Capítulo 178 – El Villano que Quiere Vivir

Skydark: Capítulo Patrocinado por Juan Manuel 2/8… Enjoy!

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“Este es un regalo del Profesor Deculein para usted.”

Primienne le entregó a Ganesha el espejo de mano.

“…?”

Ganesha tenía varias preguntas y ella las aceptó con los ojos muy abiertos. ¿El presente de Deculein? ¿De la nada de esta manera? Lia fue la que preguntó.

“… ¿Un regalo? ¿De Deculein, de ese profesor?”

Primienne asintió.

“Sí. ¿Hay algún problema?”

“No, no es eso…”

Lia no lo pensó mucho; ella solo movió los dedos y luego comenzó a pensar de nuevo en qué físico elegiría. Un pensamiento pasó por la mente de Ganesha mientras miraba entre Lia y Primienne.

“…¿De ninguna manera?”

¡Snap! Ella chasqueó los dedos. Una corriente eléctrica recorrió su cuerpo mientras la piel de gallina le picaba la carne.

“Creo que lo sé.”

“¿Qué?”

“…”

Ganesha miró a Lia por un momento.

“…¿Qué?”

La niña, que se parecía al anterior amor de Deculein, inclinó la cabeza inocentemente. Debe sentirse complejo cada vez que ve a esta niña. Por supuesto, no tenía malas intenciones. El Profesor no era tan idiotamente malvado. Sin embargo, los pensamientos y sentimientos de ese tiempo murmuraban vagamente en su corazón. Quizás algún día, recordaría dolorosamente a la persona que estaba con él y que llenó su corazón.

“Lia. ¿El profesor dijo algo?

Lia negó con la cabeza como si no conociera a Ganesha, pero rápidamente recordó algo que había sucedido antes.

“…Oh.”

“¿Qué?”

Justo antes de desmayarse, Deculein había dicho algo. Su voz brilló como la niebla de la mañana.

“Um … él dijo algo como esto.”

Lia tosió y luego imitó la voz de Deculein.

“… ¿Su personalidad también es la misma?”

“…”

En ese momento, la atención de todos se volvió hacia ella. Por supuesto, no solo Ihelm, sino también Julie, Louina, Gwen, Syrio, Raphael, que aparecieron de repente … había muchos de los colegas de Deculein ahora mirándola.

“Pffft.”

Ganesha se echó a reír.

“Eso es entonces. ¿Lia~?

“¿Sí?”

“Este es nuestro de Lia~.”

Le entregó a Lia el espejo.

“¿Huh? ¿Por qué?”

“Usaste tu cuerpo para proteger al Profesor. Así que es correcto que lleves esto …”

“…Oh.”

“Ven y tómalo.”

Ganesha tenía una expresión un poco decepcionada, pero Lia la tomó. Primero comprobó en secreto el valor del objeto utilizando la característica del trabajo del aventurero — la intuición del aventurero.

Espejo hecho a mano de Deculein

—Valor: tesoro

¡¿Tesoro?! ¡¿Un tesoro?! Era un espejo de mano hecho a mano, ¡¿pero un tesoro?! Cuando los ojos de Lia se abrieron

“Caballero Julie. ¿Por qué no vienes y te sientas ahora~?”

Ganesha le hizo un gesto a Julie.

“…”

Julie se acercó. Ganesha le dio un golpe en el hombro con el codo en broma.

“¿Estamos hablando demasiado sobre el Profesor~?”

“No. Está bien.”

Julie negó con la cabeza con calma. Ganesha arqueó las cejas con picardía.

“¿Supongo que ya superaste tu enojo?”

Lia miró a Julie. La relación entre Deculein y Julie fue un elemento bastante importante de sus quest independientes.

“No es eso.”

Habló con los dientes apretados y miró fijamente la hoguera. Las llamas se congelaron.

“Yo no … no es nada.”

La caballero se quedó en silencio, refrescando el ambiente. Un denso silencio los envolvió mientras Ihelm parecía incómodo y rápidamente se fue, luego Gwen y Syrio fueron a pelear entre ellos. En ese momento, una voz suave y cálida fluyó para disipar el escalofrío.

