Capítulo 42 – El Villano que Quiere Vivir

Una semana antes del examen de mitad de período.

Drent, que ayudaba a Julia con su tarea, estaba interesado en la tarea de Epherene en el escritorio de la sala del club. Había estado en una depresión con su propia tesis y pensó que echarle una mano a su junior le proporcionaría algo de información.

Sin embargo, ni siquiera podía usar su trabajo como referencia. Impulsado por la desesperación, reviso la tarea de Epherene mientras Julia estaba en el baño. Lo que vio le hizo sentir como si la electricidad recorriera su mente.

Finalmente, Drent tomó la idea de Epherene como propia.

Sin embargo…

“Parece que no lo sabes, así que seguiré adelante e incluso te haré un favor haciéndote preguntas más sencillas. Ahora, esa magia que acabas de manifestar, [Preservación de Fuego] …”

Deculein reprodujo el hechizo de Drent. Sin embargo, una mirada sería suficiente para deducir que su bola de fuego era mucho más densa.

“¿Estás seguro de que esta magia nunca se distorsionará bajo el agua, sin importar la altitud? ¿Se aplicará esta igual cuando este bajo tierra?”

“Sí, Sí. Eso es correcto.” Drent reunió sus sentidos y respondió. No tuvo tiempo suficiente para comprender la tesis de Epherene por completo, pero la entendió hasta cierto punto …

“Si es así, dímelo. ¿Qué lo hace posible?”

La bola de fuego que Drent describió en su tesis se elevó en el aire. Deculein ya había determinado su base.

“¿Qué circuito de esta técnica causa el efecto de ‘preservación’?”

“Uh … Eso …”

Se quedó sin palabras. Su profesor se limitó a mirarlo, su silencio arrasó toda el área como vientos despiadados.

“…”

No importaba cuánto tiempo esperaba. La defensa no pudo responder. En poco tiempo, el tono gélido de Deculein envolvió el edificio.

“Puedo hacer cientos de preguntas derivadas de este escrito.” La mirada del profesor titular lo hizo sentir patético, sus labios torcidos llenos de desprecio aún más. Sus siguientes palabras lo humillaron aún más. “Pero ni siquiera puedes responder el más fácil de ellos. ¿Puedes llamar a esto tu tesis a este ritmo?”

Drent apretó los dientes, sintiendo su ira surgir desde lo más profundo de él. Cuando estaba a punto de gritar, Deculein continuó interrumpiéndolo.

“Terminaré mi declaración dejándote con el peor llanto que jamás hayas hecho.”

“…!”

Sostenía el escrito de la defensa en una mano. “Inténtalo otra vez. Por tu propia cuenta.”

Schrrrk….

El escrito se incendió y pronto se redujo a cenizas mientras revoloteaba, casi como si estuviera tratando de liberarse. La escena provocó una pequeña conmoción entre el público. Incluso los ojos de Sylvia se agrandaron debido a lo que presenció.

“…”

Drent no pudo decir nada.

Ahora agotado de toda la fuerza que poseía para responder, dejó escapar una risa amarga.

Deculein lo sabía.

Todo.

El examinado salió pisando fuerte del escenario, sin dejar nada más que un pesado silencio.

“Ese loco. Nadie podría responder si los presiona tanto.” Enfurecida, murmuró Julia. Epherene también sentía lo mismo, pero algo parecía extraño en eso.

“E-el … Segundo mago …”

El anfitrión también tartamudeó, aparentemente desconcertado.

Todavía quedaban 22 magos que debían someterse a evaluación pública.

“Por favor quédense callados. Asistente de cuarto año, Solda Malone. Por favor suba al escenario.”

Apareció el siguiente mago, que ya parecía aterrorizado.

Se había puesto pálido y temblaba, parecía que se saltaría su turno si fuera posible.

“Soy M-Malone, un mago de rango So-Solda…. Mi tesis es sobre…”

Pronto explicó su tesis, y esta vez también, Deculein escuchó con atención y formuló preguntas sobre la base de su investigación.

