Capítulo 160 – El Villano que Quiere Vivir

Usé repetidamente la [Mano de Midas], confiando en la recuperación de maná ofrecida por el agua cristalina para aplicar diferentes efectos primero al acero de madera, luego también a la chaqueta, el abrigo y los zapatos de mi traje.

—— [Zapatos del Traje Geork] ——

◆ Efecto especial: El pie sostiene todo el cuerpo. Así que, usar estos zapatos hace que todo el cuerpo esté cómodo. —La eficacia de la caminata aumenta porque el cuerpo está bien equilibrado. — Resiste fácilmente cualquier tipo de magia restrictiva.

 

Mano de Midas: Nivel 5

 

Además, la chaqueta y el abrigo recibieron funciones anti-mágias y protectoras. Se agregó multiplicación al acero de madera defensivo, que lo multiplicaría por un corto tiempo cuando se activara. Para el acero de madera especializado en soporte, la Cinta surgió después de combinarlos con Cinta Adhesiva para una función de autocuración.

— Sigo asombrada por el Profesor.

Entonces habló Epherene. Respondí mientras examinaba los resultados.

“¿Qué quieres decir?”

— No está preguntando qué pasó en el futuro, ni tiene miedo de por qué no está allí.

“¿En serio?”

— ¿Debería decirte?

Levanté los ojos para mirar frente a mí. La silla quedó vacía.

— Si te digo…

“Olvídalo.”

Negué con la cabeza. Por supuesto, no sabía cómo progresaría este mundo o cómo continuaría. Se desconoce cómo la intervención de Kim Woojin cambiaría el escenario. Pero, parecía que no había necesidad de torcerlo con fuerza. No importa cuánto lo pensara, el futuro de esta niña no parecía tan malo, por lo que no sería malo seguir igual. En primer lugar, el peor resultado de la quest principal fue el colapso del continente.

— … No puedo decirte ~. El futuro Profesor me pidió que no lo hiciera. Absolutamente no puedo decírtelo ~.

Epherene forzó un brillo en su voz. En ese momento, se recuperaron otros cinco mil de maná, y apliqué [Mano de Midas] al último acero de madera.

¡Screeeeech—!

El maná chispeó, marcando el final. Esperaba que durara aproximadamente una semana, pero lo terminé en solo dos días.

— ¿Ha terminado, Profesor?

“Sí.”

Manejé cada acero de madera. No, no había necesidad de controlarlos directamente. Los diecinueve aceros de madera se movían con tanta naturalidad como si estuvieran vivos.

“En este punto.”

Miré hacia la oscuridad. Los monstruos se habían más que duplicado desde hace dos días.

“Ese tipo de basura es fácil de manejar.”

— Sí. Buena suerte, Profesor.

“… ¿Eso es todo lo que tienes que decir?”

Me levanté de inmediato; No tuve que esperar a que mi maná se recuperara. El maná consumido por el acero de madera a través de Psicoquinesis era cero de todos modos.

— ¿Quiere que me confiese? Incluso si es un amor unilateral … pero, aun así, nuestro vínculo no es hasta ese punto en este momento.

Las palabras que soltó fueron ridículas. Fruncí el ceño y miré hacia la silla.

“…Mientras lo sepas.”

— Sí.

No había necesidad de continuar esa conversación más. Me moví hacia la oscuridad donde la luz del cristal no podía llegar. Entonces, los monstruos que acechaban convulsionaron y me embistieron.

— !

Sus gritos sacudieron el suelo, mezclándose con su estampida haciendo que pareciera como si el mundo estuviera temblando.

“Estas basuras.”

Fruncí el ceño mientras calentaba el acero de madera.

Ir …

Los diecinueve estaban llenos de maná, moviéndose como un solo sistema.

¡Schwaaaaa—!

Ellos cortaron el aire. Más allá de ellos, miles de monstruos inundaron, pero cada pieza desempeñó su papel en la batalla. Algunos desmantelaron los cuerpos de los monstruos entrantes, algunos se balancearon y sacudieron el suelo para hacerlos tropezar, y algunos se levantaron como una trampa para protegerme. División del trabajo y especialización; No necesité levantar una mano debido a esta eficiente estructura de combate. Solo un paso, luego otro. Me moví entre los monstruos.

¡Gaaaaaaaahh—!

El sonido de la carne partiéndose y los chillidos de los animales llenaron mis oídos. La sangre brotó, salpicando el pasillo con suciedad. Todas esas cosas repugnantes fueron completamente bloqueadas por Psicoquinesis mientras limpiaba la basura …

 

*****

 

… Mientras tanto, Epherene llegó a al pueblo del norte donde conoció al futuro Deculein con Sophien.

