Capítulo 300 — El Villano que Quiere Vivir

— ¡Thump!

Mi corazón estaba latiendo. La energía oscura demoníaca que circulaba por mi cuerpo amplificó todas mis características, y mi Visión atrapó al Caníbal. Me miraba fijamente, gruñendo y codiciando mi carne. Los ojos rojo oscuro de una bestia feroz, moviéndose a través de la niebla. Este era un demonio antiguo que comió a innumerables personas a lo largo de los años.

Sin embargo, matarlo era sorprendentemente simple. Como dice el refrán, ‘Ojo por ojo y diente por diente’. Por este principio, el demonio podría ser destruido.

…Este fue mi razonamiento. Después de eso, me moví por instinto.

La energía que brotaba despertó el odio en mi mente, y el linaje de Yukline me instó a matarlo. En este momento, incluso mi poder mental, que había alcanzado su punto máximo, solo controlaba mi capacidad para identificar quién era un enemigo. No, yo me negaba a controlarme.

¡Whoooosh—!

Primero, lo observé con la Visión. Capté su ubicación e inmediatamente liberé toda la energía oscura de mi cuerpo para congelarlo.

…Y.

— Craaash.

Se escuchó el sonido de algo rompiéndose. Al momento siguiente, un torrente de energía oscura fluyó hacia mi boca. No era humano… pero tenía el sabor de algo vivo.

¡Crack—!

Me tragué parte de él.

— !

Luchó en mi cuerpo. Sin embargo, no me importaba. No era más que un bulto de energía oscura corriendo salvajemente, así que todo lo que tenía que hacer era digerirlo. El proceso continuó sin problemas.

— !

Poco.

— !

A.

— !

Poco.

Cuanto más lo digería, más disminuía la lucha y mi visión se oscurecía. No podía ver nada. Ni siquiera podía pensar. Solo ira, rabia más allá de mis límites, emanada violentamente del corazón de Yukline.

¡Woooosh—!

La energía oscura que giraba dentro de mi cuerpo se filtró al exterior. El latido de mi corazón era fuerte como si fuera a romperse, y mis venas se hincharon.

…Me estaba dando hambre. Este simple deseo que sentí probablemente era del Caníbal. Me despertó estos deseos y me instó a comer.

…Estaba hambriento.

¡Crack—!

Un sonido espeluznante llegó a mis oídos, probablemente por la matanza que cometí.

“Uf… aaahhh…”

Débiles gritos llegaron a mis oídos.

— ¡Profesor! ¡Profesor!

Al mismo tiempo, alguien gritó.

— ¡Profesor, quiero decir, Deculein!

Sin embargo, el hambre dentro de mi cuerpo todavía estaba allí, y todavía estaba buscando comida.

… Estaba cada vez más hambriento.

Entonces apenas me di cuenta de que este no era el deseo del Caníbal. Él ya había sido devorado por mí, pero la explosión de la energía oscura del demonio fue…

— …Woojin.

… El tiempo se ralentizó. Todo el sonido desapareció.

Ese nombre siendo llamado detuvo mi corazón. No fue más que una alucinación…

 

*****

 

… Fue un momento fugaz. Probablemente tomó menos de un minuto. Ese fue el tiempo que le tomó a Deculein consumir por completo al demonio devorador de hombres.

“…”

Lia observó a Deculein en silencio. Ahora estaba tendido en el suelo; las venas empujaban contra la superficie de su piel de un rojo oscuro.

“…Conde. ¿Está bien?”

Preguntó Lía. No hubo respuesta de Deculein, pero…

“¡Ahh, ahhhh—!”

Alguien más gritó.

“…¡Que alguien llame a un médico, un médico!”

Era Bell. Atrapado por la explosión de Deculein, su brazo y pierna fueron arrancados.

Por supuesto, nadie podía ayudarlo. Incluso el teniente de Bell se estaba sigilosamente huyendo de él.

“… él era más como un demonio que el demonio.”

Lucy dijo mientras miraba a Deculein. Incluso ella parecía un poco asustada.

“¿Cómo puede un humano comerse a un demonio?”

Deculein congeló al demonio devorador de hombres para darle forma y se lo tragó. Fue realmente una vista de ensueño. No es un buen sueño, sino una pesadilla.

Una verdadera pesadilla.

“¡D-Deberíamos buscar un médico—!”

“Eres tan ruidoso.”

Lia conjuro Silencio. Mientras tanto, Lucy miró a Deculein. Parecía estar pensando en algo.