“Creo que eres una persona muy amable.”

Julie miró a Lia. La niña la miró con ojos no tan infantiles.

“…Gracias.”

Entonces Lia se rió tímidamente.

“¡Y eres tan genial! ¡Esa armadura! ¡Quiero usar una armadura de Tigre así algún día!”

Ella volvió a ser una niña. Julie se sorprendió por un momento, pero pronto se sacudió.

“Sí. Yo también era así cuando era joven. ¿Señorita Lia?

“¿Eh? Oh, si~”

“No tienes que estar ansiosa.”

“¿Eh? No lo estoy~”

“Ser un aventurero a esa edad es un gran logro. Así que en el futuro…”

Julie la sermoneó y le ofreció consejos durante los siguientes 13 minutos.

 

*****

 

Intenté mover los brazos.

Quest Completada: Caza del Gran Tigre

• Derrotaste al Tigre Demonio del Altar [Besillita] • Adquiriste un catálogo de constitución rara

 

Arriba, abajo, izquierda, derecha, este, oeste, norte, sur. Las suturas estaban bien, pero no tan naturales como antes. Probablemente tomaría alrededor de un mes de recuperación y entrenamiento.

“…Constitución.”

A continuación, miré el catálogo de constitución. Ya habia decidido cuál elegir.

 

Un Cuerpo Adecuado para la Meditación.

• Grado : Raro • Descripción: Cuanto menos te sorprendas, más mantendrás la compostura. — Dependiendo del período y el grado de calma, la calidad del cuerpo, las características y el maná se vuelven más claros.

 

En otras palabras, era un acumulamiento que se beneficiaba de una mente tranquila. Sin embargo, si fueras sorprendido incluso una vez, todo el acumulamiento se desvanecería, por lo que la penalización era enorme y su versatilidad era limitada. Si esto fuera para un NPC normal, probablemente sería inútil.

¿Quieres adquirir un cuerpo apto para la meditación?

Por supuesto, no era normal. Mi mente estaba cerca de ser un espejo cristalino ya que no experimentaba grandes fluctuaciones emocionales y era invencible en el caso de interferencia mental. Lo adquirí sin dudarlo.

Adquisición Física: Un Cuerpo Adecuado para la Meditación.

• Acumulación de Calma- [0]

Toc, toc—

— Tengo el informe de la misión…

Abrí la puerta. La visitante de hoy fue, después de todo, Julie. Ella pisoteó y presentó oficialmente su papeleo.

“La tercera misión se desarrolló sin problemas. Hubo 0 bajas y tres heridos. El número total de monstruos asesinados fue de 1.305.”

Después de la muerte del Gran Tigre, las operaciones de raleo se reanudaron sin problemas. Asentí.

“Recibí el informe. Hazles saber a los caballeros que has desmantelado al Gran Tigre muerto. La mitad del cuero se le dará a Su Majestad y la otra mitad será mía. El equipo de aventurero participante y los caballeros recibirán piezas útiles como dientes y uñas.”

“Sí.”

Julie estuvo de acuerdo sin ninguna queja y se fue de inmediato.

“Mmm.”

Sin embargo, aunque fue muy corto, estaba bastante satisfecho. Solo eran 30 segundos al día, pero aún podía ver esa cara. Por supuesto, no fue en la medida en que afectaría la constitución.

“…Cuero.”

El cuero del Gran Tigre era la verdadera recompensa de la quest. Podría hacer una túnica con la Mano de Midas. Sin embargo, el patrón de la piel se destacó demasiado, por lo que habría que teñirlo de negro.

“…”

Mientras pensaba en cosas agradables, de repente sentí curiosidad. Se colocó una pieza de túnica sobre el escritorio. Allen, no, el último artículo de Ellie que Ihelm conservó y entregó. Ver esto me hizo querer saber dónde estaba ahora y qué estaba haciendo.

 

*****

 

… Ellie estaba en el desierto.

