylvia, quedó atrapada dentro de esto. La niña, la única esperanza de Iliade, fue destinada a ser una niñera 「Fuera del Mundo」. Desperdició su talento cuidando a los pobres plebeyos y a las personas inútiles que no eran necesarias en el continente…

“¿Esto también es culpa de Deculein?”

Glitheon quería que Deculein se convirtiera en la leña de Sylvia. Quería que Sylvia lo quemara hasta convertirlo en cenizas y se convirtiera en la mejor maga de todos los tiempos.

— Este era un contrato.

Él mató a la prometida de Deculein y mató a la madre de Sylvia.

“Ese bastardo astuto…”

Sin embargo, ahora Sylvia estaba siendo aprovechada en beneficio de Deculein. Desperdiciando sus talentos para Deculein, colorearía el mundo con la luz de Iliade.

“¿Qué hay de estos dos, Glitheon?”

Preguntó Syrio. Leo y Carlos aumentaron su maná ahora. Jaylon los miró como si fueran lindos.

Glitheon volteó la mirada.

“¿Vas a seguir mi voluntad?”

“Sí. Jaja, soy un caballero de Iliade, ¿verdad? Y me salvaste de la prisión Imperial. Por supuesto que seguiré tu voluntad.”

“…”

Glitheon miró a Syrio sin decir una palabra.

“Eres un sirviente del Altar.”

“…Si. Bueno.”

“Entonces dile a los sacerdotes del Altar que Deculein los traicionará.”

“…”

Glitheon le tendió un pergamino atado. Este era el Análisis del faro de Deculein que él mismo escribió.

“Mi corazón está completamente destrozado, y mientras cavaba en el vacío donde lo había perdido todo, esto parecía tener sentido. Descubrí naturalmente el verdadero significado de Deculein para quien hizo el faro.”

Interpretó y analizó el faro de Deculein con su fuerza y, al final, obtuvo una visión perfecta de su voluntad.

“¿Es así?”

Syrio tomó el análisis y preguntó, pero no lo abrió. Después de todo, como caballero, no lo entendería.

“¿Qué tipo de traición?”

“…Es simple. El Dios del Altar quiere destruir este continente y las almas de sus habitantes, ¿cierto?”

“Sí. Sera una reavivación completa.”

Syrio respondió. Glitheon sonrió.

“Deculein no quiere eso. Está tratando de preservar a los humanos aquí.”

Por eso, Sylvia estaba siendo desperdiciada. Por todas esas cosas inútiles…

Glitheon apretó los puños.

“Aun así, Deculein se está sacrificando. De hecho, Yukline e Iliade siempre han sido opuestos.”

Como el agua y el aceite. Sus familias de magos nunca podrían mezclarse y, en última instancia, estaban obligadas a enfrentarse entre sí.

“Syrio, yo prefiero la destrucción.”

Syrio asintió en silencio.

“Voy a destruir la fea causa de Deculein. No voy a dejar que haga lo que quiera.”

“…Mmm.”

Esto fue muy afortunado para Syrio, un secuaz del Altar. Pero tenía curiosidad.

“¿Es solo porque Sylvia no pudo convertirse en Archimago?”

Con una sonrisa, Glitheon negó con la cabeza.

“Syrio. El significado de Iliade es ambición, y la ambición es la llama.”

Hizo una pausa por un momento y dejó escapar un suspiro bajo. Un suspiro vacío fluyó de un cuerpo vacío. Al verlo así, Syrio lo sintió. Glitheon de Iliade ya se había reducido a cenizas.

“Yo, Glitheon, perdí esa ambición, pero Sylvia la tenía. Ella quería convertirse en una gran maga… tenía la ambición y el talento para hacer realidad el sueño de la familia.”

Glitheon apretó los dientes, un fuego floreció sobre su palma.

“Sin embargo, esa ambición. La ambición que podría haber sido el sol, ahora…”

Miró alrededor de la galería llena de pinturas. Epherene se apoderó de la Isla Flotante con su fuerza y ​​ya se había convertido en una Archimaga, mientras que Sylvia se desperdiciaba allí, preservando a los humanos inútiles.

“Ella se ha convertido en algo así como una chimenea para calentar a alguien.”

Aunque él mismo lo dijo, la analogía parecía correcta. Glitheon estalló en una risa triste.

“Iliade debería ser eones de fuego…”

¡Whoosh—!

En un instante, las llamas en el agarre de Glitheon se extendieron por su cuerpo.

“Sylvia se contenta con ser sólo eso.”

El remordimiento y la tristeza coloreaban su voz.

“Esa niña no es mi hija.”

Con eso, Glitheon preparó la gran magia que imaginó.

“Maldito continente. Maldito Deculein.”

A través de su propio cuerpo, corazón, vasos sanguíneos, músculos y órganos, a través de todo el maná, la magia y el conocimiento que su mente acumuló.

“Quiero que mueran.”

Para convertirse en un fuego por eones y prender fuego a este faro. Cortar los pasajes de la humanidad que Deculein quería preservar y confinarlos fuera del mundo.

“… De acuerdo con la voluntad del Altar.”

Con su cuerpo ardiendo como un supernova, murmuró Glitheon. Cerró suavemente los ojos y…

— ¡No!

La voz de Lia cortó el aire. Su cuerpo se estrelló contra el de Glitheon.

“¡Ouch!”

Bang—!

Glitheon golpeó el suelo, enredándose con su pequeña forma.

 

Skydark: La pequeña forma de Lia…XD