“… No te atrevas a considerar ningún pensamiento extraño. Yo lo protegeré.”

Lia, al notar su mirada sospechosa, abrió los brazos y calentó su maná. Lucy sonrió.

“No lo tengo. Solo tengo curiosidad.”

“¿Acerca de qué?”

“¿Qué significa la palabra que calmó a Deculein? ¿Wugin?

“…”

Lia se estremeció. Kim Woo Jin. Los nombres coreanos eran bastante desconocidos en este mundo, por lo que parecía que lo entenderían como una palabra en lugar de un nombre.

“…No es nada.”

Lia miró a su alrededor y luego volvió a mirar a Deculein. Todavía estaba inconsciente… ¿Era el demonio antiguo demasiado para él? No, incluso si no fue demasiado, la forma en que lo mató puso demasiada tensión en él.

De todas formas.

“…”

Lia observó a Deculein. Su rostro somnoliento se parecía al de Woojin…

¡Slap—!

Lia se dio unas palmadas en las mejillas, sorprendiéndose a sí misma de vuelta a sus sentidos.

“Sir. ¿Está bien?»

Deculein no era Woojin. Debe haber sido pura coincidencia que él respondiera a su llamada.

“…¿Conde?”

Lia llamó a Deculein y le puso la mano en la frente.

“¡Ahhhhhhhh!”

— Él la agarró de la muñeca.

Los ojos de Deculein se abrieron de golpe.

“¡Me-Me asustaste!”

 

*****

 

…En el santuario Time, Sophien estaba leyendo un diario.

Rustle— Rustle—

Estaba pasando las páginas una por una, dejando que las palabras cayeran sobre su corazón como nieve pura.

[…El profesor Deculein siempre ha estado ahí para mí.

Mi padre rompió mi cuerpo, pero el profesor tomó mi error como si fuera suyo. Me hizo odiarlo para que no me lastimara. Él tuvo que soportar el odio por sí mismo.]

Cada línea contenía el corazón sincero de Julie y todos los sacrificios y la devoción que Deculein mostró a Julie.

[No sabía que él era alguien así. Tal vez lo sabía, pero lo negué. Por lo tanto, me doy por vencida porque soy un ser humano lleno de pecados, errores y malentendidos. Tratar de huir sin vencerlos es lo que puedo hacer por el bien del profesor.]

El diario estaba frío, con manchas de escarcha aquí y allá. Probablemente, fue por las lágrimas de Julie.

[Cuando abra los ojos, lo olvidaré, pero quiero recordar al menos esto.]

Los ojos rojos de Sophien se hundieron.

[Aun quiero ser un caballero. Sin embargo, mi maestro es solo Deculein…]

…Todo esto.

Thud—.

Sophien cerró el diario. Bajó la cabeza y se llevó la mano a la barbilla, luego miró a Julie en el cilindro.

“…Te envidio. No puedo evitar sentir envidia.”

Un amor que ni siquiera el Emperador recibiría jamás. Julie, que lo tomó sin saberlo, regaló su vida.

“…Y te compadezco.”

Sophien aflojó el agarre de su espada.

Clank—

El dorso de la espada tocó el cilindro y se deslizó.

— ¿Va a dejarla así?

Preguntó Keiron.

“Si Julie muere, el Profesor estará triste.”

— Sí. Así es.

Deculein triste. Nunca antes lo había visto triste, pero por eso no quería ni imaginárselo. Incluso pensar en ello era doloroso.

“…Keiron.”

Sophien colocó a Keiron sobre la mesa. Se paró encima del diario de Julie en su forma en miniatura.

— Sí.

“Esto es injusto.”

Ella suspiró.

“Deculein está tratando de proteger a Julie con su vida. Él valora a Julie más que a mí… pero me preocupa que Deculein esté triste.”

Ella fue quien pretendió matar a Julie para tener a Deculein. Sin embargo, temía que Deculein lamentara la muerte de Julie.

“Es extremadamente injusto.”

— No.

Era la primera vez que Keiron la negaba tan rotundamente. Los ojos de Sophien se entrecerraron.

“¿Qué?”

— No es injusto.

Antes de que pudiera preguntar a qué se refería, Keiron bajó la cabeza y dijo.

— Su Majestad. Deculein ya ha entregado su vida a Su Majestad.

“…”

— Él siempre se dedicó.

Sophien miró a Keiron y le preguntó a qué se refería con su mirada.

— Su Majestad. El corazón de Deculein está herido. Incluso su cuerpo no puede recuperarse de las cicatrices que ha sufrido.