“¡Creo que puedo encontrarlo aquí!”

Epherene habló con entusiasmo mientras Sophien olfateaba el aire. El futuro y el presente tenían un aire diferente; Sophien podía sentirlo.

“Hmm … veamos …”

Epherene miró alrededor del mercado, encontrando rápidamente su objetivo.

“¡Ese es el!”

Los ojos de Sophien siguieron hasta donde señaló.

“¡Oye, tú!”

Rápidamente corrió y agarró la muñeca de un hombre.

“¡Herbolario!”

Era el herbolario que conoció la última vez. Pareció sorprendido por su repentina carga, pero asintió cuando vio el rostro de Epherene.

“…Oh, sí. ¿Eres la maga Epherene?”

“Me alegro de verte. Nos encontremos de nuevo.”

“Sí.”

Entonces, Sophien se acercó con las manos a la espalda. El herbolario la miró con su túnica antes de voltearse hacia Epherene.

“Así que, estás aquí de nuevo.”

“Sip. Tengo algo que preguntarte.”

“Sí, adelante.”

Este herbolario cooperó como se esperaba. Tenía una cara insociable, pero era amable.

“¿El Profesor Deculein? ¿Sabes dónde está el Profesor?”

“…¿Qué?”

Entonces, el herbolario pareció sorprendido. Sus ojos, que eran tan pequeños como un hilo, se agrandaron y se fijaron en Epherene.

“¿Por qué? ¿Qué ocurre?”

“Eso … ¿no lo sabes?”

“¿Qué? ¿Qué es lo que no sé?”

Epherene preguntó de nuevo con una expresión inconsciente. Después de pensarlo más de lo necesario, se rascó las mejillas y abrió la boca.

“Verás … el profesor …”

Miró a Epherene y Sophien a su lado, a su vez como si estuviera leyendo la atmósfera. Parecía cada vez más reacio a decir algo. Pero, finalmente, habló con un profundo suspiro.

“Él se fue. Por lo que sé.”

“… ¿Huh?”

Epherene inclinó inocentemente la cabeza y Sophien lo miró con seriedad. Hubo un momento de silencio entre ellos. El ruido del mercado sonó un poco más bajo.

*gulp*

Epherene tragó.

“Se ha ido … ¿te refieres que volvió a su ciudad natal? Oh ~, ¿a su ciudad natal?”

“No. Eso no … hmm … después de viajar al Reino Reok … él regresó aquí, pero …”

Se rascó la nuca. Luego chasqueó los dedos como si de repente recordara algo.

“Oh, es cierto. Cuando le pregunté qué estaba haciendo, dijo que estaba esperando a alguien aquí.”

“¿Esperando?”

“Si, probablemente…”

El herbolario miró a Epherene. No terminó el pensamiento, pero fue suficiente para comprender la situación.

“…”

La boca de Epherene se abrió inexpresiva y tontamente.

“¿Mientes?”

“…Lo lamento. Pensé que lo sabías.”

“Ah … oye.”

Epherene recordó al Deculein que conoció la última vez, su corazón ya no latía. Pero dijo que viviría cien años más, y le dijo a Epherene que no se preocupara …

“De ninguna manera. ¿Tú me dijiste que vivirías cien años más? No eres del tipo que miente.”

“¿Cien años? No sé a qué te refieres … el Conde Yukline vino en persona.”

“…”

Debido a su momentáneo mareo, Epherene tropezó mientras Sophien permanecía quieta a su lado, olfateando el aire. Y un poco más tarde, se dio cuenta de la diferencia entre el presente y el futuro.

“…¿Es así?”

Sophien poseía sentidos casi milagrosos. Por lo tanto, la presencia o ausencia de algunos humanos solo se puede distinguir por el olor en el aire. Cuanto mayor era la presencia humana, más clara era. Entonces, no había sensación de Deculein en este mundo. Probablemente, desde el momento en que llegaron.

“Luna.”

Sophien llamó a Epherene. Ella se volteó con un puchero para mirar a Sophien.

“Gracias a ti, descubrí algo importante.”

En ese momento, Epherene no pudo evitar sorprenderse. La expresión que tenía la emperatriz Sophien en este momento era terriblemente rígida.

 

*****

 

“Hmmmm …”

En un futuro lejano, Epherene estaba jugando con el cubo hecho por Deculein. Lo estaba haciendo girar con una mano para que coincidiera con los colores. Solía ​​ser un juguete que no se ajustaba a su personalidad, pero ahora sonreía un poco. Rápidamente completó el cubo y examinó sus superficies cuidadosamente.

“…Está hecho.”

