Capítulo 123 – El Villano que Quiere Vivir

Skydark: Capítulo Patrocinado por Juan Rafael 7/9

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“Kagan Luna, tu padre.”

Las palabras de la presidenta silenciaron la sala, haciendo que todos los sonidos se apagaran mientras todos se volteaban para mirar a Deculein.

“…Oh.”

Sophien no era diferente; esta situación también fue inesperada para ella. ¿A qué te refieres con co-autor? ¿No era eso opuesto a la personalidad de Deculein?

“Hemos estado juntos durante más de cien años … sin embargo, cuanto más lo abres, más nuevo se vuelve.”

Sophien apoyó la barbilla en su mano, mirando el rostro de Epherene. Las emociones que cruzaban su rostro eran difíciles de describir. Ihelm se quedó estupefacto.

“¿Deculein, tú? Tú, ¿qué … qué? ¿Co-autor?”

La voz quebrada y entrecortada demostró su desconcierto.

“¡Aun así, creo que necesitamos una explicación sobre el co-autor! ¡¿Profesor Deculein?!”

Deculein asintió y respondió con indiferencia. Su tono era de narración más que de defensa.

“La idea base es de Kagan. Fue una idea creativa y ingeniosa en la que nadie más pudo pensar.”

Deculein miró a Epherene, cuyos ojos ahora estaban hundidos y llorosos.

“Kagan Luna estableció la estructura para esta tesis, y mi parte fue su desarrollo y finalización. Por lo tanto, era correcto marcarnos a los dos como autores.”

“¡Ya veo! ¡Continúa con tus preguntas entonces, Ihelm!”

“….¿Por qué Ahora?”

Ihelm habló como si su espíritu hubiera huido de él por completo.

“¿Por qué Ahora?”

“…¡Mmm! ¡Yo hare la pregunta en su lugar! ¡No creo que Ihelm esté en una buena situación en este momento!”

Adrienne se acercó en lugar de Ihelm con una sonrisa.

“Esta no es la primera vez que el Profesor Deculein acosa a sus asistentes, ¿verdad? ¡Hay mucha gente que se han arruinado! ¡Algunas personas se suicidaron! Así que, ¿por qué demonios eres considerado con tu antiguo asistente ahora?”

“No es solo ahora. Poco a poco me di cuenta de algo y ahora reconozco mis errores pasados.”

“Hmm…”

Adrienne asintió.

“¡Es así! ¿Tiene Epherene algo más que decir?”

Epherene se estremeció bajo la brillante sonrisa de Adrienne.

“Ah….Yo…”

Epherene tragó. Luego, miró a Deculein, Adrienne e Ihelm, uno tras otro. Ella estaba confundida. No sabía que Deculein haría esto, pero no podía limitar lo que sentía a un sentimiento unidimensional como ese.

“…”

El hecho de que Deculein admitiera honestamente que su padre era su co-autor, que sería recordado para siempre en el mundo mágico, dio lugar a ciertas preocupaciones complejas. Se sentía como … una tonta de cabeza de piedra.

“…No. No tengo nada más que decir.”

Clang—! Clang—! Clang—!

La presidenta blandió su mazo.

“¡Hagamos un breve descanso! ¡Descansen!”

 

*****

 

Había una terraza en el área de alto nivel cerca de la sala de reuniones. De pie junto a la barandilla decorada como árboles, se podía ver toda la universidad extendiéndose debajo de ellos. En este momento, todo el mundo estaba empapado de la luz de la luna llena.

Paso—!

Poco después, se escuchó el sonido de alguien acercándose, dando un paso para ser escuchado. Su grasiento cabello rubio ondeaba con el viento, y el espeso aroma de colonia que emanaba de ellos atormentaba mi nariz.

“… No sé cuál es tu motivo oculto.”

Ihelm. Caminó lentamente y habló mientras miraba el mismo paisaje que yo.

“¿Lo sabías? ¿Había magia oculta en la tesis o no?”

Asentí. Lo había descubierto mientras lo estaba desarrollando; fue una trampa muy inteligente.

“¿Qué hiciste?”

“Lo dejé como está.”

Habría sido fácil de desmontar; No tomó un poco más que ajustar suavemente el circuito poco a poco.

“….”

Ihelm agarró la barandilla con fuerza hasta que hizo un sonido.

Kadeuk—

“¿Por qué? ¿No odiaste a Luna?”

Volví a mirar a Ihelm. Este tipo fue una vez el más cercano a Deculein. Por lo tanto, habría conocido a Deculein mejor que nadie.

“Debes haber odiado a Luna … y a la hija de Luna.”

