Capítulo 214 – El Villano que Quiere Vivir

“El profesor es como he oído.”

En un elegante restaurante en Makan, Roseph estaba hablando durante nuestra comida compartida.

“Hay una razón por la que Su Majestad confía en ti.”

Corté el bistec de ternera con un cuchillo, los jugos se filtraron. Era un alimento que a Epherene le gustaría.

“Pero, ¿Los Protestantes están adelantando ahora?”

Preguntó Ihelm.

“¿Pensé que los Protestantes simplemente vivirían tranquilamente en la Iglesia?”

Él sonrió mientras bebía su vino. Los ojos de Roseph eran tan delgados como un hilo y torcidos como los de un zorro.

“Es obligación de la Iglesia erradicar cualquier perversión de la fe.”

“No, pero, aun así, ¿Los Protestantes no creen en Dios?”

Había tres religiones principales en el continente. Después del colapso de la era sagrada donde se creía que Dios existía, los protestantes siguieron las enseñanzas y doctrinas de Idsilla, el ser humano más cercano a Dios. La Iglesia de la Sangre Demonio creía en un Dios antes de la era sagrada, y el Altar estaba tratando de resucitar a ese Dios.

“Sí, así es. Sepereunso 3:19 ‘El Señor dijo que él no era Dios, sino una persona como nosotros…’ Por lo tanto, solo servimos a la enseñanza del Señor, pero no seguimos a un dios.”

Roseph cortó un trozo de espárrago. Era vegetariano y se abstuvo de beber porque empañaría su espíritu honorable. También era célibe, al igual que Idsilla.

“Por supuesto, no hay una gran brecha entre el Señor y Dios.”

“¿Creen los Protestantes en la existencia de Dios?”

El que preguntó no fuimos ni Ihelm ni yo, sino Primienne, del Departamento de Seguridad. Los funcionarios gubernamentales del imperio se reunieron en Makan por las secuelas de Barahal, y Primienne, la Vice Directora de seguridad, estaba entre ellos. Roseph sonrió brillantemente.

“Oh~, así es—”

“El primer Archimago era un creyente de Dios.”

Entonces, todos dentro del restaurante me miraron. Roseph, Ihelm y Primienne, con quienes estaba sentado, pero también los funcionarios de alto rango que nos rodeaban. Baje mi cuchillo.

“Puesto que él creía en Dios, sus seguidores no pueden negar a Dios.”

“Sí, así es. Oh~, el profesor realmente me entiende.”

Roseph tomó otro bocado antes de continuar.

“Así es. Incluso el Señor es un creyente, así que lo seguimos… pero, la verdad es que la interpretación es discutible.”

Miré a Roseph.

“Ya sea que el Señor creyera verdaderamente en la existencia de la era sagrada, o que las enseñanzas del Señor fueran escritas por su mano derecha, Rohan… la verdad es que los Protestantes piensan que la última es más convincente. Es una narración diseñada para persuadir a aquellas personas ignorantes que no quieren creer en el poder del Señor. Es más…”

Roseph también bajo su cuchillo. Se limpió la boca con una servilleta.

“No hay evidencia de que existiera la era sagrada. No queda nada en este continente. Decir que las runas son el lenguaje de Dios es también una narración creada para las generaciones futuras. Pero, las huellas del Señor permanecen en todo el continente.”

Primienne miró tranquilamente entre Roseph y yo. Mientras tanto, Ihelm bebió su vino.

“Por lo tanto, el Protestantismo es una religión que cree en un santo que vivió. Aparte de su existencia, la razón por la cual la Sangre Demonio desafía la fe es que creen en un dios incierto.”

“Ya veo.”

Asentí. Roseph sonrió brillantemente.

“Como se esperaba…”

“Pero, ¿por qué dudamos de las enseñanzas existentes?”

“…”

El rostro de Roseph se endureció en ese momento.

“La Biblia no es diferente de un libro histórico escrito por el primer Archimago. Pero, algunos sospechan que la mano derecha agregó comentarios innecesarios, y el resto simplemente lo acepta como es. En el momento en que dudes de algunas partes de la Biblia, se romperá su perfección absoluta.”

Incliné la cabeza, una sonrisa se elevó espontáneamente en mis labios.

“Si vas a dudar, dúdalo por completo, y si vas a creer, créelo por completo.”

Roseph rápidamente volvió a sonreír.

“…Ese discernimiento es muy mágico. Descartar creencias religiosas y mirar solo los hechos. Es por eso que el Señor es llamado el primer Archimago.”

De hecho, ese también fue el título oficial del juego.

“Así es. Idsilla es la raíz de la magia en el continente. Lo respeto por eso, no por su religión. Yo comprendo y pongo en duda la magia que dejó atrás.”

Miré el reloj: 7:55.