“Hace calor.”

Ahora, desde el norte, llegó a las profundidades del desierto. Allí, frente al lecho de roca cerca del oasis, había una pequeña ciudad. Era un refugio donde vivía la gente de Sangre Demonio, entrando y saliendo de estrechos pasajes serpenteantes a través de la tierra.

“Estoy aquí.”

Ellie bajó a la parte más profunda de la cueva a una sala de conferencias con mesas de operaciones y objetos mágicos esparcidos por todas partes.

“…”

Allí, una mujer con el pelo corto que se parecía a Ellie, pero con una impresión más nítida la estaba mirando. El próximo capitán de los Sangre Demonio — Elesol. Elesol apretó los dientes y movió las manos.

— Llegas tarde.

Ella registro las palabras. Ellie asintió.

“Sí. Lo siento.”

— ¿Por qué. No. Mataste a Deculein?

Swish— Swish—

Sus manos se volvieron borrosas.

“No había necesidad de hacerlo.”

— Un barrido a gran escala hacia el Pueblo Sangre Demonio. Sera hecho. No podemos simplemente mirar. Deculein es. El enemigo de la Sangre Demonio.

“Matar al profesor no detendrá eso.”

— El Imperio tiene la intención de erradicar la Sangre Demonio. La guerra es inevitable para sobrevivir. Mutuo. Confirmación. Destrucción. Es el último camino que nos queda.

Elesol le presentó los documentos a Ellie y movió los dedos con afán.

— Un plan para secuestrarlo. Ya se está implementando.

Ellie miró el contenido y respondió con firmeza.

“No podemos atraparlo.”

— Tú. ¿Estás pensando en revelártenos?

“No.”

Elesol registro con expresión hosca. Sus gestos crecieron en intensidad.

— Tú. Tú. Tú. Tú no me obedeces ahora. No eras así antes. Tonta. ¿Te han lavado el cerebro? Tú. Tú.

“No es que no obedezca. Solo decía que no podemos.”

— ¿Cómo puedes estar tan segura?

“El Profesor es inteligente. Mucho más que tú.”

“…”

Por un momento, el rostro de Elesol se endureció. Ella apretó los dientes y salió corriendo de la sala de conferencias.

Slam—!

La puerta se cerró y Ellie, rascándose la nuca, se preguntó por qué estaba molesta Elesol. Ellie carecía de emociones, por lo que a veces era difícil comprender este tipo de situaciones.

“No lo sé.”

Era cierto que Deculein era más inteligente que Elesol. Era un hecho que había enviado atravez de sus informes hasta ahora, pero si estaba enojada con esas palabras …

“… El Profesor no se enoja por esto.”

Ellie hizo un puchero y miró la puerta cerrada, luego miró alrededor de la sala de conferencias. Era un paisaje completamente diferente al de la torre. Un sótano donde no entraba luz, escondido en un desierto árido. En la torre, podría verse con el profesor abriendo solo una puerta.

“…”

Dejando escapar un ligero suspiro, Ellie pensó de repente:

“¿Podemos volver a vernos … algún día?”

 

*****

 

… Epherene estaba en el Norte, en Reccordak. Se sentía gastada y en mal estado, pero estudiaba mientras miraba los papeles de examen/prueba de alta calidad de Deculein.

“Sigh….”

Habían pasado dos semanas desde que Allen los dejó, y Epherene aún no podía adaptarse a esa realidad. Aun parecía que si miraba a su alrededor, el profesor asistente Allen aparecía y preguntaba: ‘¿Estás bien, Epherene?’

“Ah.”

De repente, las lágrimas corrieron por sus mejillas. Epherene se las secó con el dobladillo de su túnica. Lloró mucho, pero aún quedaban lágrimas.

“… ¿Por qué no se me secan los ojos?”

“Whoa, me asustaste.”

Drent, que estaba estudiando para el examen a su lado, tembló.

“Ahora, deja de lado eso, Leaf. Al profesor asistente tampoco le gustaría que hicieras eso. ¿Sabías que año nuevo ha terminado?”