“La razón por la que configuré esa magia como parte de la serie de control es …”

Malone respondió con éxito a todas las preguntas del profesor titular a pesar de que tartamudeó. Después de unos minutos, Deculein asintió, aparentemente satisfecho.

“Eso es suficiente.”

Desde que vio de cerca cómo el presentador antes que él quemara su tesis, se inclinó, sintiéndose muy afortunado.

“¡Gracias!”

 

*****

 

Tan pronto como terminaron las defensas, subí a mi oficina privada.

Toc, toc—

Allen entró a la oficina poco después de que yo llegué, llevando algunos documentos en una mano. Parecía encantado.

“¡Profesor! He seleccionado cuidadosamente a los mejores.”

“¿Ellos?”

“Sí. Los magos que quieren estar bajo su mando.”

“… Deja la lista y regresa.”

“¡Como desee!”

Allen dejó los documentos en mi escritorio y salió de mi oficina. Hojeé los papeles.

“Kloen … Gloan …”

Ninguno de ellos era notable o famoso. Al contrario, no todos podrían seguir estudiando aquí a menos que los tome bajo mi protección.

“¿Debería utilizarlos como jornaleros?”

Cuando estaba a punto de dejar la lista …

Wooooong—

Sentí una pequeña vibración en mí. Era la canica de cristal.

Lo imbuí de maná, estableciendo comunicación. Pronto escuché una voz que venía de allí.

— ¿Estás ahí?

“Habla, hermana mía.”

— …

Charlotte se quedó en silencio, haciéndome pensar que reflexionó un momento.

— Ja…

Después de dejar escapar un profundo suspiro, habló con voz seca y agrietada.

— Tenemos que irnos ahora. No hay tiempo.

“Ya veo.”

Saqué un mapa de inmediato. Hacía mucho tiempo que había investigado todas las rutas posibles que pudieran tomar.

“Sigue mis instrucciones.”

— ¿Qué quieres decir?

“Cruza el Cañón de Crebas.”

— … ¿Hablas en serio?

El ‘Cañon de Crebas’ era una carretera abandonada que no era propiedad de ningún país. También estaba plagado de magia oscura, lo que lo hacía extremadamente peligroso.

No era diferente a cargar de cabeza contra los mayores horrores del mundo, pero era la única salida de Charlotte.

“Es un atajo al Principado de Yuren. Nadie lo posee, por lo que no causará un conflicto diplomático con Reok.”

— Lo sé. Lo he considerado, pero …

“Yo mismo te guiaré.”

— …

El Cañón de Crebas no estaba lejos de Hadekain. Solo se necesitarían de 3 a 4 horas para llegar a caballo.

Yo tenía la última palabra sobre dónde se llevaría a cabo el MT de mago, así que si configuro el MT para que se superponga con el día en que Charlotte y la Princesa Maho regresarían a su reino, podría cubrir toda la distancia sin perder tiempo.

— ¿Personalmente estarás con nosotros?

“Eso es correcto.”

— … Escuché que el Reino Reok te atacó en Bercht.

Fruncí el ceño.

¿Fueron ellos los que estaban detrás de ese ataque?

No conocía la información que conocía Charlotte. Mi red de inteligencia claramente necesitaba ser renovada, ampliada y reforzada.

— ¿Su ataque te hizo odiarlos tanto que no puedes evitar tomar represalias?

“Charlotte.”

— ¿Qué?

“Soy una persona extremadamente política. Además, cuando se trata de asuntos relacionados con la inteligencia o el discernimiento, sabes que soy mucho mejor que tú.”

— Qué me acabas de decir, engreído—

“Quiero que tu princesa viva y traiga las ganancias de mi familia y mi patrimonio.”

— …

“No te estoy haciendo un favor. Este es un acuerdo comercial. ¿Por qué estás involucrando tus sentimientos personales? ¿Acaso eres tonta?”