“Debido a esa sospecha, sé las respuestas a las diversas preguntas que los Protestantes tienen de la Biblia.”

“… ¿Diversas preguntas?”

Una leve arruga apareció en la frente de Roseph. La mayor tarea de la Iglesia fue el análisis de la Biblia y sus doctrinas. Aun había muchos misterios vagamente interpretados que lo rodeaban.

“Por ejemplo, en Sepereunso 8:11, el problema se refiere a una oveja que se ha extraviado y lleva una máscara de lobo. El problema sobre la interpretación de este proverbio que Idsilla dejo antes de dejar el mundo.”

Como tal, había muchas preguntas en la Biblia, pero sabía la mayoría de ellas gracias a mi conocimiento del juego y Comprensión.

“…¿Es así?”

Roseph se esforzó por sonreír, pero su rostro se puso más rígido mientras continuaba explicando.

“Me parece que el último proverbio de Idsilla es similar a un mapa.”

Un mapa, evidencia que muestra la ubicación de la reliquia sagrada que formaba parte de la quest principal. La Iglesia debe haber investigado mucho. Ese hecho probablemente solo era conocido por unas pocas personas, en el más absoluto secreto.

“…Mmm. Eso es interesante. ¿Qué más hay?”

Roseph no dejó que nada se notara, y…

Tik—

Justo en ese momento, el reloj marcó las 8.

“Es hora; entonces con su permiso. Pueden ignorar esto porque es una deducción no religiosa de todos modos.”

“No, esa era una hipótesis interesante.”

Me puse de pie. Roseph sonrió y asintió, pero pude ver la expresión escondida debajo. Nerviosismo, ansiedad, sorpresa, duda. Roseph era un sacerdote honesto.

 

*****

 

“¿Cómo estuvo, Vice Directora?”

Por la noche, cuando el sol se había puesto, Primienne salió del restaurante de Makan con los otros oficiales aferrándose a ella.

“No paso mucho.”

“Oh, eso es un alivio, wow~ en serio. Pensé que estaban locos.”

El Director del Departamento de Seguridad se limpió el sudor de su cabeza calva.

“De repente te sentaste al lado del Profesor tan descaradamente.”

Cuando todos los oficiales de alto rango se reunieron en Makan y entraron al restaurante, Primienne fue inmediatamente hacia Deculein. Por supuesto, todos los miembros del Departamento de Seguridad se sorprendieron, pero Deculein sorprendentemente dejó en paz a Primienne.

“Uf… eso es correcto. De todos modos, gracias a tu locura, el estado del Departamento de Seguridad debe haber subido un poco.”

“¿Cuándo empezaremos nuestro trabajo?”

“Solo necesitamos transferir a los cautivos. No tenemos mucho que hacer.”

La razón por la que se reunieron en Makan fue para lidiar con las secuelas de Barahal. Entre sus múltiples tareas estaba la inspección y traslado de cautivos.

“De todos modos, eso es bueno. No sé cómo te hiciste amiga del Profesor con esa jodida personalidad, pero…”

“¡Okey! ¡Todos los oficiales, presten atención!”

Una voz interrumpió al Director del Departamento de Seguridad. Era el Caballero Real con tres estrellas en el pecho, Delric.

“A partir de ahora, los sacaremos sangre.”

“¿Sangre?”

“Así es. Una gota es suficiente. Es una magia recién inventada, pero simplificará el proceso de volver a emitir su ID en caso de que la pierda.”

La mayoría de los oficiales asintieron, pero Primienne no. Ella sabía el significado de esta prueba: clasificar a la Sangre Demonio. Ella estaba preparada por si acaso. Ella tenía una bolsa de donación de sangre…

“Pero, los Caballeros Reales recolectarán directamente las muestras. Pinchándoles con una aguja y metiéndola en un frasco.”

“…”

Primienne jugueteó con la bolsa de donación de sangre en su bolsillo.

“Está bien, vamos a comenzar.”

Los Caballeros Reales se acercaron a los oficiales uno por uno. En medio de eso, Primienne estaba pensando.

“Mmm.”

…Bueno, no era habitual que los directores de todos los departamentos fueran convocados para manejar asuntos posteriores. No era común, pero no había manera de lidiar con esto. ¿Registrarían a toda la organización después de lo sucedido en Barahal?

“Vice Directora Primienne, su dedo, por favor.”

En ese momento, un Caballero Real se le acercó con una aguja en la mano. Primienne asintió y extendió su dedo.

“Muy bien, voy a estar sacándole sangre ahora.”

La aguja se acercó lentamente, su corazón latía contra sus costillas. Una gota de sangre. Según el documento confidencial que Deculein le filtró, solo tomaría cinco minutos determinar a un Sangre Demonio. ¿Sería tiempo suficiente para escapar? No, los Guardias Reales reunidos no eran pusilánimes.