Supongamos que hubiera vivido como Deculein. A veces, recuerdos que no eran familiares salían a la superficie, desencadenados con el paso del tiempo o, a veces, por ciertas experiencias. Sin embargo, dado que todos ellos eran meros fragmentos, se necesitaba una verificación cruzada.

“… Decalane no podría estar satisfecho conmigo.”

Hablé con Ihelm como si estuviera hablando solo. Los profundos ojos rojos de Ihelm me devolvieron la mirada.

“Mi talento debe ser carente, ya que no crecí tanto como él esperaba. O, tal vez, la codicia de su espíritu difunto era demasiado grande.”

“…”

“Sea lo que sea, Decalane no estaba satisfecho. No tenía el talento del Archimago que él quería.”

Ihelm asintió un par de veces. Entonces, respondió.

“Eso es correcto. Si Decalane no hubiera muerto, habrías perdido tu asiento como Cabeza con Luna. Pero eso sigue siendo dudoso. ¿Hubiera sido tan fácil poner a un niño de una línea familiar diferente a la Cabeza de la familia Yukline?”

No, Decalane no tenía la intención de convertirlos en la Cabeza. Solo necesitaba un contenedor, uno adecuado para llevar la mente moribunda de alguien.

“Decalane ya está muerto. Todo ha cambiado.”

“Aun así, el tú que conozco debe haber odiado a la hija de Luna. No habrías podido perdonar a Kagan.”

“Kagan y tú, había suficientes razones para que ambos se odiaran. Si ese tipo no hubiera besado el trasero de Decalane …”

Miré al cielo a lo lejos, donde la luna llena colgaba pesada.

“De todos modos, está en el pasado y este estudio aún no se ha completado. Su finalización depende de Epherene, no de mí. Y también …”

“Su suicidio es culpa mía.”

La mandíbula de Ihelm cayó, haciendo una expresión bastante tonta.

“No puedo odiar a la hija después de matar al padre.”

“….que.”

Ihelm logró una respuesta, una capa de sudor frío formándose sobre su frente.

“¿Sentiste pena por Epherene?”

“No.”

“¿Entonces? Entonces, ¿Por qué demonios?”

“…”

Pensé, inmóvil. Presumiblemente, no fue simpatía o compasión. Sin embargo, no fue fácil saberlo. Mis emociones no se podían ver con [Vision].

“No lo sé.”

Pero lo leí en un libro hace algún tiempo y tuve la impresión de que un mago debe sentirse así al menos una vez en su vida.

“Creo que pienso en esa niña como un discípulo.”

Había encontrado ese sentimiento sin siquiera saberlo. Helm se quedó sin habla.

“…”

Su mano que sostenía la barandilla aflojó su agarre. Una ráfaga de viento lo enfrió y una sonrisa fingida encontró su lugar en sus labios.

“Ja…..ja. Eso no tiene sentido.”

“¿Qué quieres decir?”

“¿Fue hace unos años? Cuando Glitheon intentó exterminar a todos de la familia Luna, ¿no fuiste tú quien lo detuvo? No podrías haber tenido este tipo de cambio de opinión.”

Era un hecho que realmente no sabía, pero Ihelm frunció el ceño como si estuviera estupefacto.

“….uff.”

Él no respondió. Simplemente negó con la cabeza y suspiró.

“¿Sabes qué? Esta es mi última lucha.”

Luego, miró hacia la escena nocturna con una expresión pacífica.

“¿Co-autor? No puedo atacarte más allá de esto. No, ni siquiera tengo la voluntad de continuar.”

Ihelm se inclinó. Su cuerpo caído era como ropa sucia colgada de la barandilla.

“…Has cambiado. Si el Deculein ahora ya no es el Deculein del pasado, si no quiero derribarte …”

Yo lo miré. La luz de la luna impregnaba sus ojos rojo intenso, que siempre habían estado podridos. Sin embargo, ahora, había una vitalidad desconocida brillando en su interior.

“No quiero ser el único que está atrapado en el pasado.”

En ese mismo momento, Ihelm gritó.

“Hey!”

Flinch—

Alguien en la entrada de la terraza comenzó a moverse.

“Date prisa y corre. Antes de que te atrapen.”

Luego—

Dadadadada—!

El sonido de alguien corriendo.

Boom—!

El sonido de alguien que se cayó mientras corría y se golpeó las rodillas contra el suelo.

“…”

Miré a Ihelm, quien solo se encogió de hombros.

“… No la traje aquí. Solo le dije que me siguiera si ella quería saberlo. Es por eso que deliberadamente no dije nada inútil.”