El tono indiscreto de Charlotte me irritó.

No estaba seguro de si era una buena respuesta, pero al menos ella respondió con una voz más segura.

— … Entiendo. Si cumples con tu deber con la princesa con éxito, les haremos cualquier favor.

“Es un trato, entonces.”

— ¿Dónde nos encontraremos contigo? ¿En la entrada de Crebas?

“Sí. Si ni siquiera puedes llegar allí, entonces no tiene sentido, ya que no podrás sobrevivir al viaje que seguiría.”

— Bien. Espero que tus habilidades sean tan afiladas como tus palabras.

Nuestra conversación terminó ahí.

Sentado en mi silla, murmuré. “… ¿Debería usar esto como una oportunidad para probar eso?”

El Cañon de Crebas era una zona peligrosa. Eso no se puede negar. Estaba tan lleno de magia oscura que estaba cerca de ser una guarida de demonios o una mazmorra. Los demonios aparecían con frecuencia allí cuando no tenían nada mejor que hacer.

Sin embargo…

—— [Yukline] ——

◆ Grado: Linaje ◆ Descripción: El poder de este linaje se desata al castigar al diablo. Permite a los descendientes de Yukline usar su maná para purificar áreas con demonios o una gran concentración de magia oscura. La calidad del maná purificado aumenta en [1 etapa].

Mi linaje usaba la energía del diablo o la magia oscura no purificada como su propia fuente de energía.

En lugares llenos de tanta magia oscura, a los seres humanos les resultaría difícil incluso respirar, [Yukline] eliminó todas las restricciones sobre mi maná.

Por lo tanto, áreas como Crebas no eran diferentes de ser el territorio de origen de la Familia Yukline.

“… Incluso recuerdo con precisión su ruta.”

Eso hizo que mi decisión de tomar el camino del cañón se solidificara aún más. También lo despeje así en el juego.

Quizás Charlotte ya tenía a Crebas en el fondo de su mente.

Toc toc—

La puerta se abrió inmediatamente.

Para mi sorpresa, apareció Zeit, empujando su enorme cuerpo a través de la puerta. “¡Profesor Deculein!”

“… Lord Zeit. ¿Qué le trae por aquí?”

“¡Cenamos esta noche!” Él sonrió.

Miré el reloj.

3 P.M.

Era un poco temprano para cenar.

“Ah ~ Definitivamente debería organizar una comida una vez al mes. No ves a Julie estos días, ¿verdad? Iremos antes que tu para prepararnos. Asegúrate de traer a mi hermana contigo.”

Había una cierta ‘duda’ en la mirada y la voz de Zeit.

Su físico era como un oso, pero sus ojos eran como un zorro.

 

*****

 

6 P.M.

Incapaz de resistir la persistencia de Zeit, Julie se preparó para salir de la mansión a cenar.

‘A partir de hoy, vendré aquí mensualmente para observar su progreso.’

Esas fueron las palabras de su hermano.

Ella suspiró mientras se ponía la armadura y la capa, luego se miró en el espejo.

“…”

Su fatiga era evidente en su rostro.

Debido a que la investigación del caso Veron se superpuso con la gran carga de trabajo provocada por la muerte del emperador, ni siquiera tuvo una hora para descansar estos días.

Habían pasado dos semanas, con su agenda siendo así de caótica.

No quería hacer verificaciones de antecedentes, recurrir a un gremio de ladrones o incluso encargar un gremio de aventureros. Por lo tanto, ella cargó con la carga sola.

Toc, toc …

Un sirviente habló con un toc.

“¡Mi Lord! ¡Es hora!”

Julie salió.

Ella solo iba a montar a caballo, pero un auto brillante ya se acercaba desde el otro lado de la mansión.

Mirándolo con los ojos entrecerrados, ella ya sabía quién era.

Deculein.

Una de sus puertas se abrió cuando se detuvo frente a ella. “Entra.”