“Esto…”

…estaba en un callejón sin salida. Tan pronto como estuvo a punto de admitirlo…

“Vice Directora Primienne.”

Alguien la llamó. La aguja que estaba a punto de pinchar su piel se detuvo. Ante esa voz, el Caballero Real dejó a un lado la aguja e inmediatamente levantó la mano a modo de saludo.

“¡Lealtad!”

Vestido con atuendo ceremonial, Deculein parecía un soldado. Miró al Caballero Real antes de hablar.

“¿Estás ocupada?”

“¡No, no lo estoy!”

Mientras el Caballero gritaba, Primienne se movió. Recogiendo la aguja, perforó un agujero a través de la bolsa de sangre en su bolsillo y untó una gota en su dedo.

“…Toma esto.”

Después de eso, naturalmente entregó su dedo con la aguja.

“¡Oh, sí!”

El caballero recogió la sangre sin darse cuenta.

“Mi tarea está hecha. ¡Por favor, adelante y hable, Profesor!”

“Okey.”

El caballero se fue y Primienne miró a Deculein y lo miró a los ojos.

“¿Cuál es tu negocio conmigo?”

Deculein respondió brevemente.

“Prepara un caballo. Tengo que ir a algún lugar solo.”

Trivialmente diciéndole que prepare un caballo.

“¿A dónde? ¿A estas horas de la noche?”

“Un viñedo.”

“… Creo que puede tomar cualquier caballo del establo.”

“Mmm.”

Entonces, Deculein asintió y colocó su bastón en el suelo. Él fingió una pequeña sonrisa.

“Muy bien.”

“…”

En ese momento, Primienne sintió una sensación de falta de armonía. No, la falta de armonía que había estado sintiendo durante mucho tiempo se estaba transformando lentamente en un sentimiento claro. Sospecha y seguridad, en algún lugar entre los dos.

“Pero, hay un caballo negro en el establo. Es el que montó nuestro Director, y tiene la reputación de ser un corcel preciado.”

“¿Es así?”

“Sí. Él ordenaría a los oficiales de bajo rango del Departamento de Seguridad que duchen al caballo cada vez que esta aburrido.”

“Dile que lo tomaré prestado solo por un día.”

“Sólo tómalo. Me gustaría ver llorar a ese pulpo.”

“Entonces, me iré.”

Step, step—

Deculein, alejándose a grandes zancadas, de repente se volteó para mirarla de nuevo. Primienne se tragó el suspiro de alivio que había estado dejando escapar.

“Vice Directora.”

El perfil lateral de Deculein era nítido. Ojos, nariz, boca, mandíbula. Todo parecía capaz de cortar.

“…Sí.”

“Pase lo que pase, o lo que sea que esperes, siempre ten en cuenta que tus contramedidas fallarán.”

Le habló como si le estuviera dando un consejo. Su fría voz la asaltó.

“De todos modos, estoy diciendo que me preocupo bastante por ti.”

“…”

Ella no podía entender lo que él acababa de decir. Se fue así, pero Primienne siguió mirando su espalda cuando entró en los establos.

Y finalmente, dejó Makan después de tomar el caballo del Director.

“Adelante y muérete, loco pulpo director.”

Ella no sabía adónde se dirigía Deculein, pero él la llenaba de alegría.

“… Espera, viñedo.”

Tal palabra le vino a la mente tarde.

…El viñedo de Rohakan.

 

*****

 

Chaeng, chaeng, chaeng—

En los terrenos de la Universidad Imperial, donde el sol de la primavera brilla intensamente, justo antes del comienzo del nuevo semestre animado, Sophien y Ahan disfrazadas caminaban por el camino.

“Oho… así es como es la universidad… ¿hmm?”

Una cara familiar se destacaba en el banco del parque a lo lejos.

— …De todos modos no duermo, así que no creo que me canse incluso si no duermo.

— ¿Huh? ¿De qué estás hablando, Ifi?

La discípula y asistente de Deculein, Epherene. Por alguna razón, sus ojos de panda miraban fijamente el estanque del parque.

— Yo tampoco lo sé.

— Ifi, ¿estás ocupada revisando tu tesis? Te ves muy cansada. Solo ve a dormir.

— No, no puedo dormir porque Deculein no está aquí.

— ¿Qué? ¿No es demasiado bajo, no dejándote dormir? ¡Ifi! ¡Repórtalo!

— Reportarlo. ¿Deculein?

— …Ah, no puedes repórtalo porque es Deculein.

— Está bien. Cinco horas de las veinticuatro horas del día. Cinco. Cinco, ocho, treinta.

— …Ifi. No te ves bien en este momento.

“¿Se ha vuelto loca?”

Sophien echó un vistazo a los muchos edificios que salpicaban por la universidad.

“De todos modos, también iré a este lugar.”