Ihelm desvió la mirada, como si ahora mirara hacia el pasado.

“Kagan no era una persona normal. El hecho de que no amaba a su hija, o que estaba resentido… es demasiado cruel decir esas cosas, ¿verdad? Pero aun así, ella es mi testigo.”

Él sonrió.

“Yo también soy un caballero.”

 

*****

 

Didididi — dididididi

Sonó el despertador y Epherene abrió los ojos sin comprender.

“…”

También hoy tuvo el mismo sueño.

— Este estudio aún no se ha completado. Su finalización depende de Epherene, no de mí. Y también…

— Su suicidio es culpa mía.

La conversación entre Deculein e Ihelm se repitió en su mente.

— No puedo odiar a la hija después de matar al padre.

Cada palabra que decía Deculein se repetía en sus oídos.

— …No lo sé. Creo que pienso en esa niña como un discípulo.

Discípulo.

Dididididi — dididididi

Apagó el despertador que seguía sonando y se puso de pie lentamente. Echó un vistazo al trozo de papel que estaba sobre su escritorio: el formulario de renuncia. La audición de Deculein aún continuaba después de tres días, pero escuchó que no era tan intensa como el primer día. Quizás, Ihelm también se había rendido.

— ¿Fue hace unos años? Cuando Glitheon intentó exterminar a toda la familia Luna, ¿no fuiste tú quien lo detuvo?

Epherene pensó en la relación entre Luna y Yukline. Fue una preocupación que continuó desde el momento en que abrió los ojos por la mañana hasta que se quedó dormida por la noche.

— Si ese tipo no le hubiera besado el trasero a Decalane …

Si la anterior cabeza de Yukline la quería, y si eso era lo que quería su padre … y si Deculein estaba bajo el estrés de que le quitaran el hogar Yukline …

“…Haa.”

Epherene suspiró y miró a su alrededor de la habitación una última vez. Un interior limpio y ordenado la recibió. Ella tiró lo que no necesitaba y empacó todo lo que pudiera resultar útil.

“Esto es…”

Ella no causaría ningún inconveniente porque había limpiado la habitación. Tomó la carta de renuncia y se puso la mochila que estaba a punto de explotar por estar llena hasta el borde.

“Vamos ~, volvamos a casa ~.”

Epherene, preparándose para irse mientras murmuraba, se detuvo de repente.

“…Huh?”

Encontró un sobre debajo de la puerta. No estaba allí ayer, ¿había llegado esta mañana? Epherene recogió el sobre grueso y lo abrió para revelar una carta y un certificado en su interior. Lo leyó sin pensarlo mucho, con el corazón hundido.

“….Ah.”

Epherene dejó escapar un pequeño grito. Todo su cuerpo estaba rígido; no sólo sus brazos y piernas, sino que también su cabeza se había detenido. Atónita, leyó el contenido del certificado.

 

[Certificado de Patrocinio de la Torre]

■ Asunto: Solda Epherene Luna

■ Monto: 100.000 Elnes.

 

El patrocinio anónimo que comenzó desde el día en que ingresó a la torre se cumplió nuevamente. La fecha en la que se fijó el patrocinio fue ayer, y el contenido de la carta era solo una línea.

— Te estoy animando.

“No….!”

Tan pronto como vio la carta, Epherene tiró su mochila. Salió corriendo del dormitorio. Su cuerpo conocía el destino, por lo que sus piernas se movían solas. Corriendo, corriendo y corriendo como loca, llegó a la torre, se paró frente al lento ascensor, entró y apretó el botón del 77º Piso

Ding—!

Cuando recuperó el sentido, su placa de identificación ya estaba ante sus ojos.

 

[Oficina del Profesor Titular: Deculein]

 

Epherene leyó la placa, su corazón latía como si estuviera a punto de romperse. Las lágrimas corrían por sus mejillas.

— Te estoy animando.

Esa frase que leyó antes le arrancó el corazón del pecho.

“….¿Porque?”

‘Iba a traicionarte. Fui a ponerme del otro lado. Actué apresuradamente a pesar de no saber nada, y aun así, hasta cierto punto, estoy resentida por haber matado a mi padre.’

Este odio nunca desaparecería.

“Por que…?”

Toc toc—

Epherene llamó a la puerta con manos temblorosas. Después de esperar un momento, la puerta se abrió por sí sola bajo el poder de la [Psicoquinesis] de Deculein.

“Epherene. No has ido al laboratorio últimamente.”

“….”

“5 puntos de penalización por dejar de trabajar.”

Él la reprendió como de costumbre como si nada hubiera pasado, con esa misma expresión inmutable y fría.