“Por casualidad, ¿Lord Zeit te dijo …?”

“Él sospecha de nuestra relación.”

“…”

“Entra.”

Julie asintió vacilante y se subió al auto después de despedirse de sus sirvientes. Se fueron de inmediato.

Mientras los dos se revolcaban en un incómodo silencio, ella se preguntó si el mes que había prometido ya había pasado.

Deculein miró por la ventana y rompió el hielo.

“… ¿Sigues investigando el caso?”

“…” Ella no respondió. La miró mientras continuaba.

“Es mejor si no lo haces. Solo te estás lastimando—”

“Está bien.”

Ella lo cortó con firmeza, expresando su claro rechazo a su idea. Deculein no siguió adelante.

Estaba en silencio.

Su coche de lujo avanzaba silenciosamente por la carretera perfectamente pavimentada. Estaba tranquilo y cómodo.

“Eres bastante frustrante, Julie.” Habló de nuevo como si un recuerdo cruzara por su mente.

“…”

Ella no respondió sin importar cuánto tiempo esperó. Giró la cabeza y la miró.

“…”

Julie tenía los ojos cerrados.

Con la cintura erguida y ambas manos descansando modestamente sobre sus rodillas, se quedó dormida, incapaz de superar su fatiga.

Deculein sonrió y, al darse cuenta de que su cabello despeinado estaba a punto de meterse en su boca, se acercó a ella para moverlo.

Luego le pellizcó la mejilla ligeramente por impulso. Era suave.

Ella se balanceó de un lado a otro mientras se dirigían al lugar. Aunque era un poco tarde, sacó un libro de su maletín.

No registró ni una palabra en su mente, pero de todos modos pasó las páginas. Poco después, habló con su conductor.

“Escuché que tomará alrededor de un cuarto de día llegar allí.”

“Sí, sir. Entiendo.”

Gracias al rápido ingenio de su conductor, el auto dio vueltas repetidas veces por la misma carretera, incluso después de que ya había pasado una hora desde la hora acordada para su cita, que eran las 7 de la tarde.

Alternó entre leer su libro y mirar a Julie. Después de un rato, miró su reloj.

9 P.M.

El paso del tiempo hoy fue sorprendentemente rápido, casi como si le faltaran algunos de sus fragmentos.

“… Mmmh.”

Ya eran las 10 P.M cuando Julie se despertó de su sueño. Mirando a su alrededor con los ojos todavía caídos, pronto se sorprendió por la vista fuera de la ventana del automóvil, lo que la hizo saltar como un resorte.

“…!”

“Oh, estás despierta.”

“Está oscuro …”

“Ya es tarde.”

Deculein explicó la situación mientras ella se aferraba a la ventana. Sacó su reloj de bolsillo y el coche se detuvo al mismo tiempo.

Su conductor luego salió como si hubiera algo mal con su vehículo.

“Son las 10:30. Nuestra cita para cenar probablemente había terminado hace mucho tiempo, por lo que ese evento fue la primera promesa que rompí.”

“¿Por qué … no me despertaste …?”

“Es mejor estar ausentes juntos que asistir a una cena incómoda de todos modos. Esto también borrará sus sospechas de una manera mucho más efectiva.”

“…”

Julie se sonrojó al darse cuenta de lo que quería decir.

Siguió mirándola, sus ojos envueltos por la sinceridad.

“Julie.”

“… ¿Sí?”

“Ahora que lo pienso, nuestro contrato está retrasado.”

Sus ojos se abrieron como un ciervo mirando fijamente a los faros de luz.

“Probablemente no va a durar más de un año con la sospecha de Zeit. Deberías poder convertirte en el Caballero Guardián dentro de ese período de tiempo. Cumplirás 30 el año que viene, por lo que serías la más joven en alcanzar esa posición en la historia del imperio.”

Deculein extendió la mano y arregló el cabello de Julie, que se volvió desordenado mientras dormía.