“Sí, Su Maj… así es, Lady Sophien. My Lady será una estudiante de Administración de Asuntos.”

“Asuntos. Asuntos. El Emperador administra el Imperio.”

Sophien, pisando fuerte, pronto se sentó en el balcón de un café cercano. Ahan se sentó frente a ella con una cara incómoda. Esta cantidad de contacto visual no era aceptable como dama de la corte…

Ring—

Justo a tiempo, llegó una llamada de la red imperial en el woodblock mágico. El rostro de Ahan se endureció al recibir el informe.

“…My lady. Tengo algunas malas noticias.”

El woodblock mágico era la red de contacto del Palacio Imperial, similar a la que usaban los magos en la torre. Ahan, ahora la ayudante cercana del Emperador, recibió casi toda la información del Palacio Imperial.

“¿Malas noticias? ¿Cuáles son esas?”

“Ah, esas son…”

Ahan tragó saliva y tartamudeó.

“Anoche, Deculein fue al viñedo.”

“…Viñedo. ¿Te refieres al viñedo de Rohakan?”

“Sí, esta es información de los eunucos, por lo que debe ser cierto.”

Ahan no sabía por qué este Profesor de repente volvió al viñedo. Rohakan era el peor criminal del imperio, por lo que acercarse al viñedo sería una desventaja política.

“No sé por qué el Profesor hizo eso, pero… My  Lady, ¿Está bien? Que el Profesor Deculein visite ese lugar…”

En el viñedo donde mataron a Rohakan, Deculein lo visitó nuevamente. Solo eso podría hacer que lo arrestaran. No, era más que eso. Incluso si Sophien lo interrogara, nada era insuficiente. Rohakan era un criminal.

“…El Profesor es más político que cualquiera en el Palacio Imperial. Si vuelve a estar en el viñedo, los lieges podrían aprovechar esta oportunidad.”

Sophien miró alrededor de los terrenos del campus con la barbilla apoyada en la mano. Estudiantes universitarios, magos, caballeros, médicos… los jóvenes que se convertirían en el futuro del imperio iban y venían.

“Si, es cierto. Pero, ¿por qué el profesor volvió allí…?”

Sophien sonrió.

“No estoy segura.”

Cada vez que sucedía algo así, de repente lo sentía.

“¿No es porque es humano?”

“¿Qué?”

Ese tipo frío también era humano al final.

“¿No puedes verlo? Deculein está de duelo. Por matar a Rohakan con sus propias manos.”

Ese tipo que parecía no tener sangre ni lágrimas… también era humano después de todo.

“Que… no hay forma.”

Ahan negó con la cabeza con una expresión estupefacta.

“No hay forma de que sea así. El Profesor Deculein es…”

“No, estoy segura. Fue a presentar sus respetos a Rohakan. O para rendir homenaje. Si no, él fue a recordar los viejos tiempos.”

“Huh…”

Ahan se quedó sin palabras.

— Deculein está triste por la muerte de Rohakan. Deculein, que está triste por eso, es un traidor a la perspectiva de Sophien.

El pensamiento de Ahan se armó así, pero Sophien continuó suavemente.

“No hay nada de qué preocuparse. ¿No es normal que esté triste?”

“…¿Qué?”

“Él era discípulo de Rohakan, y Rohakan parecía preocuparse por él. No, él lo estaba apreciando. Cuando me visito al menos.”

Se preparó para morir por el bien de Deculein, por el bien de su discípulo y le advirtió solo con la verdad. Al final, su advertencia fue solo eso antes de que Deculein lo matara.

“Aunque sabía que forcé la pelea entre ellos. Porque no puedo creer al ‘Deculein que Rohakan adora’, pero puedo creer al ‘Deculein que mató a Rohakan’.”

“Oh…”

“Y, el Profesor mató a Rohakan y me eligió a mí.”

Una pelea entre un maestro y un discípulo. Sophien lo indujo y Deculein lo llevó a cabo sin vacilar.

“El Profesor se veía bien incluso después de matar a su maestro… pero supongo que él no se veía bien.”

Sophien miró hacia el cielo, murmurando en voz baja. No había una sola nube allí.

“Esta vez, le hice algo malo al Profesor. Así que, le permitiré rememorar…”

“¡Disculpe!”

Una voz fuerte perturbó su atmósfera solemne. Sophien y Ahan levantaron la vista sorprendidas.

“Es una bebida por persona aquí.”

“…”

La persona que gritó sobre las bebidas fue la dueña del café y la hermana menor de Deculein, quien vino a visitar a su alma mater, Yeriel.

“¿Pero no hay bebida en esa mesa? Parece que los estudiantes universitarios en estos días solo ocupan los asientos.”

Mirándola con los brazos cruzados, Sophien sintió algo parecido a la felicidad después de mucho tiempo.