Satisfecha, apoyó la barbilla en las manos y miró alrededor del santuario vacío del Tiempo. Hace algún tiempo, conoció a Idnik aquí, Murkan, Demakan, se reunió con Sylvia y se le confesó a Deculein …

Tantos recuerdos pasaron por ella. Pero ahora, este lugar no era diferente a una ruina. La vida del cristal estaba casi agotada y quedaba menos tiempo en el espacio.

Solo ella, Epherene Luna, permaneció. Sola.

“…”

Epherene recordó recuerdos de Locralen y sus días con Deculein. Aquellos tiempos se sintieron tan vagos; ella estaba tan feliz y tan fría de corazón. Era difícil recordar esos tiempos, incluso como Archimago …

En el momento en que dejó Locralen, olvidó más de la mitad de lo que había sucedido.

‘Estaba tan desanimada que lloré durante días. Estaba triste hasta el punto de la muerte. Me dolió como si me estuvieran arrancando el corazón.’

“… Profesor.”

Epherene acercó el rostro al cristal y lo llamó. Pero ya no podía oír su voz ni ver su rostro. Locralen fue la última vez que Epherene vio a Deculein en persona.

… Lo que pasó allí permanecería en secreto para siempre.

— Estoy aquí.

De repente llegó una respuesta. Epherene se sorprendió, pero pronto sonrió feliz.

“¿Ya termino?”

— Los maté a todos.

“… Como se esperaba del Profesor.”

Ella puso su mano sobre el cristal mientras decía eso.

Rustle— Rustle—

Una hoja azul le cayó encima de la cabeza. No quedaba mucho tiempo para seguir conectado con el pasado.

“Profesor.”

— Está bien. Dilo.

Al escuchar el tono más hermoso del mundo, se prometió a sí misma no olvidarlo hasta que muriera, entonces Epherene sonrió.

“Cuídese de ahora en adelante. Estoy tan feliz de volverle a ver.”

— …

“Además, escuche con atención.”

Epherene todavía tenía algo que decirle. Fue muy, muy importante. Si alguna vez el futuro cambiara… no, si hubiera una posibilidad, cambiaría, aunque fuera un poquito. Probablemente sea por esto.

“Esta será la última cosa.”

Epherene abrió lentamente la boca.

“Por favor, escuche con atención. לפנ שאור השאל עוזב,.מ”

 

*****

 

….לפנ שאור השאל עוזב,.מ

La futura Epherene dejó esas extrañas palabras. Incluso yo no podía interpretarlo en el idioma de las runas, y no había un idioma extranjero que no conociera, por lo que era apropiado pensar en eso como una interferencia del mundo.

“Voy a recordar esto.”

Guardé esa voz y su pronunciación en mi mente y me recosté en mi silla.

“Epherene.”

La llamé por su nombre. Pero, no importa cuánto tiempo esperé, ella no respondió. La conexión entre el tiempo y espacio se había cortado. Pasó 10 años de su vida para solo dos días.

“Mmm.”

Miré la superficie del árbol que brillaba como un cristal. De repente, repetí lo que había dicho Epherene.

“¿No existo en su futuro?”

¿Qué me pasaría en el futuro de esa niña? Sería una mentira decir que no tenía ni un poco de curiosidad.

“¿Morí? O…”

Dejé de hablar por un tiempo y pensé con cuidado. Pero, no importa cuántas veces lo pensé, solo se me ocurrió una conclusión.

“… debo estar muerto.”

Muerte. Mi esperanza de vida fue mucho más corta de lo que esperaba. Teniendo en cuenta el volumen de la quest principal, no importaba si pensaba positivamente; No duraría más de 3 años. En esos 3 años, moriría, ¿y esta niña todavía corría detrás de mí?

“Qué tipo tan desafortunado.”

No sabía si ella era la desafortunada o si lo era yo. El momento en que concluí así—

— .

En algún lugar, no muy lejos, había una pequeña presencia como un pájaro.

Rustle—

Cayeron fragmentos de piedra, luego el sonido de la respiración de alguien que se detenía por la sorpresa. Los diecinueve aceros de madera reaccionaron a mi mirada cuando me voltee hacia el sonido.

Whiiiiiing——

Resonaron y se acercaron al ruido, pero después de confirmar quién era este invitado no invitado, levanté la mano para detenerlos. Era alguien de quien no tenía que desconfiar.

“… Esto es inesperado.”

Hablé con ella. No parecía haber planeado ser descubierta, pero cuando lo fue, me miró con confianza. Pero, sus dedos estaban temblando. Quizás escuchó mi conversación con Epherene.

“Me alegro de verte.”

La saludé con una leve sonrisa.

“Sylvia.”

Más allá de la niebla cubierta de oscuridad, ella me estaba mirando.