“…Por supuesto.”

Hasta el momento, un total de 13 proyecciones y dos avances. Epherene participó en todo esto y se fortaleció día a día. Ahora, los oponentes de Epherene eran caballeros. Anoche, tuvo un encuentro con Holan, el último de su edad, y ganó.

“No soy una tonta. ¿Crees que no sé la hora … haaaam?”

Al ver a Epherene bostezando, Drent sonrió.

“Te vas a romper la boca. Duerme un poco. Debes estar cansada por la pelea de ayer, así que descansa. Te despertaré.”

“¿Eh? Um, entonces … ¡está bien! Dormiré 5 minutos. No, 15 minutos.”

“Okey.”

“Despiértame. Ah, y no me robes lo que estudié.”

“… No lo haré.”

Haaaam—

Epherene volvió a bostezar y se derrumbó sobre el escritorio. Quizás estaba demasiado cansada, ya que se quedó dormida sin ni siquiera soñar …

… Epherene.

En un sueño profundo y sin sueños …

… ¿Epherene? Despierta.

Epherene abrió los ojos a la voz que la llamaba. Murmuró mientras trataba de recobrar el sentido.

“¿Qué … ya pasaron los 15 minutos …?”

Epherene se tragó las palabras.

“Toma…”

Había una casa familiar y destartalada a su alrededor, una vivienda que estaba en peligro de derrumbarse pronto. Por supuesto, ella sabía dónde quedaba esto. Este era su antiguo hogar.

“Epherene.”

Y alguien la llamó. Epherene se volteó sorprendida.

Por un momento, su cerebro se detuvo. Se sentía como si el mundo entero se estuviera encogiendo en este espacio en este momento.

“Epherene. Finalmente estás despierta.”

Era un rostro que extrañaba tanto y una voz que ya había sido olvidada. Él era la persona que más amaba. La persona que estaba frente a ella era Kagan Luna: su padre.

“¿Pa … Papá?”

“Sí.”

No se necesitaron otras palabras. Epherene se acercó a él. Hacia él, hacia su padre, a quien extrañaba mucho.

Como poseída.

“Epherene. Vamos, abrázame.”

Mientras él sonreía amablemente, un viento frío atravesó el cabello de Epherene.

Whooosh—

El acero de madera vibró dentro de su túnica.

“…”

Epherene se detuvo.

“Espera.”

Una duda fría, un análisis de la situación y el razonamiento propio de una maga de su rango. Sacó el acero de madera. Miró a Kagan y vibró.

“¿Qué estás haciendo? Epherene. ¿Por qué no vienes hacia aquí?”

La sonrisa en sus labios era mucho más oscura que antes.

“Quería verte.”

El acero de madera temblorosa se detuvo de repente. Epherene miró a Kagan.

“… ¿Eres mi papá?”

“Por supuesto.”

“Hace diez años en un 13 de Agosto. Di el contenido de la carta que te envié.”

“…Ja ja.”

Entonces Kagan, o alguien que llevaba esa máscara, sonrió como si ella fuera linda. En ese momento abrió la boca y estaba a punto de decir algo—

Stomp—

Skydark: Stomp.. una onomatopeya que significa de la acción de pisar fuerte el suelo o estampar el pie en el suelo…

Ella sintió un movimiento detrás de ella. Epherene se volteó.

“¡Whoa!”

Sorprendida, cayó sobre su tras**ero.

“Q-Que, ¡¿Profesor?!”

Frente a ella estaba Deculein. La levantó con Psicoquinesis.

“¿De dónde es que viene de repente, Profesor?”

Deculein no respondió. Estaba más inexpresivo que de costumbre.

“No, más importante aún, Profesor. ¿Dónde demonios estamos?”

“Yo no soy el maestro Deculein.”

“¿Qué? No, ¿Qué estás …?

“Yo soy tu mecanismo de defensa.”

“…?”

Blink, blink—

Blink, blink—

Skydark: Blink … otra onomatopeya de la acción de parpadear los ojos

“¿Qué quieres decir?”