“Qué—”

— Su Majestad está condenada a matar a quien ama.

Como el caballero del Emperador, normalmente no podría atreverse a decir tal cosa. Pero Keiron había estado esperando y esperando este momento.

“…Keiron.”

Sophien era la más humana ahora. Keiron no podía perder esta oportunidad de oro. Como su protector, no debe perdérselo.

“¿Quieres morir?”

— Su Majestad, usted definitivamente… trató de matar a Deculein.

“…”

— El amor de Su Majestad despertó dentro de usted las ganas de matar. Su Majestad nació así desde el principio.

La prueba estaba en los ojos de Keiron. Sophien también se dio cuenta; el caballero del Emperador nunca le mintió al Emperador.

— Así que Su Majestad ha intentado matar a Deculein ni una, ni dos, ni tres, ni cuatro… más que eso.

Keiron se enfrentó con Sophien de frente.

— Deculein siempre ha servido a Su Majestad a pesar de todo. Él no huyo. Solo soportó.

Los intentos inconscientes de Sophien de matar a Deculein. Incluso en momentos, podría morir si cometía el más mínimo error; Deculein siempre regresaba resueltamente a Sophien…

— Además, en la noche cuando Su Majestad estaba exhausta, vino a visitaros y os tuvo en sus brazos. Soportando las uñas de Su Majestad clavándose en su corazón.

“…”

Algunas mañanas en las que se sentía tan extrañamente renovada. Entonces, en todos esos días, Deculein…

— Su Majestad. Deculein es ese tipo de persona incluso si Su Majestad lo humilla o incluso si intenta matar a Julie aquí.

“…”

— Él siempre está dando su vida por Su Majestad, sólo por usted.

Sophien cerró los ojos por un momento. Por alguna razón, las palabras de Keiron se sentían como si estuvieran golpeando sus sienes.

“…¿Quieres decir que Deculein lo sabe? Que estoy tratando de matar a Julie…”

— Sí.

“…Te has estado comunicando en secreto, Keiron. Con Deculein.”

El caballero del Emperador no dijo nada. Así que era cierto.

— Su Majestad.

“…”

Sophien apretó los dientes y apretó la mandíbula.

— Dígame sus sentimientos Su Majestad.

“…¿Sentimientos?”

— Sí. Lo que está sintiendo en este momento.

La pregunta de Keiron era ridícula, y era tan ridícula que le costaba hablar. Sophien lo miró con ira en la boca…

— Su Majestad. Está derramando lágrimas en este momento.

Sus palabras la detuvieron.

Drip—

Algo cálido y húmedo rodó por su mejilla.

Drip—

Sophien se quedó mirando la gota que cayó al suelo.

Drip—

Una lágrima. Ni siquiera tuvo que preguntar de quién era.

Suyo.

Drip—

Las emociones de Sophien fluyeron libremente fuera de ella.

Drip—

Lágrimas por primera vez en su vida.

Drip—

Sophien forzó su voz temblorosa.

“…No puedo resolver esto.”

…Ella respondió la pregunta de Keiron.

“Estos sentimientos.”

Ella no podía entenderlo. No podía entender este sentimiento que sacudía su corazón.

“Pero una cosa es segura…”

Volvió a mirar a Julie. Este caballero había caído en un sueño profundo y estaba cambiando su tiempo.

La espada de Sophien yacía encima de su contenedor. La espada que ella trajo para matarla.

“…No quiero que el Profesor esté triste.”

Sophien no tenía forma de saber us sentimientos de esta manera.

“Quiero que sea feliz.”

El emperador era un ser que podía tenerlo todo. No había nada que ella no pudiera tener o tomar.

“Incluso si a la que ama no soy yo… está bien.”

Sophien estaba confundida consigo misma, diciendo que estaba bien incluso si no podía tenerlo. Más bien, sonrió, aliviada a pesar de su confusión.

“Está bien. Si el Profesor es feliz… no me arrepentiré incluso si me ahogo en este sentimiento.”

¿Era esto amor? ¿El amor sólo deseaba la felicidad de la persona amada? ¿Estaba bien si ella no estaba incluida en esa felicidad?

“Ese es mi sentimiento…”

En ese instante—

El cerebro de Sophien estaba lleno de dolor. Se sentía como si le estuvieran abriendo el cráneo, pero al mismo tiempo, se sintió liberada.

“…”

Sophien aceptó el dolor y sus nuevos sentimientos.