Ella no rechazó sus avances. Más que su toque, las emociones en su voz eran mucho más fuertes.

“Si no puedes convertirte en el Caballero Guardián dentro de ese tiempo, es posible que tengamos que casarnos después de todo.”

“…”

“Así que, no te quedes atascada en un solo lugar.”

Ella lo miró a los ojos sin decir una palabra, tomándose su tiempo para pensar en sus palabras.

Muy pronto, hizo la pregunta de la que tenía dudas.

“¿Por qué … por qué me muestras cómo te sientes?”

“…”

“Hay mujeres más hermosas que yo. Hay mujeres que no solo saben cómo usar espadas, sino que también son hermosas, no sofocantes y flexibles, a diferencia de mí.”

Él miró por la ventana, haciendo que la luz de la luna llenara sus ojos azules.

“… Julie.” Su voz sonaba serena y edificante. “Detesto absolutamente conceptos sin sentido como el destino, la fortuna y los horóscopos.”

“…”

“Sin embargo, hay momentos en los que siento que algo a lo que no puedo resistir definitivamente existe.” Deculein miró fijamente a la luna en el cielo.

“Eso es lo que eres para mí.”

Julie entendió lo que quería decir. Pero al mismo tiempo, dudaba. El viejo Deculein nunca diría esas palabras.

“… ¿Es así?”

¿Qué lo cambió tanto?

Deculein habló de nuevo.

“Por eso sería beneficioso para los dos permanecer lo más lejos posible el uno del otro. De esa manera, no volvería a ser mi antiguo yo.”

Se inclinó.

Pensando que él estaba a punto de hacer algo, su cuerpo sorprendido se puso rígido e instintivamente asumió una posición de contraataque.

Clack—

Deculein abrió la puerta.

“Que descanses bien. Estuve ausente de la comida, lo que significa que Zeit probablemente aún me esté buscando.”

“…”

Ella lo miró en silencio.

“Baja.”

“… Okey. Cuídate.” Ella asintió con la cabeza y se bajó del coche.

Un viento fresco pasó a su lado. No sabía cuánto había dormido, pero el mundo se había vuelto más oscuro y su corazón más tranquilo.

La dejaron cerca de su mansión.

“Ah, ¿ha terminado?”

El conductor regresó al auto y partieron poco después.

Julie miró a Deculein a través del espejo retrovisor por un momento antes de irse a casa.

“Ah, mi lord, está aquí.”

Los sirvientes de la sala la saludaron. Ella respondió con una leve sonrisa.

“Tengo mucha hambre. ¿Puedes preparar la cena?”

“¡Ah, sí! ¡Por supuesto!”

Los sirvientes se movieron afanosamente. Era la primera vez en casi dos semanas que había pedido comida en la mansión, por lo que hicieron todo lo posible para cocinarle la mejor comida.

Julie comió comida deliciosa y durmió bien esa noche. Después de tanto tiempo, finalmente logró acostarse en su cama sin pensar en el trabajo.

Sin embargo, sus palabras seguían apareciendo en su mente.

‘Sin embargo, hay momentos en los que siento que algo a lo que no puedo resistir definitivamente existe…’

Pensó que no tendría pesadillas esa noche.

 

*****

 

“¿Deberíamos seguir avanzando un poco más?” Preguntó Roy.

Negué con la cabeza. “Vamos a casa.”

“Entiendo.”

Suspiré con una sonrisa y luego me reí.

Pensé que debería alejarme de Julie de ahora en adelante. Cuanto más tiempo pasara, más amaría cada aspecto de ella.

Por supuesto, mantenerse alejado de ella resultaría difícil. Por eso tenía que convertirse en Caballero Guardian. De esa manera, ella misma se mantendría alejada de mí.

“Hemos llegado.”

“Buen trabajo.”

Salí de la mansión.

En el camino del jardín, encima de un arbusto. Un halcón me estaba mirando.