“Como acabo de decir. Yo no soy el maestro. Soy una inteligencia artificial diseñada con tu maná basada en una comprensión mutua con el maestro.”

“…”

Sus palabras fueron ambiguas. Pero, de todos modos, esto significaba que este Deculein no era Deculein.

“Entonces tal vez…”

Epherene le mostró el acero de madera.

“¿Eres esto de aquí?”

“Sí.”

Deculein, no, el acero de madera asintió. La mandíbula de Epherene cayó.

“No tienes que preocuparte.”

El acero de madera dio un paso adelante y puso a Epherene detrás de él.

“Siempre y cuando el maestro y yo estemos aquí, no podrán matarte en tus sueños …”

Los fragmentos del metal salieron disparados del acero de madera, es decir, el bolsillo interior de Deculein. La expresión del hombre que imitaba a su padre se distorsionó cuando Deculein lo miró.

“Ahora, despierta.”

“!”

Con esas palabras, Epherene se despertó.

“¡Aaah!”

Respiró hondo y se puso de pie, comprobando rápidamente su entorno. Una vez más, estaba en el laboratorio de Reccordak.

“¿Mmm? Te despertaste antes.”

Drent miró su reloj.

“No han pasado ni 15 minutos aún.”

“…”

Epherene buscó su acero de madera sin responder.

“Oh.”

El acero estaba acostado sobre la mesa. Epherene rápidamente estiró el brazo y lo agarró, dejando escapar un suspiro de alivio.

“…Gracias.”

Entonces sucedió algo un poco extraño. El mana fluyó desde el interior del brazalete que llevaba, filtrándose en el acero de madera.

“¿Qué es esto ahora?”

Epherene frunció el ceño. Pero se levantó sin pensarlo más. Debe ser un fenómeno de maná.

“¿Adónde vas?”

“Oh, acabo de tener un sueño. Ese sueño fue tan molesto. Tomaré un poco de aire y volveré.”

“Está nevando mucho hoy, así que no te vayas demasiado lejos. Hay muchas bestias.”

“…Sí.”

Abrió la puerta y salió. Sin embargo, tan pronto como salió, se encontró con alguien.

“Así que, primeramente, será usted el presidente, Deculein. Yo…”

Deculein estaba en el pasillo del primer piso. Junto a él estaba Ihelm.

“¿Mmm?”

Los dos miraron hacia ella.

“¿Oh, Leaf?”

“…”

Ihelm sonrió y Deculein permaneció en silencio.

“Oh… sí. ¡Hola! Hola…”

“Veo que no estás llorando ahora. Escuché que has estado llorando todos los días desde entonces.”

“… No lloré todos los días.”

Epherene, avergonzada, miró a Deculein una y otra vez mientras recordaba su sueño. Así que, para decir, en sus sueños, el Profesor Deculein (o el acero de madera que se parecía a él) siempre estuvo en espera …?

Ihelm movió la mano en negación.

“Olvídalo. Pronto habrá una ola de monstruos. Prepárate. Además, los Aventureros Red Garnet te estaban buscando.”

“¿Sí? Okey…”

Epherene respondió con brusquedad, tratando de pasar junto a ellos, pero Deculein la agarró.

“Epherene”.

“…Gulp. ¿Sí?”

“¿Tuviste un sueño?”

Epherene se sorprendió, se llevó las manos al pecho y gimió. ¡¿Cómo lo supo?!

“C-Cómo—”

Ihelm respondió esa pregunta en su lugar.

“Que quieres decir con ‘cómo’? Tienes cabello y saliva en la mejilla.”

“…¿Qué?”

Epherene se tocó la esquina de la mejilla.

“Oh, lo siento.”

Mientras bajaba la cabeza, miró a Deculein. Incluso entonces, sus ojos azules estaban fijos en ella. ¿Capturó algún tipo de energía que era más molesta que su impureza …?

Preguntó Epherene tartamudeando.

“Que, ¿Por qué me miras así …?”